Titulo: “War & love”Autor: Alisön Värgas
Género: Romance, lemon hetero drama slash
Parejas: 2min y TaeKey (key girl- Gwibom)
Personajes: Lee Taemin, Kim Gwibom, Lee Hyori, Choi Minho, Kim Jinki

CAPITULO 1°

Eran tiempos difíciles, había estallado la segunda guerra mundial y se reclutaban hombres y jóvenes todos los días.
Todo paso muy rápido. Desde que recibí la noticia que tenía que ir a la guerra. Era uno de los hombres que habían elegido. Tenía miedo de dejar a mi hija, a mi esposa; y que yo no pudiera regresar a verlas.
Entre al comedor, como todas las mañanas a tomar mi desayuno junto a mi familia.
-buenos días- dije mientras entraba y besaba la mejilla de mi pequeña hija. Es la niña más bella. Tiene nueve años de edad, su piel es muy blanca, y su cabello largo y lacio, de un tono castaño claro. Sus ojos son hermosos, dos grandes ojos de color verde aceituna. Para mi ella es perfecta.
-buenos días- respondió mi esposa mientras ponía en la mesa un plato con comida. Ella era una mujer delgada, con un cuerpo muy bello. Su cabello era negro oscuro, largo y lacio. Nuestro matrimonio había sido arreglado; a pesar de eso, tenemos una buena vida juntos.
Unos días antes, al llegar a mi oficina lo que me temía ocurrió, había una carta diciéndome que me debía de presentar para servir a mi nación.
-llego la carta- dije mientras levantaba el sobre que se encontraba en mi mano.
-no puede ser-. Dijo Gwiboom asustada acercándose rápidamente hacia mí. –tal vez haya algo que podamos hacer. Algo para que no te manden y vaya otra persona en tu lugar-.
-ya no hay nada más que hacer. Si a mí me toco, ni modo- tome una silla y me senté junto a mi hija dándole un sorbo a la taza de café que se encontraba frente a mí. –a Onew también le llego. Ayer en la oficina, nos llego a todos la correspondencia-. Onew es hermano de Gwiboom y al igual que yo había sido reclutado.
-¿desde ayer la tenias y no me habías dicho nada?- dijo subiendo el tono de su voz.
-mi amor ve a arreglar tu mochila para la escuela y cuando bajes te llevo. Corre mi vida-. Dije con un tono de voz tranquilizante para que ella no notara el problema del que hablábamos. Cuando ella salió del comedor continúe hablando con mi esposa. –no hay razón para alterarnos. Ayer que me la dieron yo busque la forma en la cual pudiera cambiar con alguien más mi lugar. Pero no se pudo hacer nada. Estaré bien-. Me acerque a ella y la abrace.
-¿Cuándo tienes que partir?-. Dijo levantando la vista y dejando que una lagrima callera por su mejilla.
-mañana…-dije haciendo una pausa-mañana por la mañana. Un autobús pasara por todos, a primera hora-. Soltó un gemido. La abrace mas fuerte.- llevare a Hyori a la escuela, pero volveré. Hoy no trabajare-. La solté tome otro sorbo de la taza de café y salí de la cocina para encontrarme con mi hija en la sala.
Cuando subimos al auto, Hyori no dejaba de mirarme buscando una respuesta en mi rostro.
-¿estas bien pequeña?-. Pregunte sin desviar mi mirada del camino.
-es solo que no entendí que fue lo que paso con mi mamá esta mañana. Todos estábamos muy tranquilos y ella empezó a gritar, y no entendí cual fue el motivo de su enojo-. Dijo, volteé a ver su rostro y tenía un gesto tan tierno de curiosidad.
-lo que paso con tu mamá fue que se enojo por algo que le debí de haber dicho ayer que llegue de trabajar. Pero como ella estaba dormida preferí esperar a esta mañana. Pero a ella le disgusto-.
-¿entonces eso era todo?-. Dijo borrando poco a poco el gesto tan tierno de su rostro.
