Titulo del fic: El chico de las pizzas
Serie: Shinee
Parejas: JongKey (mención de 2min)
Tipo: Yaoi
Género: Romance
Clasificación: NC-17
Advertencias: Lemon
Beteado por: luxam9
Descripción: Que pasaría si tienes tanta hambre pero te da flojera cocinar así que pides una pizza a domicilio, pero te das cuenta que el chico que lo trae es lo más hermoso y sexy que has visto en tu vida, ¿ahora qué querrás comer, la pizza o al sexy repartidor?
NOTA: TENGO ESTE MISMO FANFIC EN OTRAS PAGINAS COMO SICHUL Y COMO KYUMIN


Era una tarde como cualquier otra. Se encontraba en su departamento acostado en el sillón. Estaba muy aburrido puesto que ese día era asueto y gracias al cielo, el día siguiente era descanso.

Lamentablemente, lo que él pensaba sería un día de asueto perfecto, al final, terminó siendo uno de los días más aburridos de la historia para él, puesto que su mejor amigo y compañero de trabajo Minho se encontraba en un día de campo con su novio Taemin en las montañas.

Genial. Su amigo estaba con su novio seguramente disfrutando entre ambos en las montañas y él se quedaba solo en su departamento, viendo una película, más aburrido que nada. «Vaya, que genial día», pensaba con sarcasmo.

Tan sumido estaba en sus pensamientos que dejó de ponerle atención a lo que transmitían en ese momento en la televisión.

Ese día era uno de los más aburridos que había tenido en toda su vida, incluso desde que se levantó, supo que ese día no la pasaría nada bien.

Se había levantado como lo haría una persona normal... ¡¡Los días en que uno iba a trabajar!!


Había olvidado apagar el despertador por lo que había sonado a las seis de la mañana. Siendo asueto, inmediatamente lanzó el despertador por la ventana y se recostó nuevamente esperando así poder conciliar el sueño. Lamentablemente había estado dando vueltas en su cama durante dos horas más. Ya hasta que dieron cerca de las ocho fue que se decidió a levantarse de su cama con un humor de los mil demonios, agarró una toalla y se dirigió a tomar un relajante baño.

Grande fue su sorpresa cuando estaba a punto de terminarse de bañar que vio que su toalla había caído al piso y el agua que se había estado tirando por no haber cerrado bien la cortina, hizo que se mojara.

Genial, su día iba de mal en peor.

Puso su toalla a secar y tuvo que salirse desnudo del baño. Su teléfono comenzó a sonar. Corrió rápidamente a contestar sin importarle si estaba vestido o no. Miró el identificador de llamadas y pudo identificar el teléfono de Minho.

—Hola Minho —dijo sentándose en su sofá aún totalmente desnudo.

—¡¡Jonghyun¡¡ Hola, solo te marcaba para saber cómo te va en tu día de asueto.

—Pues mal. Este día es uno de los más aburridos que he tenido.

—Como lo siento Jonghyun, pero ya sabias que le había prometido este día de campo a Taemin.

—Oh... No te preocupes Minho, yo entiendo. Aun así, ya recordé que tengo muchas cosas que hacer, no te preocupes por nada.

—¿Estas seguro?... Si quieres puedes venir con nosotros.

—No... No te preocupes no quiero hacer mal tercio. En serio tengo muchas cosas que hacer.


—No haces mal tercio... Ya te lo... dicho... —Se escuchó la voz de Minho entrecortada.

—Minho, ¿sigues ahí?... No se te entiende mucho.

—Es... señal... se entrecorta... p... montañas.

—No te entiendo Han.

—Jonghyun... No... Oigo —La llamada se cortó.
Se quedó mirando el teléfono.

—La señal se ha de haber perdido por las montañas.

Dejó el teléfono en el sillón. Justo cuando se estaba levantando del sillón sonó el timbre de su casa. Caminó hasta la puerta y la abrió para darse cuenta de que era su vecina. Notó inmediatamente que su vecina se le había quedado viendo de una manera muy extraña y estaba más roja que un tomate maduro listo para hacer una salsa. Se preguntó si tendría fiebre, pero no fue hasta que sintió un fuerte dolor en su mejilla que salió de sus pensamientos.

—¡¡¡Pervertido¡¡¡ —gritó su vecina a todo pulmón para después salir corriendo.

Fue hasta que se dio cuenta que se le había olvidado un pequeño detalle. ¡¡¡Se le había olvidado que estaba desnudo!! Se sonrojó de pies a cabeza y cerró rápidamente la puerta maldiciéndose interiormente por ser tan estúpido de haber olvidado que estaba desnudo.

