Autor: ❧Gwiboon (antes era Kibeums)
Género: lemon/
Parejas: 2min
Nota: la aparición de Kibum era necesaria lol Espero que les guste!

Enjoy&Comment~ ♥
keke especialmente para Esly ❤

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Estaba mareado. Las luces turbias que cambiaban de color segundo tras segundo no estaban ayudándole en lo absoluto,
el aroma a tabaco quemado, alcohol, sudor, todo; de repente todo estaba frente a su nariz y comenzaba a sentir náuseas, estaba seguro de que su estómago saldría por su garganta en cualquier momento. la fricción de su cuerpo con la del otro chico que apenas y conocía lo estaba matando, por si fuera poco; y todos los cuerpos a su alrededor, saltando, tallándose unos contra otros, haciendo que el calor se elevara a niveles fuera de su razonamiento. Se estaba volviendo loco, y lo que
más le preocupaba; lo estaba disfrutando.

Minho era débil, era como una hoja que cualquier brisa podría robarse. Taemin era la adictiva brisa que arrastraba todo a su paso, conscientemente, incorrecto, insolente, imprudente. No había palabra que lo describiera, pues realmente Taemin lo era todo en aquél instante. Era la música que latía en sus oídos, el alcohol que corría por sus venas y la luz que invadía sus ojos.
Minho creía que era el peor camino que alguna vez pudo haber tomado, pero por su mente jamás se asomó algún pensamiento de arrepentimiento.

Taemin era menor que él por un par de años, pero Minho estaba seguro de que había vivido mucho más que él, en todos los aspectos. Él vestía pantalones entubados, casi adheridos a sus delgadas piernas, con huecos en sus muslos; mostrando más piel de la necesaria, y su cabello era largo; de un color acaramelado, un color que le recordaba a una lejana y solitaria tarde de otoño, y era largo, cubría su cuello y rozaba sus hombros, y el flequillo lograba esconder sus ojos la mayor parte del tiempo. Cuando salía del primer período de clases, Taemin recién entraba a la escuela. Siempre lo veía en una de las bancas afuera del edificio principal, y Taemin sonreía cuando se daba cuenta de la mirada incrédula del mayor.
Taemin era aquello que toda su vida le habían prohibido. El día que lo conoció, se vio forzado a tirar el cigarro que Taemin sostenía con los labios, y lo había deshecho en el piso con la suela de su zapato.
"¿Cuál es tu problema?" había gritado Taemin en respuesta, y se podría decir que esa no era la mejor manera de presentarse a alguien. Pero a Minho realmente no le importó, cuando se quedó mirando a ese par de ojos, llenos de nada; oscuros, profundos, misteriosos. La voz del castaño se había quebrado gracias a lo sorprendido que estaba, y mantenía los puños cerrados.
"No tienes edad para fumar." Fue lo único que Minho dijo, intentando sonar indignado, pero la sonrisa que tenía en los labios fue algo que jamás planeó.
"Tú no tienes edad para tomar biberón. Déjame en paz, ¿quieres?" espetó el menor, con todo el desinterés que le fue posible. Sin pensarlo miró hacia arriba y se encontró con la persistente y consternada mirada del pelinegro, y se dio cuenta de que iban a la misma escuela. Una o dos veces lo había visto en la escuela, corriendo en las canchas o en alguno de los largos pasillos de la institución.

La segunda vez que Minho vio a Taemin, (o que le habló, para ser exactos), fue en los pasillos de la escuela, durante un receso en el que Minho había huido al baño. Taemin estaba adentro, sentado en los lavabos, sumergido en la pantalla de su celular.
Al castaño no le costó trabajo reconocer al tipo alto que de repente había aplastado su último cigarrillo contra la acera, pero no le guardaba rencor alguno.
"Hey, niño lindo." Taemin llamó con un aire arrogante pero casual, bajando las piernas hasta que quedaron colgando en el aire. Minho levantó la mirada y sus ojos se abrieron tanto como sus párpados lo permitían cuando vio quién era la silueta que había notado ligeramente antes de empapar su rostro con sus manos. El agua comenzó a caer en la cerámica antes de que hablara, y sólo disparó una sonrisa antes de cerrar los ojos y dejar que la fría sensación matara las partículas de estrés emanando de sus poros.
"¿Alguna vez entras a clases?" preguntó Minho, secándose con un montón de papel del dispensador. Taemin sonrió, sonrió ampliamente, y Minho pensó que una sonrisa como esa era imposible. Taemin parecía un niño atrapado con un montón de dulces que sabía no debía comer, pero aún así lo hacía, sin miedo. Negó con la cabeza, y regresó la mirada a su celular.
"¿Alguna vez no entras a clases? ¿Alguna vez respiras, Sr. Perfecto?" su voz era seria, como si supiera la historia de su vida, capítulo por capítulo. Minho se quedó congelado antes de recargarse un poco en la barra de los lavabos, a unos centímetros del castaño.
"No." fue lo único que contestó.
"Deberías intentarlo," comenzó, brincando rápida y ágilmente hasta tocar el suelo. sus botas resonaron en la pequeña habitación, y Minho le miró de frente una vez más, y la misma sensación de querer alcanzar lo desconocido lo invadió. "es agradable." Taemin terminó la oración y se dirigió hacia la puerta, totalmente cubierta por pintura de aerosol, palabras obscenas, corazones, etc., dispuesto a irse.
"espera–" Minho levantó la mano e intentó agarrar la muñeca de Taemin, pero este ya estaba del otro lado, muy lejos de su alcance.
La puerta no se cerró, y Minho logró oír una pequeña risa.
"Me llamo Taemin, por si te interesa."