-si eso era todo por lo que se enojo tu madre-. Nos detuvimos frente a un edificio muy grande y ella se acerco a mí, beso mi mejilla.
–Adiós papa- dijo bajando del auto. – ¿Todo va a estar bien?- me pregunto.
–Claro que todo va a estar bien mi amor-. Hizo con su mano una seña de despedida y comenzó a caminar hacia aquel edificio.
Comencé a recorrer las calles en la auto, solo podía pensar en lo difícil que iba ser estar lejos de mi familia y lo preocupante que seria para ellas. Sin darme cuenta de cuánto avance por las calles, llegue a mi casa.
Era una casa muy grande, hecha de madera y con un gran granero a su lado. Recuerdo cuando mi padre y yo construimos ese granero. Toda mi vida había vivido en esa casa y esperaba que mi hija creciera ahí y que nunca le faltara nada.
Baje del auto, entre a mi casa.
-¡volví!- grite al entrar a la casa, para que Gwiboom supiera de mi llegada.
-estoy arriba-. Respondió una voz desde nuestra habitación.
Subí las escaleras y al llegar al pasillo podía ver la puerta abierta de nuestra habitación. Y ella estaba adentro. Camine hasta donde estaba ella. -¿Qué haces?- pregunte.
-empaco tus cosas. A ti nunca te ha gustado hacer equipaje-.
-pero no es necesario, me ira mañana-. Respondí
- pero no quiero que Hyori te vea. ¿Hablaste con ella sobre que te vas?-. Pregunto mi mujer mientras recorría toda la habitación caminando en busca de mis pertenencias.
-le dije que todo va a estar bien-.
Detuvo su andar dejándose caer sobre la cama y rompiendo en llanto. – nada va a estar bien. No quiero que te vayas-.
-no me gusta verte llorar. Por favor detente, todo estará bien. Cumpliré con lo que me pidan y volveré pronto. Te lo prometo-. Me acerque y la abrace.
Quería que dejara de sentir tensión, así que comencé a besarla, rechazabas mis besos pero después de un rato dejó de luchar y comenzó a besarme de igual manera que yo lo hacía. Nunca me cansaba de besar su cuello, comencé a hacerlo y le baje el vestido de flores que traía puesto, no pude detener mis besos bajando por tu pecho. Sabía que tu tristeza era muy grande pero en ningún momento me pediste que me detuviera. Comenzó a gemir del placer que sentías al sentir mis besos perderse por tu pecho. Me detuve por un momento y la recosté lentamente en la cama. Trató de decirme algo pero nuestra excitación era mucha y no pudo decir lo que le molestaba en ese momento. Se levantó para desabrochar mi camisa y mi pantalón. Ambos quedamos en ropa interior. Los besos y las caricias eran más subidas de tono y después de unos momentos nos encontrábamos completamente desnudos. Y siendo la misma persona.
Me quede dormido a su lado y después de un momento, desperté.
Ella estaba despierta viendo como dormía.
-¿Qué hora es?-. Dije mientras me trataba de levantar de la cama.
-son las 14 hrs-. Respondió tomando mi brazo y evitando que yo me levantara.
-Hyori, ¿Dónde está?-.
-le pedí al señor Chong que fuera a recogerla a la escuela. No te preocupes, quédate recostado-. Me abrazo acercándome a ella. -estoy embarazada-. Dijo besando mis labios.
-¿Cuánto tiempo tienes?-. Dije un poco exaltado. No podía creerlo; yo debía irme, y tal vez no regresaría nunca, y no conocería mi hijo. -¿estas segura?-. Dije con mucho miedo.
-completamente segura. Tengo 12 semanas. Es por eso que no quiero que te vayas, tal vez estés lejos por mucho tiempo, y si el nace no estarás aquí en ese momento.
-pero no es porque yo quiera irme. Es un deber con el cual debo de cumplir-.


