Ahh~~~  me lei todo el fic pero no ta el final porfavor subelo denuevo please:MUA: tu fic es genial me encanta el lemon 0///0 (espera eso sobo muy pervertido:KEKE: :$: ) pero no lo puedo evitar Ajjajajaja  me encanta el Ontae porfis mandame el final para  no quedarme con las ganas  ..... eres la mejor gracias por hacer el fic y hechar a volar mi imaginación

estoy muy triste no pude ver el capitulo final u.u llorare .... siii vez el capitulo por favor!!!!!!!! vuelvelo a subir quiero ver en que termina este fic

KimChinMae escribió:Chicaaas!! AQUÍ ESTÁ EL ÚLTIMO CAP !!!!!  

Si quité el último capítulo fue por mis razones, ¿no? Asi tendré que pedirle a un mod que cierre el hilo o algo ¬¬
Además, imagino que para apartar y leer si estás pero para comentar no... vaya

tan hermoso mi taemin

Oh~!Éste fic lo leí hace tiempo pero no lo encontraba y tampoco recordaba el nombre uwu. Pero, al fin lo encontre asjakda <3. El ontae es tan bello, aunque en esté fic sean unos pervertidos de lo peor y Taemin un "chico rebelde". Me encanta sin importar cuantas veces lo lea, jí. Gracias a la autora (?)

Hola, no puedo ver el capitulo final uwu, me gusto mucho ♥

aparto! :WOW:
oh el OnTae estan kawaii! :Waa:
realmente me encanto el fic
Tae de rebelde es genial y con un profesor asi :WOW:
jejeje

Pero... pero yo quiero el final y el epílogo Este fic lo bajaron de Amor yaoi y tenía la esperanza de poder leerlo completo acá otra vez, WHY ;-;

Hola soy nueva por aki y en kuanto lei tu fic me encanto lo ame, xfa sube el cap final la verdad me kede toda emocionada xfa xfa xfa xfa xfa te lo suplico esta super tu fic kisiera saber k es lo k pasa kn esta mona pareja xfa xfa xfa xfa

Wina escribió:

Spoiler:

Capítulo VII

-Hyung, esto pesa demasiado.

-Que no me llames Hyung, mocoso.

Dejó la caja sobre el suelo y fingió un puchero.

-Que me alimentes no te da derecho a obligarme a llamarte umma.

El otro imitó el acto de su compañero y soltando la caja que llevaba en sus manos se dispuso a hacer cosquillas al pelirrojo.

-¿Quieres una umma feliz o una umma vengativa? ¡Puedo dejar de hacer ese postre de fresas que tanto te gusta si no me obedeces!

El menor se agachó tratando de evitar aquellas manos que paseaban por su estómago provocando pequeñas carcajadas que salían de sus labios, cuando lo vio necesario el chico le soltó para recoger de nuevo la caja de cartón que había dejado.

Taemin aspiró aire como pudo para recuperar su respiración, en sus labios quedaron una débil sonrisa mientras seguía a su Hyung.

-Pero Key Hyung, ¿va a caber todo esto en el departamento de tu novio?-preguntó incrédulo mirando el interior de la furgoneta, ciertamente ésta se encontraba abarrotada de cajas llenas de ropa, zapatos, accesorios y cosméticos, y hasta donde Taemin sabía, el novio de Key vivía en un departamento pequeño.

-No te preocupes, pequeño, mi Puppy me conoce de sobra y sabe perfectamente a lo que se expuso cuando me propuso vivir con él, ¿vamos? ¡Tengo ganas de que lo conozcas!

Taemin, no demasiado convencido, asintió con la cabeza y subió al asiento copiloto colocándose el cinturón de seguridad, Key puso en marcha el coche, Taemin sacó la cabeza por la ventana admirando el paisaje que dejaban atrás.

Había cortado su cabellera, tiñéndosela de rojo; su primer cambio al entrar a la universidad, o al menos visible.

Por supuesto, la universidad a la que asistía no era ni por asomo la mitad de prestigiosa como imaginó durante toda su vida, pero después de montar el escándalo en las oficinas de su empresa e irse de casa dudaba que su padre fuera a costearle los estudios. Se vio en la necesidad de pedir prestado dinero a su hermana para pagar la Casa Mayor donde vivía*(no sé como le dicen en vuestros países, pero Casa Mayor es donde viven los estudiantes de un lugar con compañeros de cuarto en caso de ser de bajo nivel), gracias a sus buenas calificaciones logró entrar a la universidad por una beca.

Después de la ida de Jinki seis meses antes Taemin recapacitó sobre lo que quería en la vida y si estaba contento de lo que conseguía, y decidió hacer caso a su ex profesor y perseguir su sueño de estudiar pediatría. Dejó su ciudad atrás y lo apostó todo a la una, dejando de ser el títere de su padre; de ahora en adelante los problemas que enfrentase su familia no eran asunto suyo, su hermana a veces lo visitaba; sus reuniones resultaban incómodas por el pasado que ambos habían compartido pero los dos tenían deseos de mejorar su relación.