Antes de que se diera cuenta, su mente había sido invadida. Durante clase de matemáticas, se encontraba mirando fijamente a la libreta, un montón de cuadros en la hoja de papel esperando alguna respuesta, esperando a que el carbón del lápiz finalmente se dignara a llegar. Minho no tenía ni la más mínima idea de lo que la maestra estaba explicando en el pizarrón, y cuando finalmente se rindió y decidió leer; sólo eran un montón de números y símbolos que no tenían sentido alguno, era como si tratara de leer chino o uno de esos idiomas complicados. Regresó la mirada a la libreta, e intentó contar los pequeños cuadros de esquina a esquina.
'¿Alguna vez respiras, Sr. Perfecto?'

Apretó el lápiz con más fuerza de la necesaria, y en pocos segundos lo dejó caer sobre la mesa.
"Disculpe, Profesora. Me siento mal, ¿puedo ir a la enfermería?" las miradas comenzaron a acumularse sobre sus hombros y encontró la sensación demasiado incómoda, pero no tuvo que esperar mucho antes de que la maestra lo alentara a dejar el aula y quedarse en la enfermería el tiempo que fuera necesario.
Caminando por los pasillos, atestados de silencio y casilleros, comenzó a preguntarse en qué clase estaba Taemin. De la nada, el rostro del menor brincó en su mente, como había sucedido durante la clase de matemáticas y los tres períodos anteriores. Minho suspiró, un poco frustrado, y optó por ir al baño una vez más.

"¿Qué haces aquí?" preguntó Minho, sus palabras llenas de curiosidad, y con la mirada fija en el cabello de Taemin, que acariciaba gentilmente la piel expuesta de su hombro, la camisa que usaba esa vez dejaba muy poco que desear al verlo. Era sólo una camisa de red color negra de cuello ancho, hasta sus hombros, y abajo únicamente traía una camisa blanca sin mangas, con un pantalón de color verde militar y unos converse viejos. Minho intentó concentrarse en su cabello, solamente su cabello.
"…estudiando." Respondió el menor, echándose a reír instantáneamente cuando se dio cuenta de que Minho estaba parado frente a él, imitando a lo que parecía una estatua con la expresión más extraña del mundo. Pocos segundos después el mayor bufó, y antes de que lograra resistirse, Taemin lo arrastraba de la muñeca por los pasillos.

"¿A dónde vamos?" preguntó Minho varias veces, pero Taemin respondió hasta la quinta vez que el mayor trataba de no sonar asustado.
"A celebrar que te saliste de clases por primera vez" señaló naturalmente, mientras con la otra mano empujaba la puerta de color verde que los llevaba hacia la azotea del edificio.
"No– yo no, no me salí, o sea sí pero n–"
"Ya, cálmate, no es como si yo pudiera reportarte." dijo Taemin, finalmente soltando la mano del mayor. Minho sacudió la cabeza cuando estuvo a punto de replicar y decirle que no lo soltara. Platicaron por unos minutos, o al menos eso era lo que Minho creía.

La plática se tornó cómoda en poco tiempo, lo cual sorprendió a Minho pues él tenía un hábito de mantenerse formal por lo menos la primera semana después de haber conocido a alguien. Pero Taemin era diferente, cada que hablaba, Minho sentía que lo conocía, que era la cosa más normal de su vida diaria; estar sentado en el techo de la escuela, dispersar la pequeña nube de humo del cigarro de Taemin frente a su cara y reirse ante una broma que el menor de la nada dijera.
Entre el montón de preguntas y anécdotas, Minho finalmente supo en qué semestre estaba Taemin, y las cosas que hacía para matar el tiempo. Taemin apenas acababa de cumplir 17 años y como dato curioso, había mencionado que muy pocos maestros sabían su nombre. Minho intentó recordar cuando fue la última vez que se había salido de clases, y llegó a la conclusión de que solo lo había hecho después de desgarrarse un tobillo en una práctica de fútbol. ("eso no cuenta, Minho." replicó Taemin, burlándose escandalosamente.)