Espero con ansias que les guste y lee con placer lo que tengan para decirme...
disculpen si encuetran fallas ortograficas


adoro a Minho!! :HAHA:

Soy la primera jojo
me ha gustado muchisimo tu fic
se lee demasiado genial
esperare ansiosa la conti

awww cute cute cute spera supongo qe el qe stababa relatando era minho no si no ando perdida hahahaha
genial fick :D continua cuando puedas

AAhh!! no no te quedo muy bien, me gusta la historia

conti conti

Hye~Kyo:
claro que continuare muchas gracias por leer

ziari:
gracias por leer continuare escribiendo porque me lo pidieron

FuerzaFriki:
gracias por el comentario pronto veran un capitulo nuevo

dulceevargas:
quien narra es Taemin, se me hizo algo dificil hablar idioma Tae

FabMin:
que bueno que te parecio interesante

Noreri94:
que padre que te gusta la historia

muchas gracias por leer y por darle la oportunidad a mi Fic...
les agradesco de corazon que me den la oportunidad de escribir y darle la oportunidad a mi fic
gracias de vdd

AHHHHHHHH tons el qe narro todo fue taemin woo aora cambia mi perspectiva de la historia o.o bueno como kiera sta padre :D sigele

Kim Key-sshi:
GRACIAS POR LEER ME LLENA DE ORGULLO Y FELICIDAD QUE LO LEAS...
ok no
pero si me gusta que lo leas..!!
creo qe ya no habra mas Taekey puedes dormir tranquila
:HAHA:

CAPITULO 2°

Era muy temprano en la mañana del 19 de octubre de 1942 y yo ya estaba listo para salir de viaje. Tome mis maletas y las baje por las escaleras tratando de no hacer ruido. Pero Gwiboom ya estaba despierta y bajo conmigo, un camión hizo sonar su bocina afuera de la casa. Y subí rápido a darle un beso a mi pequeña Hyori.
Entre a su habitación sigilosamente para no molestarla. Bese su mejilla y me detuve a mirarla dormir, cuando me propuse a salir de la habitación despertó.
-¿Qué pasa papá?-. Dijo mi hija mientras salía rápido, para que ella no se diera cuenta. Pero al escuchar su voz me detuve y me agache junto de su cama.
-me voy, cariño mío. Voy a salir de viaje pero no tardare mucho tiempo. Volveré antes de que nazca tu hermanito. Pero mientras esté lejos puedes escribirme cartas y mandármelas con mamá y yo te las responderé-. Dije y no pude aguantar la tristeza y deje escapar una lágrima.
-tranquilo papi, volverás pronto, y te prometo escribirte a diario-. Dijo Hyori mientras limpiaba con su pequeña mano la lágrima que aun estaba en mi mejilla. Se acerco y me regalo un beso.
-te quiero hermosa-. Dije levantándome y besando su cabeza.
-yo también te quiero-. Tomo mi mano por unos segundos al soltarla salí de su habitación y podía aguantar el dolor que sentía. El miedo de perder todo lo que tenía.
Sonó una vez más el claxon del camión que esperaba por mí. Baje rápidamente las escalera y salí apresurado. Me detuve para besar a mi esposa y continúe caminando. Subí al camión, tome un asiento. No quise asomarme por la ventana pues el vacio que sentía era muy grande al saber que dejaba a mi esposa a su suerte con un hijo y esperando otro.
El camino al campo fue muy largo y nadie hablaba. Cuando bajamos del autobús pude ver a muchos soldados entrenando. Bajando de otro autobús estaba Onew, no me acerque a hablarle pues aun no sabía las reglas de ese lugar y mi propósito era cumplir con mi deber y volver con mi familia.
La vista no era agradable pues lo único que se veía eran los campamentos y de ellos salían y entraban heridos.
-¡buenos días señores!-. Grito un hombre uniformado de muy buen ver.
Todos los recién llegados se reunieron. Y se acerco a mí Onew.
-¿estas nervioso?-. Dijo casi susurrando.
Estreche su mano –nervios ¿de qué?-. Dije riendo.
-es cierto de que vamos a tener nervios si tenemos al mejor coronel que existe. El es Choi Minho. Y es experto en estrategia de ataque. Y uno de los hombres más codiciados-.
-ya veo que te informaste antes de venir-. Dije riendo con tono de burla.
-muchas gracias por venir-. Continuo diciendo el hombre uniformado.- Sé que muchos de ustedes son hombres de familia y estoy comprometido en que todos vuelvan a su casa con bien. Que puedan volver con esos seres queridos que esperan por ustedes, esa será mi misión más grande. Y les pido que sientan orgullo de estar aquí pues ustedes están dispuestos a dar su vida por el país, y eso es un motivo de orgullo. Su familia está orgullosa de tener, padres, amigos, esposos, hijos los cual estén dispuestos a dar su vida por los demás.