-¿Pongo la radio?

Taemin asintió sin dejar de ver el paisaje, Key había decidido mudarse a casa de su novio, y por ende, cambiarse de universidad, lo que entristecía a Taemin porque vivirían alejados el uno del otro.

También siguió otros consejos del mayor, aún continuaba pensando que el ochenta por ciento de la población era idiota, pero ahora se tomaba la molestia de verificarlo, y afortunadamente su compañero de cuarto, Key, resultó ser una persona interesante de quien no le costó hacer una amistad.

No había cambiado, seguía siendo una persona arisca y silenciosa, pero se estaba dando el lujo de ser feliz. Y no olvidaba que todo era gracias a la experiencia que fue para él conocer a Jinki. Por él, se dio cuenta de su comportamiento infantil y lo absurdo que era odiar que sus planes fracasaran cuando ni había intentado llevar a cabo estos, le abrió los ojos y experimentó lo que era confiar y amar a una persona. Le dolía su partida, pero había decidido guardar su recuerdo, empezar a disfrutar la vida y su meta se había convertido, en un futuro, volverlo a encontrar siendo una persona más cambiada y madura capaz de estar a su altura.


-¡Onew eso es cristal!

Un sonido estridente inundó todo el lugar, Jonghyun se pasó una mano por la cara.

-¡Ese jarrón me lo compró mi hermana mayor! ¿Qué voy a decirle ahora?

Jinki le miró desde el suelo donde estaba agachado recogiendo los pedazos de cristal, bufó para quitar el flequillo que tapaba los ojos y lo miró molesto:

-¡Pues dile que el inútil de su hermano no tiene dinero para contratar un servicio de mudanzas y que chantajea a sus amigos para hacer el trabajo sucio!

El semblante de Jonghyun cambió inmediatamente.

-Eh, eh, no, no, esto no es chantaje, yo te doy trabajo y tu me ayudas con la casa, todo perfecto.

-Claro, para eso están los amigos.-bufó Jinki, se puso de pie mientras Jonghyun se pasaba una mano por la cara.

-Y aquí viene de nuevo el carácter bibliotecario amargado.

Jinki le señaló con un dedo.

-No vuelvas a llamarme así, y-miró alrededor-¡Dios, Jjong! ¿Qué más piensas sacar?

Ciertamente, el departamento parecía haber sido saqueado por ladrones.

-Bueno-Jonghyun se puso una mano en su nuca-mi Diva es muy exigente y piensa cambiar la decoración de la casa.

-Ugh-Jinki puso una mueca-Diva.

-¿Piensas poner esa cara cada vez que lo llame así?

-Sabes que sí.

Jonghyun miró su reloj.

-Tiene que estar por llegar, dijo que vendría con un amigo de la universidad que lo ha ayudado.

-Mmm… -el semblante de Jinki se ensombreció y sin mirarlo dijo- Es cierto, no recordaba que tu novio aún estudiaba.

-Ya, pero hay una universidad cercana, así que…

-¿Cuántos años has dicho que tenía?

-Diecinueve.-contestó Jonghyun sin entender la pregunta de su amigo.

-Y tu tienes veinticinco… hay demasiada diferencia de edad, ¿no?

-¡Vaya, Onew! ¡Eso no importa!

Jinki lo miró extrañado.

-Aún si es menor que yo no hay ningún problema.

Jinki pensaba contestar pero decidió no hacerlo.

Estaba feliz por su amigo con quien había vivido dos meses antes de que él usara sus contactos para encontrarle trabajo en un instituto público poco higiénico, Jonghyun no dejaba de repetirle lo poco que comprendía cómo había dejado ir una escuela tan prestigiosa como en la que trabaja pero Jinki siempre contestaba con evasivas.

Alquilaba un pequeño piso cercano al de Jonghyun y volvía a convivir con la soledad, pensó que quitarse al adolescente rebelde de la cabeza sería tarea fácil pero para su frustración todo intento era en vano. Por muy estúpido que se sintiese, sentía la mirada de Taemin sobre él: Taemin riendo con ojos brillantes, Taemin comiendo en su cocina, Taemin confuso ladeando la cabeza, Taemin burlón alzando una ceja, Taemin mirándole a los ojos, Taemin sonriendo cerca de su rostro, Taemin besándolo lentamente, Taemin gimiendo bajo su cuerpo, Taemin llorando en sus brazos. Todo lo que pensaba era Taemin y se tomaba por el ser más ridículo del planeta Tierra.

Ni siquiera aquel día que era el cumpleaños de Jonghyun podía sacárselo de la cabeza, y el hecho de que su amigo fuera novio de un chico de edad similar a la de Taemin ayudaba.

-Onew, sé que últimamente tienes el carácter un poco agriado, pero trata de ser amable con Key cuando te lo presente.

Jinki le dio un breve empujón.

-¿Quién está agriado?-bromeó, pero sabía que el más bajo tenía razón, en clase había perdido su constante entusiasmo y muchas veces estaba de mal humor.

-¿Crees que Victoria vendrá a mi cumpleaños?