"Ya deberías irte." Dijo Taemin de la nada, mientras Minho simplemente se dedicaba a ver las nubes de formas extrañas que comenzaban a desfilar en el cielo. "tus padres deben de estar esperándote." Minho miró al reloj en su muñeca tan rápido como pudo, y brincó de su lugar.
"me tengo que ir," dijo antes de comenzar a correr como maniático.
"te veré luego." fue lo único que Taemin dijo antes de echarse a dormir.

Ciertamente, Taemin representaba todo aquello que Minho jamás había hecho en su vida. Era relajado, despreocupado, irresponsable, y todo esto era lo que Minho encontraba tan irresistible. El hecho de que Taemin era lo que nunca había tenido, una travesura que se quedó en su mente por que jamás tuvo el valor de realizarla. Taemin era una droga, Minho se había dado cuenta, cuando Taemin de la nada se abalanzó sobre él y cerró el espacio entre sus labios. Sin pensarlo más de lo necesario, ("Pensar solo complica las cosas", había dicho Taemin repetidas veces.) respondió al repentino beso con la misma intensidad con la que lo había recibido. Sus labios eran suaves, gentiles, sabían a fresa y eran cálidos, pero su lengua era todo lo contrario, estaba hambrienta y lista para explorar la boca de Minho, y el mayor por supuesto que dejó que Taemin hiciera lo que quisiera, separando los labios cortésmente.
Desde ese día, Minho se declaró adicto a aquella droga, esa droga de cabellos lacios y ojos indiferentes, de sonrisa cálida y tentadora, había caído por esa droga con piel de seda y manos de algodón.

Cedió en muy poco tiempo, la tarde que Taemin había insistido en ir a un club no muy lejos de la estación de trenes.
"Vive un poco, ¿sí?" había dicho primero, con tono desafiante pero a la vez seguro, seguro de que Minho aceptaría. "vive un poco conmigo." había sido su argumento, aunque fuera lo que en verdad pensaba. Minho era tan correcto, que Taemin sentía la extraña necesidad de arrastrarlo un poco hacia sus territorios, a donde las noches de desvelo y música ridículamente alta eran lo normal, lo común.
Finalmente Minho aceptó, y Taemin sonrió victoriosamente, jalándolo de la mano como era su costumbre, solo que ahora entrelazaba sus dedos con los de Minho, para asegurarse de que el mayor no escaparía y saldría con uno de sus estúpidos pretextos.
"Tengo que pedir permiso." Declaró Minho, deteniendo el paso.
"¿Estás bromeando?" intuyó Taemin, mirándole con escrutinio. Minho negó con la cabeza, y Taemin se echó a reír nuevamente, apretando más el agarre con la mano del pelinegro. "Ya tienes cerca de 18 años y aún pides permiso para salir. Eres todo un caso, Choi."