Y no quiero que se vean como compañeros, quiero que sean amigos, los mejores amigos, eso ayudara a que el tiempo aquí pase más rápido. Los espero para entrenar en dos horas. Los veo en la carpa más grande.
Pueden ir a arreglar sus pertenencias-. Termino de decir retirándose.
Otros hombres que se encontraban detrás de nosotros comenzaban a dar explicaciones sobre el dormitorio que nos correspondía. Pero no podía despejar mi vista de aquel hombre uniformado, me parecía tan atractivo a la vista.
-¡Lee, hombres con apellido Lee en la cabaña con el numero 20! Diríjanse a su cabaña y desocupen esta área ¡rápido!
Comencé a caminar hacia la cabaña que me correspondía.
Me apresuraba para salir al primer entrenamiento, debía de hacer todo a la perfección para volver pronto a casa y cuidar de mi familia. No sabía lo que me sucedía, porque pensaba tanto en aquel hombre.
Me quede petrificado por unos segundos hasta que otro hombre me empujo, con tal fuerza que caí al suelo. Trate de levantarme rápido pero alguien más me pateo. Me quede ahí tirado unos segundos
-¿puedo ayudarte?-. Escuche que alguien pregunto a mis espaldas, era una voz gruesa y melodiosa. Al voltear mi vista mire a ese hombre, uniformado parado frente a mi ofreciéndome su ayuda.
-gracias-. Tome su mano ayudándome a ponerme de pie.
-¿te encuentras bien?-. Me pregunto mientras me ponía de pie.
No lograba responder esa pregunta tan simple, mi boca no lograba emitir ningún sonido.
-¿te encuentras bien?-. Pregunto nuevamente al no recibir ninguna respuesta de mi parte.
-sí. Estoy bien-. Dije rápidamente.
-me alegra-. Dijo sonriendo del lado. Su sonrisa era tan perfecta, no existe forma de describir esa sonrisa tan hermosa y perfecta. –Soy Choi Minho-. Extendió su mano esperando que yo hiciera lo mismo.
-mi nombre es Lee Taemin. Gusto en conocerlo-. Estreche su mano y eso me ruborizo. Baje el rostro esperando que él no lo notara.
-no le quito mas su tiempo. Hasta luego, fue un placer conocerlo-. Comenzó a caminar tan rápido que no me dio tiempo de despedirme él. Retome mi camino, pero en mi mente ya no había lugar para nada más. Solo pensaba en aquel hombre, no encontraba la razón de mis pensamientos.
Tome el entrenamiento y me pareció que el coronel no me quitaba la vista de encima. Tal vez eran ideas mías, o tal vez tan solo pensaba que era un buen hombre y trataba de ver quienes trabajaban más fuerte.
Al llegar a mi campaña sin pensarlo más de una vez me arroje a mi pequeña cama y en menos de dos minutos me quede profundamente dormido.
Esa noche soñé con mi pequeña Hyori, en el momento en el que me despedí de ella. Me dolía tener que dejarla sola, mi esposa estaba embarazada y en lo único en que pensaba era en aquel coronel.
Al día siguiente la alarma sonaba muy temprano. Y nuestro entrenamiento comenzaba con horas de ejercicio.
Me encontraba al final de la fila para poder servirme el desayuno cuando alguien toco mi espalda.
-buenos días-. Dijo el hombre que palmeo mi espalda. Y lo primero que espere era que fuera Minho, pero esa no era su voz.
Al girar para ver quién era pude ver a Onew –buenos días- sonreí amistosamente. Y a la distancia vi que se acercaba Minho. Pero detuvo su andar cuando se topo con una enfermera muy joven y bella.
-¿Cómo te fue en el entrenamiento?-. Pregunto Onew haciéndome volver a mi cabeza.
-bien- respondí rápidamente. –un poco de cansancio-. Y mi mirado volvió en busca del coronel, sin éxito en mi búsqueda.
-¿te importa si me quedo aquí contigo?-. Pregunto
-claro que no-. Gire mi mirada y espere a que la fila avanzara, para que pudiera tomar mis alimentos.
Y de repente volví a sentir esa palmada en mi espalda.
-dime Onew-. Estaba harto de imaginar cosas que no pasarían.
-disculpe, yo no soy Onew. Me confunde-. Esa era su voz, y gire rápidamente mi cabeza.
-discúlpeme usted, lo confundí-. Dije apenado de lo que había dicho.
-lo pude notar-. Sonrió. Esa sonrisa me mataba. –venga conmigo no tendrá por que esperar, lo invito a desayunar-. Dijo señalando el camino. No lo pensé ni dos veces y comencé a seguirlo. Olvide que Onew estaba conmigo esperando el desayuno. Caminamos y salimos de la carpa más grande y nos dirigimos hacia una más pequeña y alejada de las otras que se encontraban en aquel lugar.