-No sé.-contestó cortante, para celebrar su cumpleaños, además de traer a Key a vivir con él Jonghyun había decidido celebrarlo en una discoteca cercana y muy concurrida, pero lo que le molestaba a Jinki era que Jonghyun intentase por todos los medios posibles emparejarlo con Victoria.

-Esa cara otra vez…-comenzó Jonghyun pero se quedó callado a media frase quedando pálido-¡Oh, no! ¡Oh, no!

-¿Qué?-preguntó Jinki subitamente asustado.

-¡Me he dejado la llave con forma de corazón que pensaba regalarle a Key en casa de Kyuhyun! ¡Está a punto de llegar, ¿qué hago?!

Jinki hizo lo posible para no hacer otra mueca por las cursiladas de su amigo.

Suprimió un escalofrío cuando notó la mirada de cachorro abandonado que le dirigía Jonghyun.

-¿Quieres que vaya yo? De todas maderas tengo el coche fuera del garaje.-Kyuhyun vivía alejado de la zona.

Jonghyun le abrazó efusivamente, a pesar de todas las pequeñas peleas que tenían era un chico efusivo y cariñoso.

-De todas formas-decía Jonghyun acompañando a Jinki a la entrada- Key trae a su amigo así que tendremos ayuda suficiente. Nos veremos en “el Palace”*(nombre cutre de discoteca xD).

-Sí, ya.-refunfuñaba Jinki antes de salir por la puerta. Quedó pensativo unos segundos y decidió bajar por las escaleras, en el momento que sus pies pisaron el rellano la puerta del ascensor se cerraba, quedó en el piso de Jonghyun y Jinki supuso que sería su novio, se encogió de hombros y se fue al hogar de Kyuhyun.


De nuevo ocurría. Taemin hacía todo lo posible para no juzgar una persona sin conocerla pero viendo a Jonghyun la palabra idiota no desaparecía de su cabeza.

Los veía abrazarse efusivamente soltando palabras como “Puppy” o “Diva” y hacía lo posible por no mostrar un gesto de desagrado.

-Ven, Puppy, mira, este es mi amigo.-dijo Key cuando se separaron llevándolo de la mano hacía él.

-Mucho gusto, soy Lee Taemin.-se presentó forzando una sonrisa y haciendo una leve reverencia. Jonghyun simplemente levanto su mano derecha.

-¡Hey!

“Al demonio los consejos de Jinki”-pensó Taemin-“Alguien capaz de saludar así solo puede ser un idiota”.

-¿No venían a ayudarnos?-preguntó Key, Jonghyun pareció nervioso.

-Le ha surgido algo… ¡vamos, démonos prisa antes que sea de noche!


Aún no habían llegado los amigos de Jonghyun pero Jinki ya estaba sentado en la barra con un vaso entre sus manos, una de las nuevas aficiones que había tomado era la bebida, aquella noche sin darse cuenta se había pasado bebiendo y tenía problemas para visualizar bien los objetos, pero no le importó y seguía pidiendo más.

“Quizás”-pensaba-“a la siguiente copa me olvide de Taemin”.

En la entrada llegaron Jonghyun, Key y Taemin, se dirigieron hacia los amigos del más bajo y éste fue a uno de ellos discretamente.

-Yesung, ¿dónde está Onew?

Parecía incómodo.

-Ya sabes que últimamente, umm, pasa demasiado tiempo en la barra.

Jonghyun gruñó.

-No me digas… que en mi cumpleaños…

Yesung encogió un hombro y Jonghyun tuvo que buscar con la mirada donde estaba su amigo, cuando lo ubicó le miró enfadado.

-¿Tenías que hacer esto también en mi cumpleaños?

Jinki rió, el más bajo puso los ojos en blanco.

-Cómo sea, ¿tienes la llave?

Jinki asintió con una sonrisa en los labios y con dificultad se puso de pie escarbando en el bolsillo de su traje.

-Aquí.-dijo tambaleándose.

Jonghyun cogió la llave.

-No puedo presentarte a Key así.

Jinki volvió a romper a carcajadas, lo cogió por el brazo.

-Añadalo a mi cuenta-ordenó-tú te vienes conmigo al baño a aclararte la cara.

Jinki se dejó llevar sumiso y una vez en el interior Jonghyun metió su cabeza bajo el grifo de agua fría.

-De verdad me gustaría saber que te ocurre últimamente.

Jinki sacó la cabeza.

-¿Tenía que ser tu novio… tan niño?

Jonghyun arrugó el ceño.

-¿Qué tiene que mi novio sea más…?

Callo cuando Jinki entró a uno de los cúbicos rápidamente, escuchó un sonido desagradable y le cerró la puerta para más privacidad.

-Ahora vuelvo.

Jinki escuchó el sonido de la puerta cerrarse y vomitó sobre el water todo lo que había bebido, no supo cuanto tiempo estuvo inclinado en ese retrete recapacitando sobre su comportamiento.

De nuevo escuchó la puerta abrirse.