Y ahora ahí estaba, entre ritmos desconocidos y emocionantes, con la visión borrosa y un menor de edad bailando contra su cuerpo.
El sudor comenzaba a resbalar de su barbilla hasta su cuello, y en ese instante, pensó que alguien debía de encender el aire acondicionado, si es que en ese lugar había aire acondicionado. Poco después de que llegaron, comenzó a quejarse de lo pobre y extraño que el club se veía. Taemin lo había ignorado, como era de predecir, pero al mayor se le olvidó todo tipo de quejas después del 4 vaso de la bebida que Taemin le había sugerido. Y el castaño de labios rosas parecía no estar afectado en lo absoluto, seguía tan calmado y normal como siempre, y Minho se sentía vencido, por primera vez en su vida.
Taemin lo arrastró hasta la pista de baile, a pesar de que Minho alegaba y argumentaba que no sabía bailar, y que no quería, y que se sentía mareado. "Excusas. No me interesa, apúrate~" fue lo único que Minho entendió.
La música era enfermiza, ese tipo de música que te envuelve hasta los huesos y comienzas a moverte inconscientemente, los latidos de tu corazón se sincronizan con los sonidos de fondo y tu mente se vuelve una revolución de luces y sensaciones. Taemin parecía ser otra persona, se pudo dar cuenta a pesar de que comenzaba a sentirse mareado, cuando movía su pecho de esa forma al ritmo de la música.
'boom boom boom' era lo único que la mente de Minho procesaba, mientras se movía de un pie al otro en un intento de acoplarse a la música, y observaba tan atento como le era posible al pequeño y sofisticado cuerpo de Taemin saltar una y otra vez, primero sus costillas, y lentamente sus caderas.
El minúsculo espacio que quedaba vivo entre los dos desapareció de un segundo a otro, cuando la canción a su vez se volvió más agresiva. Taemin ahora estaba más cerca, moviéndose casi obscenamente contra la pierna de Minho, quien a penas podía moverse, y el castaño parecía disfrutarlo de más. Minho estaba ebrio con el repentino golpe de sensaciones que le atacaron al mismo tiempo, y con el hecho de que el menor estaba muy cerca de su entrepierna, y que deliberadamente acariciaba su pecho, como tratando de convencerlo de que podía moverse, podía explorar, podía tocar.
Taemin sabía lo que buscaba, y sonreía retorcidamente cuando se dio cuenta de que estaba a casi nada de lograr su cometido, cuando el mayor era un desastre bajo el tacto de sus dedos, y cuando su cuerpo se había dejado de mover completamente. Minho apenas y podía tragar la saliva acumulada en su boca, mientras que Taemin movía las caderas y lentamente bajaba, acariciando su cuello, rozando sus labios, y antes de que su boca cayera abierta, Taemin susurró muy cerca de su oído.
"salgamos de aquí."

No pudo pensar claramente cuando dejaron el bar, y apenas se dio cuenta cuando alcanzaron la estación de trenes, sentía como si las paredes de su garganta y esófago estuvieran cubiertas con periódico húmedo, áspero. Taemin se tronaba los dedos impacientemente, y la temperatura de su cuerpo se mantenía igual, y esperó hasta que el señor que estaba en el mismo vagón se bajara. aún tenían que pasar por tres estaciones más, así que sin pensarlo dos veces (o dirigirle la palabra a Minho) Taemin se sentó sobre las piernas de este, el material de sus pantalones se estiró tanto como sus fibras podían y Minho no tuvo tiempo de preguntar qué hacía, cuando los entusiastas y hambrientos labios de Taemin se apoderaron de los suyos. no se resistió por mucho tiempo, y se encontró a sí mismo casi tan desesperado como el menor lo estaba. Antes de que las puertas del vagón se abrieran y un par de hombres se metieran, Taemin se levantó y lo jaló de la muñeca, arrastrándolo –como era de costumbre– hasta que salieron a la calle, con luces naranjas en cada esquina.
Caminaron un poco, Minho no podía ni moverse cómodamente por la inquietante sensación entre sus piernas, pero pronto Taemin se detuvo frente a un pequeño portón y sacó unas llaves de su bolsillo, y Minho perdió la noción del universo a su alrededor.

"Espera un segundo." solicitó con su voz, atropellada y apenas audible. caminó por un pequeño pasillo donde había dos puertas, pasando la barra de desayunar y una pequeña sala.
"¿Kibum?" llamó, asomando la cabeza a una de las puertas. Minho pensó una infinidad de situaciones y explicaciones para lo que estaba sucediendo, lo único que sabía era que había alguien más en el departamento, y no pudo evitar que su garganta se secara inmediatamente. Alguien balbuceó algo desde adentro de la habitación, y Minho de repente recordó que eran cerca de las 3 de la madrugada, y que Taemin tal vez no debería molestar a quien quiera que estuviese molestando. Avanzó un poco hacia donde el menor se encontraba, pero luego Taemin continuó. "Voy a estar en mi habitación con un amigo."
"No grites muy fuerte." dijo el chico en el cuarto, y Taemin se echó a reír escandalosamente. Minho intentó quedarse parado sin tambalear.
"No lo haré" respondió el castaño, y después algo se estrelló contra su cara. un empaque color verde con letras llamativas en la parte de arriba, y Minho trató de adivinar qué era aquello, pero no se encontraba en el uso apropiado de sus sentidos por lo tanto prefirió forzar demasiado su cuerpo. "gracias." y Taemin volvió a cerrar la puerta. Avanzó hasta el mayor y lo tomó de la mano, entrelazando sus dedos con poca delicadeza, pero con la calidez que Minho necesitaba. Taemin tomó el pequeño empaque y se lo dio a Minho, y este finalmente pudo ver que no era nada más y nada menos que un condón. Con el ceño fruncido apenas reconoció lo que tenía en las manos, pero antes de que reaccionara –negativa o positivamente– Taemin lo aventó como pudo hacia su cuarto, asegurando la puerta a sus espaldas.
Minho inconscientemente analizó la habitación, y pensó que no podía esperar menos de Taemin. Paredes blancas con grandes pósters en blanco y negro, alfombra de un color entre gris y morado y una sola ventana. Un escritorio con una laptop, CDs, libros regados y por supuesto un montón de ropa en la cama.
Taemin empujó la montaña de prendas y cayeron al suelo, dispersándose un poco por la caída. Lo segundo que pudo procesar era que estaba acostado en la cama, con Taemin encima; sentía sus labios calientes besar la piel de su cuello, sentía como las manos del menor se familiarizaban con las curvas de su cuerpo y recorrían su pecho y sus brazos, y Minho apenas y podía pensar claramente– su mente se había tornado blanca, lo único que existía dentro de su cabeza eran las olas de placer y cosquilleo que Taemin le provocaba.