Espero les guste comenten todo lo que quieran que sepa!

aparto! aunqe nunca entendi xqe dicen aparto pro bueno :D sigele sta muy bueno ajua cn ese general enlistenme para la proxima guerra!

A TAemin, por que piensas tanto en el hermoso coronel, tus bebes te esperan,

jaja le valio dejo a Onew y se fue con el general jajaja, pobre onew jaja

muchas gracias por compartir

conti conti

Aprarto lo dices cuando quieres que tu comentario quede antes que el de los demas ^^


Oh..!! vaiia me encanto el entorno de la historia LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL jamas habia leido algo asi es unico y fantastico en verdad.
Me encanto la manera en la que tae empieza a sentir "cosas" por Minho Ouu pero que lindo, es un padre super tierno jeje..!!
xD Espero la continuacion.. Suerte..!!;;^_^;;_

waaaa aki nueva lectora!!!! XD
me enkantaron los 2 kapis :yupi:
kiero 2min!! >_<
me gusta komo va :KEKE:
espero ke pronto actualizes ^^

CAPITULO 3°

Aquella mañana hablamos de nuestras vidas. Hablaba de su vida lejos de los campos de guerra. Yo le platique sobre mi familia, y el remordimiento que sentía de dejarlos solos.
-yo lo podre ayudar-. Dijo abriendo los ojos cada vez más.
-no quisiera molestarlo-. Dije agachando la cabeza con pena.
-lo hare sin molestia alguna. Pero quisiera que me hiciera un favor muy grande-. Sonrió del lado.
-claro lo que usted pida-.
-que nos hablemos de tu. Quiero tenerte cerca de mí, y que confíes en mí-.
No pude evitar reír de los nervios que sentía. –claro-.
Esas palabras no me dejaron dormir “Quiero tenerte cerca de mí, y que confíes en mí” daban vuelta por mi cabeza, te tenía la menor idea de cómo era que me iba a ayudar.
-¡¿Lee Taemin?!- dijo un hombre en la puerta de la cabaña.
-aquí estoy-. Dije asustado poniéndome de pie rápidamente.
-acompáñame-. Continuó diciendo y comenzó a caminar alejándose de la cabaña.
Lo seguí hasta que entro a una cabaña, me quede estático esperando que me dieran el permiso de pasar.
-entra- dijo el hombre. – camina hasta la tercera puerta.
Aquel lugar estaba repleto de heridos. La imagen que se me quedo en la cabeza era horrible. Había personas moribundas, había muertos, y heridos de gravedad. Llegue a la puerta que se me había indicado.
-buenos días Taemin-. Se escucho una voz que provenía de aquel cuarto. Abrí completamente la puerta y entre lentamente.
-buenos días- respondí cuando vi quien era la persona que me saludaba.
-toma asiento-. Señalo la silla que se encontraba frente a su escritorio. –lo que te propondré que hagas, en vez de estar en el campo arriesgando tu vida. Es que te quedes aquí-. Hizo una pausa y continúo diciendo. –serás como mi asistente. Si alguien quiere hablar conmigo, serás el primero en saber. Y en el momento en el que yo necesite salir tu serás quien se quede a cargo ¿te agrada la idea?-.
-claro por mí está bien-. Dije sin pensar en la tremenda responsabilidad que estaba aceptando.
Y así pasaron los días. Cada vez pasaba más tiempo al lado de Minho, no había noche que no pensara en el. Y al pasar tanto tiempo con él sentía que lo conocía mejor. Era una persona muy sensible, y solitario.
Me había contado que en la ciudad que vive suele pasar el tiempo en cantinas bebiendo y durmiendo con mujeres desconocidas. Pues dice que nunca se ha enamorado de una buena mujer.
Que el amor de su vida le robo todo lo que tenia y que lo dejo sin alma, eso me hacía sentir pena por él.
Llego el día de la correspondencia, y recibí dos cartas. Ambas de con la dirección de mi hogar. Abrí la primera
“Amado mío:”
Fue con el inicio que supe que era de Gwibom.
“Espero de todo corazón que te encuentres en buen estado.
Aquí todo comienza a ponerse difícil, nos mudamos a la casa de campo pues en la ciudad ya nadie está seguro. La esposa de Onew está viviendo una temporada con nosotros y Hyori ha dejado de ir a la escuela por un tiempo.
Cada vez es más difícil salir a la calle a conseguir alimentos.
No he podido ir al médico para el chequeo regular que necesito espero que eso no afecte mi embarazo.
A pesar de eso todos estamos bien y esperamos verte pronto.
Te extraño.
Y no puedo dejar de pensar en el último momento que estuvimos juntos, espero vuelvas pronto pues muero de ganas de dormir a tu lado y besarte como si no existiera otro día.
Te amo, esperare tu regreso con ansias.”
Me disponía a abrir la segunda carta cuando entro Minho en la pequeña oficina. Y mi reacción primera fue guardar aquellas cartas bajo la mesa.
-¿ya te llego la correspondencia?-. Pregunto muy serio.
-si- respondí temeroso a su reacción.
-puedes retirarte-. Dijo señalando la puerta y acercándose a una gaveta cerca del escritorio.
-aun tengo algunos pendientes que hacer-. Dije mirando las hojas que se encontraban sobre el escritorio.
-pues mañana las acabas…- lo interrumpí –pero…-. Y grito -¡pero nada vete ya!
Levante la vista para mirar su rostro. Sus ojos estaban rojos y a punto de dejar caer una lagrima. Y sin pensarlo dos veces salí de aquel lugar cerrando la puerta mi salida.
Camine hasta mi cabaña y me disponía a dormir pues me tendría que levantar temprano. Dormí durante 2 horas. Desperté, en mi mente solo había lugar para Minho, pensaba en que le había podido haber sucedido. Me levante tratando de no hacer ruido. Salí del dormitorio, disponiéndome a buscar a Minho. Y fui a su oficina, me acerque a la puerta con la intención de escuchar ruido. Pero lo único que logre escuchar fue su sollozar sin pensarlo abrí la puerta. Estaba el tirado sobre su escritorio llorando.