Taemin se sentía incómodo en aquella fiesta donde estaba fuera de lugar y había anunciado a Key que necesitaba ir al baño; definitivamente nunca podría negarse a las propuestas de fiesta de su amigo, por desgracia.

Fue al lavabo a lavarse las manos.

-¿Jonghyun?

Miró en dirección de donde procedía aquella voz.

-No quiero que estés con Key. Las relaciones con demasiada diferencia de edad no salen bien.

Arrugó el entrecejo molesto, ¿quién se atrevía a decir eso con lo feliz que era Key? Pensaba salir cuando otra frase le paralizó.

-El más joven nunca tiene en consideración al mayor.

Jinki escupía las palabras aún de rodillas, por la borrachera su voz sonaba distorsionada y no dejaba de mirar el suelo.

-Tú… le amas. Pero por ser el mayor, quieres cuidarlo, protegerlo, como si fuera un niño pequeño. Porque le amas nunca dices tus sentimientos, porque temes que le disgusten, para fingir ser quien tiene el control. Pero él, pequeño y alocado, no piensa en ti como lo haces tú. …l no se dejará cuidar y tu experiencia y conocimientos pasaran desapercibidos. Tú buscas algo más duradero y él solo quiere divertirse, porque, él tiene toda la vida para divertirse. Buscará estar en brazos de otros pasando tú a un segundo planos, no tiene miedo de salir herido porque su corazón es joven y sus heridas se curan rápidamente, mientras que a nosotros nos queda la cicatriz. A los mayores nos queda sufrir mientras para ellos todo es… una travesura.

-Idiota.-masculló Taemin, ese tipo se equivocaba en todo lo que decía y pensaba dar una patada a la puerta del baño donde estaba cuando la puerta se abrió y apareció Jonghyun.

-Oh.-exclamó sorprendido.

-¿Qué haces aquí?-preguntó el mayor confuso, Key se estaba quejando de que no encontraba al pelirrojo.

-Nada.-dijo rápidamente saliendo del baño, Jinki abrió la puerta.

-¿Qué piensas, Jonghyun?

-Pienso que das asco y que no pienso presentarte a Key de esta forma.

Jinki se llevó la mano a su frente.

-De todo lo que he dicho solo eso… me siento mal, creo que volveré a casa.-parecía frustrado.

-No estas en condiciones de ir en coche…

-Iré caminando-cortó-un paseo no me hará mal y mañana recogeré el coche.

Jonghyun asintió, su amigo se comportaba raro pero lo dejaría estar, ambos fueron juntos hasta la salida de la discoteca cuando Jinki giró su cabeza abruptamente.

Al otro lado del antro una figura bailaba al son de la música, pero lo que llamaba la atención era su anatomía, le recordaba a la de Taemin. El chico estaba de espaldas pero podía apreciar su cabello corto y pelirrojo. Quiso golpearse contra cualquier pared, necesitaba sacarse al menor de la cabeza como fuera. Se despidió de Jonghyun y salió a la calle.

Holaaa Recien hoy encontre tu fic y por eso me registre en el foro pero y el final??? donde esta??? no encontre el cap VIII ya no esta???? hay una forma de que pueda leerlo??? Gracias escribes Genial Tu fic fue muy hermoso!!
como TAem crecio por amor lo ameeee