Reaccionó en muy poco tiempo, y pronto se encontró a sí mismo en una batalla contra Taemin, una lucha de labios y lenguas tratando de dominarse, un intercambio un poco agresivo de toques y roces, y Taemin parecía estar rindiéndose; bajos gemidos escapando de su boca, el cálido aliento chocaba contra los labios de Minho, y el mayor lo estaba disfrutando.
Taemin se movía lentamente; precisamente, entre las piernas de Minho, y a él la fricción lo estaba volviendo loco, e inconscientemente buscaba más, sin liberar los labios del menor levantaba las caderas hasta encontrar lo que quería. Taemin complacía, bajando más su cuerpo; apoyado en sus rodillas, hasta que sus pechos se encontraban y ambos seguían el mismo ritmo.
No se percató de cuando Taemin se deshizo de su propia camisa, pero le imitó en cuanto pudo separarse un poco de él y tomar aire, mientras su pecho se levantaba y regresaba a su lugar con sus dificultosas respiraciones. Taemin sonrió de lado al verlo, batallando por regresar a sus sentidos, por recuperar la conciencia un poco. Avanzó un poco sobre él y lo besó firmemente una vez más, mientras con sus manos se deshacía del cinturón de Minho, y ansiosamente bajaba el cierre del pantalón. Minho no podía quejarse, y si lo hacía, sólo salían de su boca gemidos y suspiros atropellados, respiraciones bajas y apenas audibles.
Rozaba con la palma de su mano sobre la tela del bóxer de Minho, molestando, provocando, y Minho solamente se quejaba al sentir la cálida mano de Taemin sobre sus partes íntimas, pero aún así sin hacer nada. Taemin dejó los labios de Minho, rojos y húmedos con saliva, y fue descendiendo lenta, muy lentamente hasta llegar a su ombligo, donde comenzó a repartir besos superficiales, hasta pequeñas mordidas que dejaban marcas rojas en la piel del mayor.
Con su dedo índice bajo el elástico de la prenda, y pudo sentir bajo su piel los escalofríos que recorrían a Minho de pies a cabeza, sintió su cuerpo temblar bajo su aliento, sintió como sus huesos se hacían de gelatina cuando con su boca comenzó a explorar el cuerpo del mayor.

Minho sólo echaba la cabeza hacía atrás, mientras sentía al menor succionar y besar cada centímetro de piel que le fuera posible, cerraba los ojos con fuerza, intentando entender la avalancha de sensaciones que jamás había experimentado.
Taemin rápidamente había encontrado un ritmo al mover su cabeza de arriba a abajo, haciendo que Minho perdiera el conocimiento, y con su lengua tocaba lugares que hacían que Minho llorara su nombre, prácticamente, aunque intentase cubrir sus gritos con la palma de su mano. Taemin estaba contento con todo aquello, y quería ver qué tan desesperado podía dejar al mayor.
Minho fue capaz de mirar hacia abajo, y encontró la mirada de Taemin, quien hacía maravillas con su boca en su hombría, y Minho jamás había visto alguna escena tan extraordinaria en su vida. El sudor en la piel del menor hacía que hebras de su cabello se adhirieran a su piel, a su cuello, y el color de sus ojos se había vuelto más profundo, más enigmático, el color de sus labios era más claro, y la lujuria en su mirada estaba derramándose sobre él. Minho levantó las caderas una vez más, apoyándose en sus tobillos, y obligó –literalmente– a que Taemin continuara. El menor negó con la cabeza, y Minho apenas podía recuperarse, no podía hablar propiamente, pero sus ojos hablaban más claro que nunca. Taemin sonrió.
Regresó a besar los labios de Minho, a abusar de ellos, a reclamar más. Y esta vez era el turno de Minho de tocar, de sentir la suave y tersa piel del menor bajo sus manos, de sentir como sus músculos se contraían cuando pausadamente movía su cuerpo sobre el suyo, de recorrer con la palma de su mano la piel que estaba expuesta, cada parte de ella.
"¿El condón?" Preguntó Taemin, o al menos eso alcanzó a pronunciar, con palabras entrecortadas y latidos muy altos, resonando en sus oídos. Minho parecía un cachorro perdido, mirando hacía todos lados, hasta que finalmente encontró el empaque verde abajo de una sábana, tanteando con las manos sus alrededores mientras Taemin seguía disfrutando de sus labios y el sabor de su boca, sin parar de mover sus caderas y frotarse sobre él.
"Póntelo." demandó Taemin contra sus labios, succionando el labio inferior de Minho.
"¿Qué?" en shock cuestionó Minho, antes de que Taemin continuara moviendo las caderas y le hiciera perder el control una vez más.
"hazlo." Minho no tardó mucho en obedecer, mientras Taemin ágilmente se deshacía de sus pantalones y sus bóxers, sin necesidad de ponerse de pie.