********

Espero les guste mucho me he esforzado mucho...
Comente... bye

aparto
Ay mi minho esta celoso vdd?
awww corazón o que le está pasando? T___T
Me mortifica el saber que Taemin tiene esposa
e hija y de paso otro en camino nooo
me estresa eso! duu jeje espero conti
esta genial :D me esta gustando ^^

aparto!!!!

CAPITULO 4°

POV MINHO
Me encontraba comiendo solo pues Taemin no podía pasar tanto tiempo conmigo se levantarían sospechas, sobre el trabajo que realizamos juntos.
Él, era simplemente perfecto; la mejor persona y simplemente hermoso.
Mi sueño más grande siempre fue tener una bella esposa y una hermosa familia. Una vida perfecto, eso era todo lo que el tenia, y no podía evitar envidiar su vida.
Mi vida nunca había sido mala, tenía a la mujer que yo deseara pero nunca nadie lograba hacerme sentir como él me hacía sentir con una sola mirada o una simple sonrisa.
Un ruido me despertó de mi largo pensamiento.
-señor su periódico-. Dijo una voz dulce de la mujer que señalaba el periódico sobre la mesa.
-gracias-. Respondí mientras la mujer se daba la vuelta. –espere-. Dije y detuvo su andar. – ¿llego el correo?-.
Sonrió incómodamente –si. Pero…- pauso- no recibió nada-.
-gracias- dije nuevamente. Nunca recibo correo es una pérdida de tiempo que pregunte, creo que nunca nadie se preocupa por mí.
Me tome la tarde libre tratando de tranquilizarme, tenia sentimientos encontrados muy difíciles de descifrar. Sentía celos y envidia de la vida que tenia Taemin, sentía que cada vez debía estar más tiempo con él. Me fui hasta mi cabaña para tratar de descansar un momento.
Sin pensarlo corrí para buscar una bebida. Tome una botella que estaba allí y la bebí completa.
Salí de la cabaña y me dirigí a la oficina en busca de Taemin, debía decirle lo que sentía por él.
Entre y rápidamente oculto unos papales bajo el escritorio.
-¿ya te llego la correspondencia?-. Pregunte serio.
-si- respondió temeroso.
-puedes retirarte-. Señale la puerta y me acerque a una gaveta cerca del escritorio.
-aun tengo algunos pendientes que hacer-. Dijo buscando entre las hojas que estaban sobre el escritorio.
-pues mañana las acabas…- dije serio –pero…-. Interrumpió. Y mi enojo creció a tal grado que comencé a gritar-¡pero nada vete ya!-
Miro mi rostro, no podía aguantar un segundo mas, comenzaría a llorar en cualquier minuto. Se dio la vuelta y sin vacilar salió por la puerta cerrándola al salir.
Me senté en el escritorio tomando un sorbo de la botella que había sacado de mi gaveta.
Tome una tras otra las botellas que guardaba.
Me recosté sobre mi escritorio y comencé a cuestionarme.
-quisiera que pudieras notar mi belleza, tu…eres simplemente hermoso. Quisiera tener la suerte que tú has tenido. Aunque preferiría tener tu amor-.
Levante la vista y allí estaba el parado sin mostrar señal de vida. Me puse nervioso -¿Qué..qu..que haces aquí?-. Le pregunte. No respondió ni realizo ningún movimiento.
-¡¿Qué carajo haces aquí?!- grite poniéndome de pie abruptamente lo cual lo espanto y dio un salto hacia atrás. Pero no respondió a mi cuestión.
-por última vez ¿Qué haces aquí? Ya te había dicho que te fueras-. Pregunte haciendo un fuerte gesto de molestia.
-¿con quién habla?-. Se puso firme y no titubeo ni un segundo al preguntarme, pensé que en ese momento comenzaba a sospechar sobre mis sentimientos.
- no tenias por qué estar aquí. Yo ya te había dicho que te retiraras-. Dije.
-no me respondiste. ¿Con quién hablabas?- su gesto era firme.
-eso no es de tu interés-. Comencé a caminar hacia la puerta pase a un lado de él y tomo de mi brazo jalándome hacia a él. Mi equilibrio era escaso, y caí en sus brazos. Nuestras miradas quedaron fijas entre sí. Y acerco su rostro al mío posando sus labios sobre los míos. Mi primera reacción fue tratar de ponerme en pie y darle un golpe en el rostro, lo cual fue inútil y caí al piso golpeándome la cabeza contra el piso.
Después de un momento desperté.
-me habías preocupado-. Me encontraba recostado sobre las piernas de Taemin.
-¿Qué me pasó?-. Pregunte sobando mi cabeza pues sentía una punzada de dolor.
-cuando trataste de golpearme caíste al piso-. Dijo sonriendo, estaba feliz, no sabía si por mi desgracia o cual era el motivo de su felicidad.
-perdona-. Dije
-no importa te bese cuando menos lo esperabas- empujo de mi espalda para que yo pudiera levantarme. –se que hablas sobre mi-. Dijo mientras le daba la espalda pues me senté. –y la verdad es que yo me he preguntado lo mismo sobre ti-.
Gire rápidamente y no pude evitar esconder la enorme sonrisa que se dibuja en mi rostro. Se acerco hasta a mi rápidamente, aun permanecíamos sentados en el piso. Y nuevamente poso sus bellos labios sobre los míos, estaba nuestro beso se subió de tono. Y ya no era solamente un simple roce de labios en ese momento estallo una guerra entre nuestras lenguas. Puso sus manos en mi rostro y me acariciaba con sus suaves y finas manos. Acaricio mi cabello y sin pensarlo puse mis manos en su espalda jalándolo con fuerza para poder acercarlo más a mí. Detuvo nuestro beso.
Se puso de pie, lo cual me confundió.
-¿Qué ocurre?- pregunte aun sentado en el piso.
-no me has respondido sobre quien hablabas-. Dijo sentándose sobre el escritorio.
Me levante y me pare justo frente a él. –envidio la vida que has tenido. Pero envidio más la suerte que tiene tu esposa al tener a su lado a un hombre como tú. Y en ese momento lo bese yo. Nunca antes había sentido que un simple beso fuera tan placentero, su rostro era suave, sus labios carnosos, y su olor memorable.