Capítulo 8

Taemin no había vuelto al nuevo departamento de Key, le salía demasiado caro el viaje en tren y era siempre el propio Key quien se movía para ir a visitar al menor.
Para Key se acercaba un día especial y cuando llevó el almuerzo preparado a Taemin en su antigua universidad no esperó en decírselo.
-¿Cumpleaños? ¿Y cómo piensas celebrarlo, como lo hizo tu novio en aquella discoteca?-preguntó el pelirrojo. Estaban sentados en uno de los bancos de la universidad rodeados por el jardín, Taemin comía su almuerzo despreocupadamente, su madre nunca le había preparado comida para ir a la escuela.
-¡Estás loco! ¿Crees que dejaría que el aniversario del día en que llegó al mundo mi solemne presencia será celebrado en una discoteca de poca monta? ¡Que poca fe!
-Hyung, a veces me da miedo las cosas que dices.
Key le apuntó con un dedo amenazador.
-…Umma.-rectificó a regañientes.
-Será en nuestra casa… ¿No suena acaso bien nuestra casa? Es nuestra casa, nuestra casa…
-Llevas diciendo lo mismo desde que te mudaste.
-Si amaras alguien me entenderías-Taemin cambió su semblante y dio gracias a que Key no le mirara mientras hablaba, tenía una fuerte intuición cuando cambiaba gestos de la cara-. El caso es que te quiero el jueves en mi casa.
-¿Será ahí?
-Claro, pero será mejor que en cualquier otro local de la ciudad porque lo organizo yo. Así que espero un regalo muy caro por tu parte.
Taemin rió, no tenía ni un centavo y Key lo sabía.
-Mi casa va a estar llena de jóvenes soberbios.
-Tu casa parece de la muñeca Barbie.
-Me van a dejar la casa echa un asco.
-Tu casa parece de la muñeca Barbie.
-Me va a tocar recogerlo todo.
-Tu casa parece de la muñeca Barbie.
-¡Onew Hyung! ¿Me ayudarás a recogerlo todo?
Jinki rió débilmente, estaban ambos tirados en la alfombra fucsia de casa de Jonghyun, habían estado bebiendo aquella tarde y en aquel momento ninguno de los dos era capaz de articular algo coherente, Jinki se movió un poco para coger su móvil que en aquel momento sonaba, con esfuerzo se lo colocó en el oído.
-¿Diga?
-Onew, necesito verte, ¿dónde estás?
Jinki miró alrededor.
-En la casa de Barbie.
Sonó un suspiro.
-Estas bebido y en casa de Jonghyun. Voy allá, espérame.
-No, espera…
Al otro lado ya habían colgado.
-¿Quién era?-cuestionó Jonghyun, no solía beber pero aquel día se había dejado llevar por Jinki.
-Victoria, quiere decirme algo.-se llevó la mano a la cabeza- Necesito despejarme.
Jonghyun no contestó, se había quedado dormido, Jinki miró alrededor y fue al baño para echarse agua sobre el rostro, no se había secado cuando el portero sonó, Victoria debía estar cerca. Salió del baño apresurado, Jonghyun continuaba sobre la alfombra con los ojos cerrados, contestó pero nadie respondió, se encogió de hombros y fue hasta una silla a coger su chaqueta, el timbre sonó, vacilante abrió.
-Victoria.-dijo, en su voz había un tono que delataba la bebida consumida anteriormente.
-Me abrió un vecino-sonrió-, ¿qué hace Jjong?-miró hacía el interior y preocupada contempló a Jonghyun sobre el suelo.
-Ah, él… solo duerme. Espera aquí un momento.
Fue hasta el dormitorio de su amigo y cogió un par de mantas que luego se dispuso a colocar suavemente sobre el cuerpo del castaño, comprobando que estaba todo en orden volvió al recibidor donde esperaba Victoria y ambos salieron del lugar.
-¿Jonghyun también ha bebido?-Victoria estaba sorprendida.
-Yo no lo obligué.-dijo Jinki un poco arrepentido, en realidad había influenciado a su doangseng a beber aquella tarde.
-¿Sabes?-Victoria estaba demasiado cerca, Jinki lo sentía, desde el primer día no le había pasado desapercibido el interés que ella mostraba hacía él pero simplemente había fingido no notarlo.- Hay un estudio que dice que la mayoría de personas que le dan a la bebida es por dos razones: una por ser unos fracasados y hundirse respecto a familia y trabajo y otra por despecho amoroso.
-No he oído hablar de tal cosa…-tartamudeó.
-Tú has tenido empleos muy buenos y no vas mal de dinero, y hace muchos años que superaste lo de tu familia-Jinki quedó asombrado, no recordaba haberle contado su pasado a Victoria, Jonghyun tenía razón respecto a que borracho contaba cosas de más- ¿Tienes algún amor no correspondido?
-Claro que no.-farfulló a duras penas, quería que Victoria se alejase y salir del edificio, no hacía nada bueno ahí.-Debemos irnos de aquí.
-No eres tonto-rió Victoria-ni somos niños. Sabes que me gustas.