Había muchas cosas que Minho debía considerar antes de tener sexo, pero esa era la única ocasión en la que no le podía importar menos, la única ocasión en la que sólo veía a Taemin, a su perfecta y uniforme piel frente a él, a su diminuta cadera y a sus delgadas y largas piernas, libres de cualquier obstrucción textil, solo para él. las ganas de hacerlo suyo incrementaron más de lo común, y con sus largos brazos arrastró a Taemin hacia él, hasta que nuevamente estaba sentado sobre su cuerpo, besándolo otra vez.
Taemin se dejó caer, con las manos en el cuello de Minho, hasta que su espalda tocó el colchón y el mayor estaba sobre su cuerpo, con las rodillas hundiéndose en la acolchonada superficie.
Minho se tomó su tiempo para recorrer a Taemin completamente, desde su cuello hasta su pálido pecho, dejando marcas en la piel; egoístas huellas de su presencia. La voz del menor salía forzosamente, gimiendo y susurrando cosas, cosas que Minho no entendía pero aún así le daban escalofríos. Taemin se movía debajo de él, rodeando su cadera con sus largas y femeninas piernas, frotándose una vez más, sus miembros chocando y haciendo que la temperatura se elevara más y más.
Taemin era perfecto, Minho concluyó, mientras tocaba una vez más esos carnosos labios que le volvían loco, Taemin era lo que necesitaba en su monótona vida, el peligro, la adrenalina, la incertidumbre de tenerlo y poder perderlo en un día– Taemin era todo lo que quería.
"Minho" murmuró Taemin, "ya." apenas consiguió hablar.
"¿Ya? ¿Estás seguro?" preguntó Minho, sin evitar sonar preocupado. Taemin se rió, con el poco aliento que tenía, el aire insuficiente en sus pulmones.
"sí, hazlo." respondió, levantándose sobre sus codos.
Minho no respondió, pero comenzó a moverse, a acomodarse un poco más rápido de lo que tenía planeado. El calor en su cuerpo comenzó a amontonarse en su estómago, y cuando entró en Taemin su vista se volvió borrosa, era como si se hubiera adentrado en una nube de humo denso, y la electricidad que le recorría era inexplicable, sus piernas temblaban violentamente y Taemin sofocaba en su boca los gemidos y lloriqueos, cerraba los ojos con presión, y mordía su labio inferior hasta que se tornaba de un color diferente.
Taemin estaba al borde del delirio, podía sentir su piel y sus músculos estirarse bruscamente, ardía como si le estuvieran marcando con metal caliente, pero la sensación lo satisfacía. Cuando Minho estaba completamente dentro de él, el dolor se calmó un poco, y ahora solo era capaz de oír su propio pulso brincando en sus oídos, sus costillas de movían frenéticamente y la fuerza de sus brazos ya no era suficiente para mantenerse un poco arriba.
"¿estás bien?" preguntó Minho, con un pequeño hilo de voz. Taemin sintió algo formándose en el fondo de su pecho, cuando se dio cuenta de que nadie se había preocupado así por él, a pesar de estar a punto de partirlo en dos. Supuso que Minho sabía que de hecho, no era virgen, y aún así el mayor hacía todo con suma delicadeza.
"ahora sólo muévete." dijo, enredando sus brazos en el cuello del pelinegro. Minho hizo como le había dicho, lentamente saliéndose del menor, y regresando antes de abandonar su cuerpo enteramente. Taemin gemía, su voz desgarrada al final de cada pequeño grito, y Minho estaba perdiendo la razón, y el salvaje impulso de moverse rápida y furiosamente dentro del menor comenzaba a dominar en su inestable mente.
Ahí estaba, finalmente el placer que venía después de una pequeña tortura. Taemin ya no podía callarse, por más que intentara guardar silencio, gemía una y otra vez, y exclamaba el nombre de Minho repetidas veces. Su cuerpo había tomado el control, sus instintos habían ganado finalmente, y Minho solo admiraba la innegable belleza de Taemin, se adentraba intensamente en el menor, y veía como su espalda se arqueaba, como los músculos de su estómago se flexionaban y como la su cadera de movía, y sentía las paredes de Taemin cerrarse un poco alrededor de su miembro.
Estaba cerca, ambos lo estaban, podía darse cuenta por los movimientos involuntarios de Taemin y la fuerza con la que Minho se movía contra él. Minho levantó un poco el ligero cuerpo de Taemin, usando ambas manos, y lo levantó a la altura de su cadera, sin que su espalda se alejara demasiado del colchón. Taemin no se resistió más, y comenzó a masturbarse al mismo ritmo que Minho lo penetraba una y otra vez.
Minho se vino primero, y el cálido líquido de su cuerpo se derramó adentro del menor, hasta que encontró su salida y comenzó a caer sobre las sábanas blancas, sintió su cuerpo relajarse, sus músculos vibrar y cada uno de sus nervios quebrarse en placer, como nunca antes lo había sentido. Taemin pronto le imitó, y su semen quedó en la palma de su mano y su abdomen, cada parte de su cuerpo se sentía más pesada y parecía que una corriente eléctrica corriera por sus venas. Cayeron como dos bultos de arena sobre la cama, y sus respiraciones eran lo único que se podía oír en el departamento. Taemin gateó hasta encontrarse a un costado de Minho, y se recargó sobre su firme pecho, soltando una carcajada escasa de aire.
Todo estaba tan mal, Minho recapacitó de un momento a otro, todo aquello estaba mal y no tenía que haber sucedido, estaba en un cuarto con un chico y apenas y podía recordar su propio nombre, había alcohol en sus venas y semen en las sábanas, y todo estaba terriblemente mal.
Miró a Taemin a los ojos, y pretendió que ese montón de pensamientos jamás habían cruzado su mente.
Estaba mal, pero prefirió ignorar eso.