Para colmo, en vez de haber ido por una toalla a secarse como desde un principio debería de ser, había ido a contestar su celular. El resultado había sido todo un piso mojado además de su sillón.

Genial, su día iba empeorando y justo cuando iba a ir por el trapeador se resbaló y cayó hacia atrás en el frío suelo

Enojado a más no poder, se levantó con sumo cuidado y se dirigió primero que nada a cambiarse y ponerse algo de ropa. Estando desnudo y con la caída en el suelo no quería coger un resfriado. Ya vestido con una playera azul que se ceñía a su cuerpo dejando ver perfectamente sus músculos definidos y un pantalón de mezclilla, se puso a limpiar toda el agua que había en el suelo de la sala y también la que había caído en su baño.

Al terminar se recostó en su sillón mirando la tele sin nada interesante que hacer. Si, definitivamente sería un mal día.

Volviendo a su estado de total aburrimiento, pensando en que tan bien le estaría yendo a su amigo Minho, un sonido en especial lo sacó de sus pensamientos y era nada más y nada menos que el sonido de su estómago.

Pensando que era increíble que no le hubiera dado hambre puesto que eran cerca de las dos de la tarde y él no había comido absolutamente nada, decidió pedir una pizza para evitar lo tedioso que sería comenzar a cocinar.

Esperó los treinta minutos reglamentarios que tardaría la pizza en llegar a su casa hasta que por fin sonó el timbre de su puerta. Se dirigió con pereza pero el hambre ganaba en esos momentos. Se dirigió a la puerta y abrió.

Se quedó totalmente sin palabras al ver al repartidor, su belleza no tenía comparación. Su cabello rojo pasión, sus ojos negros como la noche, esos labios tan carnosos que deseaba probar y esa esbelta figura. Se fijó en sus rasgos tan finos que simplemente podría hacerse pasar por una mujer, pero estaba casi seguro de que la persona que estaba enfrente a él era un hombre.

Tan metido estaba en sus pensamientos que no recabó en como ese repartidor también se lo estaba comiendo con la mirada. Estuvieron por unos escasos segundos viéndose entre sí, hasta que el repartidor habló:

—¿Te gusta lo que ves? —preguntó con cierto tono de arrogancia.

Jonghyun salió de sus ensoñaciones y le miró algo sonrojado.

—Lo... Lo siento —respondió apartando la mirada—. ¿Cu...Cuánto va a ser? —cuestionó aun con ese pequeño sonrojo en sus mejillas y posando una mano sobre su nuca.

—Son quince dólares —respondió el repartidor aun con su mirada fija en los ojos de Jonghyun.

—Ah claro —Jonghyun buscó en sus bolsillos el monto—. Am… Oye —Vio el nombre del repartidor en la placa que traía este en su ropa—. Key... No tengo el dinero aquí, lo tengo adentro si gustas pasar mientras lo voy a buscar —dijo esta vez mirando a Key directamente a los ojos.

—Claro, no importa... —dijo poniendo una sonrisa de medio lado, a Jonghyun eso le dio un poco de nervios.

Al momento de pasar Jonghyun hizo una seña para que Key también entrara, cuando lo hizo, Jonghyun cerró la puerta.

—Espera aquí un segundo —Jonghyun se dirigió a su cuarto a buscar su cartera.

Key dejó la pizza en la mesa del comedor y se quedó observando a su alrededor. Pudo divisar que el departamento era amplio, cómodamente podrían vivir ahí tres personas. Se dirigió a la sala de estar y vio las fotografías que se encontraban alrededor, en una pudo divisar a Jonghyun junto con una mujer y un hombre; esos deberían de ser sus padres. En otra fotografía se encontraba él solo y en la última fotografía se encontraba él junto con otro chico. No supo por qué en esos momentos lo embargó un sentimiento de enojo. Sentía enojo por esa otra persona que estaba abrazando a Jonghyun.

Después de ver esa foto se dirigió a la mesa de la sala donde vio unas revistas, entonces vio una imagen que lo dejó impactado, ese mismo muchacho que estaba modelando esos jeans sin playera era Jonghyun. Ahora sabia por qué se le había hecho tan familiar.

Se quedó mirando la revista que tenía entre sus manos y le dio vuelta a la página. Se encontró la imagen de ese otro chico que había visto en la fotografía promocionando una playera con unos vaqueros muy gastados. Otra vez ese sentimiento de amargura y odio hacia ese chico volvieron a surgir en su interior. Regresó la página a donde estaba la imagen de Jonghyun y se le quedó mirando. Vaya que tenía muy buen físico, tenía los músculos del abdomen bien definidos.