-No sé…-las palabras no salieron porque los labios de Victoria buscaron los suyos. Jinki al principio quiso separarla de él, pero la última vez que había besado a alguien había sido a Taemin y aquello le hacía recordarlo. El alcohol que seguía en su cuerpo le hizo cerrar los ojos para que fuera más fácil imaginar que quien tenía devorando su boca era su ex alumno. Sin embargo, algo fallaba, aquellos labios no eran tan gruesos, su rostro tenía que agacharse demasiado y su sabor era distinto, abrió los ojos rompiendo el embrujo que él mismo se había hechizado, pensaba separarse cuando la puerta del ascensor se abrió de repente obligando a ambos pegar un respingo.
-En mi rellano nadie se pega el lote.-regañó Key cuando salió del ascensor- excepto Puppy y yo, claro.
-Key, me has asustado.-reconoció Victoria, Jinki no había dicho nada, estaba mortalmente pálido mirando la figura pelirroja que había atrás de Key.
-¿Qué hacéis aquí?-preguntó Key curioso, él y Victoria habían sido amigos desde hacía años y sabía el interés de ella hacía el profesor, iba dirigiéndose a su puerta sin prestar atención que su amigo seguía clavado en el mismo sitio sin despegar su mirada de Jinki.
-He venido a por Onew…-calló al escuchar el estrépito que hizo la puerta del ascensor al cerrarse violentamente, Taemin pulsaba el botón de planta baja como si le fuera en ello la vida deseando que nadie hubiese notado como sus ojos se habían humedecido.
Jinki, estático, cerró un puño con fuerza, tanta que lo dejó blanco. Olvidó respirar cuando vio al chico y su mente había sido incapaz de hilar con coherencia sus pensamientos, había visto a Taemin, ¿aquello era bueno o no? Había estado bebiendo meses porque le extrañaba, pero no quería ver la mirada burlona del menor sobre él juzgándolo, seguramente encontraría divertido que… ¿que le amase?
No separó la mirada de los números rojos que marcaban la trayectoria del ascensor, si era rápido y bajaba por las escaleras podría interceptarlo, podría pedirle una explicación por lo que ocurrió, las voces de Victoria y Key sonaban distorsionadas.
Finalmente una luz marcó que el ascensor había parado y tomó aire, sin siquiera saberlo había contenido el aliento, miró a los dos chicos que estaban confusos y les dirigió una amplia sonrisa, una sonrisa falsa, pero era una sonrisa de todos modos.
-Vuelvo a casa.-sentenció.
Taemin se quedó en el interior del ascensor reflexionando, parecía difícil salir de allí y volver a casa en bus después de ver a Jinki, de pronto todos los planes que había echo se desmoronaron, se sentía iluso por no prever que el mayor querría rehacer su vida con una persona a su lado. Se asustó cuando visualizó la espalda del profesor salir del edificio a través de una rendija, esperó conteniendo la respiración y luego abrió la puerta para llegar lo más rápido posible hasta la parada de autobuses. Recibió varias llamadas de Key, pero no contestó a ninguna, cuando hablara con Key este lo obligaría a que le dijera la razón por la que se fue y toda la historia detrás de ello.
-¿Qué mosca te ha picado Lee Taemin?
Alzó la mirada sorprendido, su amigo no se había contentado con llamarlo hasta la saciedad, había ido a buscarlo hasta la parada de buses.
-¡Te llamo y no me coges al teléfono! ¡Te llevo a mi casa para que me ayudes a idear la decoración y te vas corriendo! ¡Y sin explicación!
Taemin sonrió débilmente, realmente parecía una umma regañándolo, pero en aquel momento no necesitaba una bronca.
-Key umma-musitó- ¿me das un abrazo?
Inmediatamente los instintos maternales de Key salieron a luz y se sentó a su lado para abrazarlo.
-¿Qué te pasa? Esto es raro viniendo de ti.
Taemin cerró los ojos dejándose llevar por aquel abrazo. Casi podía recordar los dias de su niñez donde su madre sonreía con mucha más frecuencia y le regalaba abrazos como aquel todas las noches antes de que expirasen.
-Key-dijo- ¿qué hago?
-¿Hacer de qué? ¿Qué te pasa?
-Amo ese idiota con estúpida sonrisa… pero él me olvidó.
Key se separó de inmediato.
-¿Hablas de Jinki?
Taemin parpadeó.
-Has adivinado demasiado pronto de quien hablaba.
-Has dicho estúpida e idiota en una sola frase, no hay que ser un genio para reconocer a la persona.-Taemin miró el suelo-¿Pero le conoces?
-Eso podría preguntarte a ti.-lo miró determinado, tenía demasiadas preguntas que querían salir de su garganta- ¿Cómo lo conoces? ¿De qué? ¿Quién era esa chica? ¿Cómo se llama? ¿Son… son novios?
Key quedó parado un momento pero luego le atacó con otras preguntas.
-¿¡Y cómo que amas a Jinki!? ¿¡Por qué yo no lo sabía!? ¿¡Cuándo pensabas decirme que te gustaba una persona!?-se tranquilizó cuando vio la mueca del menor- Tranquilo, te perdono que me ocultes tu vida pero no pongas esa cara, no es común en ti estar así.