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Mis otros fics!
Hot Chocolate ❧ Jongkey
sinner ❧ Jongkey
possesive ❧ Jongkey

Wooow, sabes?
Hace mucho que no leía un 2min, y
eso que es mi pareja #1 ; ___ ;
soy pecadora.

Me gustó mucho cómo lo escribiste,
fue genial ^^

Btw, eres de SPANTAA? Para que lo
muevan allá, a donde pertenece, con
otros fics lemon y bonitos también ^^

@Lilixel Hey! gracias :3 me alegra que te haya gustado c:
no, me tengo que unir o algo? :o

❧Gwiboon escribió:@Lilixel Hey! gracias :3 me alegra que te haya gustado c:
no, me tengo que unir o algo? :o

Es un club del foro lleno de brillo y perversión si deseas unirte, entra al tema, que aparece en la página principal del foro, casi hasta abajo ^^ ahí se publican los fics smut y todo ^^
pero por mientras déjalo aquí, si deseas unirte más tarde a SPANTAA, eres bienvenida ^^

aaa me encanto la forma en k describes la relacion wooow miis felicitaciones para tu scriitora la vdd me gustoo muchoo amo el 2miin ii amo cuando descruiben tande talladamente y con ese estilo las cosas n.n graciias por scribiirlo fue geniial!!!

Primero que nada, concuerdo con Lilixel e .:IsaGrell:.
Este shot esta más que calificado para estar en SPANTAA xD
Segundo, es la primera vez que leo un 2min
donde Taem es el chico malo y Minho el chico bueno
e inocente n_n' no sé si habrá sido por eso o que pero
me fascino completamente... Imaginarme a Tae fumando y
"obligando" a Minho a "vivir" un poco más fue genial.
Gracias por compartir este oneshot
:HELLO:

-toma el fic y corre lejos con el(?)-
lo ame *OOOOOOOOOO*!!
fue lo mejor y me importa bien poco en este momento que mi sobrino no deje de molestar a mi perro por no prestarle atencion *O*!!
ame tu fic y lo leere hasta que me canse y luego lo leere de nuevo *OOOOOOO*!!
y tu forma de escribir me encanto *O*!!
y te amo *O*!! (?)
sige asi *_______________________*!!