:O aparto

Wow! me encantó, bien hecho Taemin! hahaha oohhh si
el por fin esperado 2min :D

Ahora que pasará? y la esposa y los hijos? Dios!
se metió a la guerra por ser hombre y se hizo gay
XD eso me sigue dando risa, pero con un hombre como
minho quien! NO! jaja

nos estamos leyendo este capitulo me gusto ^^

CAPITULO 5°

Nota: recuerden que quien narra es Taemin

Yo me encontraba sentado sobre el escritorio y él se acercó, me besó. Con mi esposa nunca había sentido aquella sensación. Era como un pequeño estallido en mis nervios, recorría mi espalda causando que mi piel se erizara. Sus besos cada vez eran más gloriosos, sus manos y las mías se desesperaban, subió sus manos a mi pecho y yo a su rostro. Ese rostro que tanto había imaginado en acariciar.
Desabotono mi camisa con tal desesperación que se rompieron varios de mis botones.
-no puedo…- resoplo tratando de recuperar el aliento -no puedo hacer algo si no estoy seguro de que es lo que tú quieras.
-pero…-tartamudeé- yo también he esperado mucho tiempo para poder estar así de cerca de ti.
Tomo mi mano y me jaloneo casi tirándome de aquel escritorio. Abrió la puerta con desesperación, salimos de aquella oficina y subió a un caballo. Estiro su mano. Sin dudarlo la tome y subí detrás de él. Cabalgamos por unos minutos.
Nos internamos en el bosque, en ese momento no me importo que pudiera ocurrir un ataque. Solo quería sentir su cuerpo al lado del mío.
Lo que único que lograba ver era su cuello y su oreja, mi tentación era tan grande que comencé a lamer su cuello hasta haber subido a su lóbulo, retorció su cuello y vi como su piel se erizaba.
Detuvo el andar del caballo abruptamente. De un salto bajo del caballo.
-¿bajas?- pregunto estirando su mano para que tomara de ella.
Baje del caballo y se lanzo sobre mí. Sus besos eran cada vez más excitantes para mí. Nos quedamos plantados en el piso, termino de quitarme la camisa y bajo su mirada dirigiéndola a mi miembro. Que producto de esos besos seductores estaba más que despierto. Trato de arrancar mis pantalones con desesperación, sin esperar a que logara su propósito tome de mis pantalones y me despoje de ellos.
Yo permanecía parado, mientras que el besaba mi pecho bajando hasta mi ombligo, se detuvo por unos segundos; acto seguido pude sentir su mano que me despojaba de mi ropa interior, y posándose sobre mi miembro, comenzando a masturbarme. No pude evitar emitir gemidos, mi placer nunca había sido tan grande.
Se detuvo y se paro frente a mí.
-Taemin, ¿estás seguro de lo que estamos a punto de hacer?-pregunto besándome lentamente.
Tome de su cuello, jalándolo hacia mí. –Estoy más que seguro- lo bese con pasión extrema. Tome el cuello de su camisa, y comencé a arrancar los botones. Baje mis manos a su entrepierna y se estremeció. Esto me éxito más de lo que ya estaba. Sin pensarlo dos veces baje sus pantalones y su ropa interior. Al tener ese esplendido cuerpo desnudo y a mi merced, me detuve a mirarlo por un segundo, bese su vientre bajo. Era tan delicioso sentir como me acercaba a su miembro, sus bellos me daba la bienvenida a la gloria eterna.