-Es… absurdo. Soy absurdo. Yo no debería estar así.-parecía tan frustrado que Key le pasó un brazo por los hombros.
-Jinki… él es amigo de Jonghyun. Se conocen desde niños.
-Esa chica…-murmuró inseguro, a Key le pareció tierna la forma en que balbuceaba.
-Victoria. Ella es mi amiga y, bueno, le gusta mucho Jinki.
-¿Están…?
-No lo sé. Ahora no lo sé.
Taemin tenía tantas dudas en su cabeza que estaba confundido y odiaba aquella situación, él siempre mantenía el control, incluso después de desaparecer Jinki supo como actuar seguro de que volverían a estar unidos, pero los planes salían de su trayecto. Pidió a Key la dirección de su ex profesor, aunque le costó trabajo consiguió que se la diese, iba a dejar de actuar como un niño como momentos antes: miraría a Jinki a la cara, le diría sus sentimientos y luego le preguntaría si para él fue solo sexo y estaba con la chica esa. Madurar era un camino largo que a veces dolía, otras divertía, y que hacía pagar los errores del pasado, ahora Taemin iba a actuar como tuvo que hacerlo mucho tiempo antes con un reloj marcando el paso de su trayectoria.
-Victoria.
Onew. Te fuiste demasiado pronto y me dejaste ahí sola.
-Ya.-Onew quería huir, ahora que estaba lucido se arrepentía de aquel beso, vaciló unos instantes sin saber si debía invitar a Victoria a pasar a su casa o hablar con ella en la entrada. “Diablos”-pensó-“Si voy a darle calabazas mejor que tenga fácil irse, de todas formas hago un favor a las vecinas cotillas.”-Victoria, el beso de antes…
-Lo correspondiste.-interrumpió.
-Sí, lo sé, pero ahora…
“¿Acaso he perdido la cordura?” Jinki veía de nuevo la figura pelirroja saliendo del ascensor, no creía posible ver dos veces en un día a Taemin de la misma forma, y sin embargo, ahí estaba parado.
Desde luego no debía ser una alucinación, porque Victoria se había girado encontrando al joven.
-¿Conoces al chico? Es el que estuvo en casa de Key, ¿no?
Taemin olvidó cuan duro es el camino para madurar y como de costumbre esconde sus sentimientos tras una fía mascara pintada de una burlona sonrisa.
-Lo siento ahjumma, soy el que se la chupaba en la escuela mientras corregía controles, ¿debí presentarme antes?-en realidad quería decir lo mucho que la asustaba y la envidia que sentía de ella.
Jinki se puso pálido y Victoria abrió la boca tanto como pudo, aun sin entender que hacía el menor allí Jinki tomó el brazo de Victoria para meterla en su casa.
-Ven, hablemos en privado y te lo explico.-le dijo en voz baja, ¡creyó salvarse de tener que ir a la cárcel por abusar de menores!
Taemin inmediatamente comprendió su error y deshizo su máscara para acercarse tanto como pudo a la puerta y colocar su mano para evitar que la cerrara.
-Antes quiero decirte algo.-dijo, para su sorpresa Jinki colocó su mano sobre la suya para tratar de quitarla y cerrar la puerta.
-No tienes que decir nada, solo vete.-dijo, aun sujetaba a Victoria con la otra mano para que estuviese dentro, Taemin se vio en la necesidad de forcejear.
.-¡Solo será un momento!
-Desaparezcamos de nuestras vidas, y hagamos como si nunca nos hubiéramos conocido, ¡no te esfuerces! Es lo mejor.
-Desapareceré de tu vida después de decirte lo que quiero.-Taemin sabía que estaban llamando la atención, la puerta se balanceaba mientras Jinki trataba de cerrarla y él hacía lo posible para evitarlo, cuando el mayor soltó a Victoria para ayudarse con la otra mano ésta estaba cansada.
-¡Onew, ¿qué haces?!-siempre veía a Jinki como un hombre responsable y tranquilo al margen de cuanto bebiera, Jinki quiso responder después de cerrar la puerta, pero no pudo, Victoria forcejeó junto a ellos para abrir la puerta y salir.
-¡Victoria!-llamó, pero ella bajaba las escaleras apresurada, sin perder tiempo, puso más esfuerzo y logró cerrar la puerta, la fuerza nunca destacó en Taemin.
Él, al verse así, dio una patada a la puerta por la frustración y tomó aire guardando sus ganas de golpearla, en su lugar cerró los ojos recuperando la calma y acercándose a la puerta tanto como podía.
-Está bien. Si no me quieres ver está bien. Puedo hablarte a través de la puerta.
No recibió respuesta pero tenía la fe que Jinki estuviera al otro lado escuchando. Miró a las otras puertas rezando que nadie saliera en aquel momento y se pasó la lengua por sus labios.
-No mentiré, estoy sorprendido.-debía levantar la voz-No creía encontrarme contigo tan pronto. Creo que me he quedado en blanco.