:DIVA: Me encantó!!! definitiva y absolutamente!!! me encantó... me fascinó leer a un Taemin malo !!! Dios!! esa forma de seducir al niño bueno Minho fue tan genial... bien que él quería ser seducido xDD

Me encantó el toque de Key en el fic xDD la mayoría de las veces no concibo un fic si no aparece Key xD le da todo ese toque muy él xDD

Gracias por tan buen fic... Dios!!! lo que estoy pensando no se puede decir xDD :$:

*sale corriendo*

Ah!! Gracias por compartir n____n :MUA:

WAAAO ME ENCANTÓOO TOTALMEENTE'


ESTOY ENAMORADA DE ESTE FIC PORQUE
PORQUE NO PUEDO SER YO!

eso fue genial.. se ke es una linea de
Minho pero bueno, Taemin de malo sabes eso
uñtimamente ya no me sorprende tanto como
antes el ha crecido

@woaini; haha hey~ me alegra que te haya gustado! ᄏᄏ tanto hasta para llevártelo LOL gracias por tu comentario! ;~; ♥

@Mariana Unnie; lksdlaksñs;d ;~~~; gracias por leer & comentar! me agrada que te haya gustado :3 Hahahah yo pensé lo mismo! ᄏ Key siempre tiene que hacer su pequeña aparición ♥ no no, gracias a ti por leer ᄏ

@Angel SolDiier; gracias! ᄏᄏ no puedes ser tú por que no eres de SHINee.

@DubuMa; gracias por leer & comentar! ᄏ haha estoy de acuerdo contigo~

@Angelicus; yay! gracias por leer & comentar! haha ese es el punto ᄏᄏᄏ

woow!!! me encanto!!! y es que adoro al 2MIN!!!! vivo obsesionada por ellos!!!! Y tae de chico malo me encantó !!!!y obvio tenia que vivir con key!!!! y minho de chico inocente... muero por ellos!!!! espero que sigas subiendo mas fics me gusta el JONGKEY pero amo al 2MIN!!!!

@Janess; hahah me alegra que te haya gustado ♥ & prefiero el jongkey, pero pues. sí haha
gracias por el comentario! puedes checar mis otros fics, si gustas, son jongkey :3

waaa!!! yo lo ame asi intensamente!! AMO el 2min!!! de verdad que si dios escribes demasiado bien !! :DDD

LOL me encantoooooo!!! me dejaste picada jajajajajaja la narracion fue genial me fascino! ojala q escribas mas 2min! cdt bye bye

@AliceS5, @Sol Green, @nina_lee; gracias! me alegra que les haya gustado ♥ c:

Esta de lo mas genial!!! Es uno de los mejores shot que he leido! (mis favoritos son 3 contando este) muchas gracias por compartir y porfis sigue escribiendo mas *-*

@Noreri94, hola! :3 me alegra que te haya gustado ♥ gracias! de verdad~

@SAKUmi**, Muchas gracias! c: aw ;~~; qué linda! gracias por considerarlo uno de tus favoritos! quizá pronto publique otro! luego lo checas~

genial genial genial
waa me encantoo no ma!!
ame este 2min .... por esoo amo a esa parejaa!
lastima que es cortooo
perdon por ser exigente pero es q asdasd lo amee unnie
me encantoo la Actitud de Tae no fue linda ni inocente
si no rudo, despreocupado y malotee waaa
y MinHo todo bien lindo, obediente e inocentee waa
lo contrarioo por eso me gustoo!!

@ShiiMin23; ᄏᄏᄏgracias! ´ᄇ` me alegra que te haya gustado. Y sí, me gustaría hacer un fic con más capítulos pero siento que no es lo mío XD Gracias por tu comentario ♥

@FabMin; Gracias! Qué bueno que te gustó ♥

dfhergse OMFG!
Que buen oneshot! Es uno de los primeros que leo de 2min y me encantó!
Mueroo lentamente! Amé la forma de niño malo que le diste a Taemin xD La verdad, sería genial verlo así pero sin fumar ¬¬"
Y Minho de niño bueno, esa imagen que siempre da...INCREIBLE!
Definitivamente un supergenial oneshot! Te felicito :D
Gracias por subirlo! :D

wow me enkanto!!! :KEKE:
nunka me imagine a tae de rebelde XD
pero me fascino :yupi:

CariitoKeyShawol; gracias! me alegra que te haya gustado. (: hahah por qué todos dicen eso? no es un santo, imo. alguna vez va a pecar~

kary88; XDD que bueno que te haya gustado! gracias por leer& comentar! :3

OMG Super Genial el oneshot!!!
me encanto, es uno de los mejores 2min ke
he leido!!!
Me fasino ke pusieras a Taem rebelde y picaro xD
Escriben super genial ^///^