Comencé a besar su miembro, lo introduje en mi boca una y otra vez, sus gemidos me indicaban que hacia lo correcto. El liquido que salió disparado de su miembro, hizo detener sus movimientos de caderas. Me detuve y comencé a besarlo lentamente, sentía el sabor del hombre que tanto me atraía en secreto.
Se recostó lentamente suspirando y tratando de recuperar el aliento. Me acosté a su lado con una enorme sonrisa dibujada en mi rostro.
Aun no pasaba ni un minuto de aquel momento, y comenzó a besar mu cuello nuevamente, recorrió mi cuerpo con su gran mano. Poso su mano en mi miembro y comenzó nuevamente a masturbarme, esta vez fui yo quien expulso aquel liquido que daba aviso de la gran excitación que sentía mojo sus dedos con lubricante; dándome la vuelta los introdujo en mi cavidad, causando en mi un poco de dolor.
Se levanto y alzo mis piernas sobre su cuello. Retiro sus dedos y me penetro. El dolor que sentía era grande pero no más que el placer y la excitación que se extendía por mi cuerpo completo. Me embestía una y otra vez, produciendo en mí gemidos continuos.
Una vez más su miembro expulso liquido blancuzco.
Ambos terminamos exhaustos, bajo mis piernas y se recostó a mi costado.
Suspire. -¿te encuentras bien?- pregunto, acaricio mi rostro suavemente.
-mejor que nunca- sonreí, suspire y me acomode en su pecho. Segundos después sin darme cuenta me quede dormido a su lado.
-Taemin, Taemin despierta- escucha decir entre sueños. Abrí lentamente mis ojos tallándolos con mis manos para aclarar mi vista.
-perdón por despertarte-. Se disculpo besando lentamente mi mejilla. –Te despertaba para que vieras el amanecer-. Dijo.
Me levante lentamente, y note un pequeño sol dorado salir entre los arboles de aquel bosque.
-es hermoso ¿verdad?-. Pregunto sentándose a mi lado, y posando su mano sobre la mía; que permanecía plantada en la tierra.
-si-. Respondí sonriendo, mire su rostro. Nunca hubiera imaginado que algo como esto sucediera algún día.
Retiro la mano que se encontraba sobre mi mano. Subió ambos manos a su cabeza y se recostó sobre ellas, usándolas como almohadas.
-adoro estar en el bosque- suspiro. Solo llevaba puesto su ropa interior y al suspirar note, como se marcaron en su pecho sus músculos.
Busque mi ropa interior por los suelos. Al no encontrarla tome mis pantalones y me los puse. Me recosté sobre su pecho y bese tiernamente su abdomen. Tomo de mi hombro y jalo de mí para que me recostara a su lado.
-es tan…-pauso –relajante, escuchar a los animales y ver el amanecer-. Dijo regalándome su mejor sonrisa, sonreí. Mi felicidad era inmensa.


Espero les guste es el primer lemon explicito que escribo en mi vida, espero sea el ultimo...ok no me falta uno...
Comenten mucho sobre si les gusto si no o si...¬¬° cualquier cosa es muy bien recibida