“Onew, ¿tú y yo tuvimos solo sexo? ¿Fue eso para ti? Quizá sí, quizá fui el único tonto que… sentía cosas, que se alegraba con ver al otro sonreír… ¡realmente duele!-rió- Yo, me da igual si para ti no fue así, pero creo que me enamoré de ti. Estoy enamorado de ti.-se corrigió.- Nunca sabrás como me hiciste cambiar y madurar. Desgraciadamente aún me falta mucho camino para cambiar y madurar, si estuvieras a mi lado puede incluso que lo haga más rápido.-pausa.-Eso no debí decirlo. Pero lo cierto es que creo que soy mejor persona gracias a ti y me enseñaste lo que ningún otro profesor hizo. Te quiero. Te quiero.-repitió, luego se golpeó levemente la cabeza contra la puerta.- Extrañamente se hace más fácil decirlo una segunda vez. Cuando me lo dijiste aquella noche creí que mi pecho iba a explotar, pero no te diste cuenta, tú nunca te diste cuenta de mis sentimientos.
Segundo… aquella vez en el despacho… arg.-suspiro desesperado.- Puede sonar a excusa pero no hice nada con Changmin. Nunca he hecho nada con él, de hecho. Simplemente… fue una mala postura en un mal momento, no niego haber echo eso anteriormente pero no desde que llegaste. Desde que estuve contigo-absurdo, se dijo, ¿por qué de pronto sus ojos se humedecieron?- solo quería estar contigo. Porque me diste cosas que ninguna otra persona me dio antes y me bastabas. Porque aunque fuese solo por mi parte sentía cosas. Me siento celoso si ahora es Victoria quien siente todo eso… pero no quiero olvidarlo. Porque te quiero. “-repitió más bajito, no supo en que momento había descendido su voz, solo sabía que tenía la cabeza agachada con lágrimas amenazando con bajar por sus mejillas, alzó la cabeza asustado cuando sintió la puerta abrirse y tener a Jinki en frente mortalmente serio.
-¿Qué es lo tercero que querías decirme?-preguntó con una voz extrañamente ronca.
Taemin sonrió débilmente mirando el suelo tratando aguanta las lágrimas.
-Ya soy mayor de edad.
Calló al sentir un mano posarse delicadamente sobre su mejilla y cerró sus ojos cuando notó unos labios ajenos pegarse a los suyos brindándole un dulce beso.
El despertador sonó como cada mañana con su martirizante sonido, obligando a la persona acostada en aquella cama removerse hasta darle con la mano para que se apagase.
Jinki cerró con fuera los ojos y se restregó una mano en ellos, los abrió con dificultad y se estiró dispuesto a ir un día más a trabajar.
Miró la figura que tenía la cabeza apoyada sobre su pecho, con una mano movió su hombro para tratar de despertarlo.
-Taemin… eh, ya, despierta.
El otro por toda respuesta puso más fuerza en los brazos que rodeaban la cintura del mayor y hundió su rostro tanto como pudo en su pecho, Jinki suspiró y fue a los puntos sensibles del pelirrojo para hacerle cosquillas.
-Venga, es hora de levantarnos.
El joven se removió un poco y luego alzó la cabeza soñoliento y con los ojos entrecerrados, Jinki aprovechó para darle un rápido beso en los labios y como pudo se levantó de la cama.
-Voy a ducharme~.-dijo dirigiéndose hacía el baño, el menor trató de imitarlo y acabó cayendo de rodillas sobre el suelo.
-No… espé…rame.-pidió, las palabras salían con dificultad a causa del sueño.
A Jinki cada mañana le tocaba hacer el desayuno de ambos mientras Taemin se quedaba en baño arreglándose, al mayor le molestaba que cuidara tanto su imagen para ir a clase, pero tuvo que aceptar que esa era una de las costumbres que le pegó Kibum mientras compartían habitación, cuando estuvieron hechos los hot cakes Taemin fue a la cocina guiado por el olor, después de la ducha bien fría se había espabilado.
-¿Qué tienes ahí?-preguntó Jinki viendo la serie de folios que llevaba en la mano, éste se sento sobre la mesa llevándose inmediatamente un hot cake a la boca.
-Apuntes… examen…
-¿Examen?-Jinki cambió el gesto.-No me dijiste que tuvieras hoy examen.
-Porque cuando tengo examen nunca quieres sexo.-el menor hablaba con la boca llena.
-¡Taemin, eres estudiante universitario, debes dedicar las noches a estudiar!
Taemin le dio un beso para callarlo.
-Saca el coche.-ordenó, Jinki seguía regañándolo y diciendo que no estaba en bachiller, que medicina era una carrera que necesitaba muchas horas de estudio, el menor ponía los ojos en blanco.
Ambos se montaron en el coche, Taemin se cambió a la universidad de Key por una razón similar; vivir con Jinki, aunque el lugar donde trabajaba éste quedaba más cerca siempre se tomaba la molestia de dar un rodeo para dejar al pelirrojo.
Mientras esperaban por un semáforo en rojo el menor se aburría tanto que dirigió su boca hasta el cuello de Jinki y comenzó a morder.
-¡Taemin, estoy conduciendo!
Rió, y siguió mordiendo cuando el coche se puso en marcha, Jinki no podía apartarlo porque tenía sus manos puestas en el volante por lo que estuvo sometido a aquella tortura hasta que llegó a la facultad.
-Seguro que has dejado marca.-se quejó, Taemin le sacó la lengua y luego lamió el lugar marcado.
-¿Volverás pronto a casa?
-No lo sé, ¿por qué preguntas?
-Quiero hacerte muchos otros como éste cuando llegues.-le susurró al oído, tembló levemente.
-Pero creo que hoy estaré más tarde.
-Jo.-hizo un puchero-No me puedes tener sin sexo.
Jinki sonrió burlón.
-¿Por qué no reconoces que estás tan enamorado de mí que no soportas no estar a mi lado?
Le pegó levemente en el hombro enrojecido.
-Me voy ya.-avisó, él otro rió divertido, lo miró con el cejo fruncido y decidido a hacerle un regalo para tenerlo contento en clases se inclinó hacía él.-Y sí, así te quiero.
Jinki lo miró sorprendido.
-Mira que mejillas rojas tan monas-le agarró una-, I know that you love me-a veces le hablaba en inglés por su profesión- yo también te quiero.-dio un leve beso en los labios para despedirse.-Suerte con el examen.
-Shut up, Teacher-se acercó de nuevo y le agarró el labio inferior con los dientes-Te esperaré en casa.-avisó el menor saliendo del auto, Jinki sonrió mirando la carretera mientras arrancaba.
Sí, Taemin siempre le esperaba en casa, y después de los acontecimientos ocurridos aquel año sabía que nunca más sería la oscuridad quien le recibiera cuando llegase a su hogar.

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