Se quedó mirando la imagen y se puso a pensar en cómo sería estar con él, si sería muy bueno en la cama y se quedó pensando en que por qué no descubrirlo. Haciendo su característica sonrisa de medio lado, se quedó pensando en que quizás no podría volver al trabajo ese día.

Jonghyun había estado buscando su cartera, hasta que por fin dio con ella en su closet. Se quedó mirándola perdiéndose en sus pensamientos, recordando al chico de las pizzas. Era demasiado hermoso. Pensó a que sabrían esos carnosos labios y esa piel lechosa que tenía.

El estaba consciente de sus preferencias sexuales ya que por eso mismo su padre lo había corrido de su casa diciéndole que era un pecado que le gustara alguien de su mismo sexo. Que solo los hijos de satanás tenían esos gustos y que ninguno de sus hijos iba a ser un hijo de Satanás, antes muerto. Después de tanto tratarlo de hacer entrar en razón junto con su madre fue inútil y terminó por correrlo a la calle. Gracias al cielo había ido con su amigo Minho diciéndole todo lo que había sucedido con su padre y entonces él le dijo que podía entrar a trabajar a donde él trabajaba por que Minho ya era modelo desde antes de conocerlo.

Después de eso empezó a ser modelo y recibía muy buena paga. Con eso podía pagar todos sus gastos. Después de eso comenzó a pensar que quizá no solo tenía hambre de la pizza quizá tan bien podría cenarse a alguien más.

Estaba tan metido en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando Key le estaba hablando en el umbral de su puerta.

—¿Ya encontraste tu cartera? —preguntó viéndolo con una mirada de lujuria.

—A cla...claro —dijo nervioso no sabía por qué ese chico lo ponía de nervios.

Ambos se dirigieron a la sala tranquilamente, pero no fue hasta que Jonghyun sintió como lo estampaban contra la pared, soltando un gemido de dolor, que abrió sus ojos y pudo distinguir la figura de Key a muy pocos centímetros de su cara.

— ¿Nadie te ha dicho lo bien que te vez con esa playera ceñida al cuerpo? —preguntó acercando cada vez más sus labios a los de Jonghyun.

Jonghyun no podía creer lo que estaba pasando. Estaba casi seguro que tendría que ser él quien hiciera algún movimiento antes que ese joven que al parecer se le estaba ofreciendo en bandeja de plata. Aún seguía tratando de captar lo que en ese momento estaba sucediendo hasta que sintió los labios de Key sobre los suyos.

En un principio sólo sintió como esos labios se movían sobre los suyos pero ni fue hasta que la lengua de Key pedía paso entre sus labios que fue consciente de lo que estaba pasando.

Abrió un poco sus labios para dar paso a la lengua extranjera. Empezó a responder a ese beso e inmediatamente comenzó una batalla por el poder. Su sabor no tenía comparación. Era una mezcla entre fresa y miel, era extremadamente adictivo.

Mientras ese beso se iba volviendo cada vez más apasionado, las manos de Key fueron a la nuca de Jonghyun para evitar que el otro se despegara de él, y las manos de Jonghyun fueron a dar su cintura para pegarlo más y profundizar aún más el contacto.

— ¿No debería de pagarte la pizza? —preguntó Jonghyun dentro del beso.

—Ya me la estas pagando —masculló Key con su sonrisa.

Jonghyun posó sus manos en los flancos del pelirrojo y lo cargó haciendo que Key posara sus piernas alrededor de su cintura. El beso continuó fogosamente hasta que el pelirrojo fue depositado sobre las suaves sábanas de la cama matrimonial.

—Me gusta el satín —susurró antes de volver a jalar al moreno y atrapar sus labios. Jonghyun sonrió entre el beso.

El moreno en un momento del beso mordió con fuerza el labio inferior del pelirrojo causándole a Key un gemido de dolor y placer, con su lengua limpio los residuos de sangre que quedaron en el labio del pelirrojo causando otro gemido en el mismo.

Las caricias iban y venían por ambas partes, las manos habilidosas de Key acariciaban a Jonghyun por la espalda, causando sensaciones extremadamente placenteras en el moreno.

Jonghyun tenía las dos manos a los costados de la cabeza del pelirrojo mientras se dedicaba a dar placenteros besos al cuello de su ahora amante. En un rápido movimiento las piernas del pelirrojo rodearon la cintura del moreno y giro bruscamente quedando el arriba.

Key se levantó rápidamente y se dirigió hacia el guardarropa de Jonghyun mientras este le daba una mirada de duda, lujuria y deseo, pensando en que podría estar buscando tan rápidamente su amante, hasta que el otro volteo y se dirigió hacia el como una fiera asechando a su presa, se subió sobre el para darle un beso apasionadamente, no se dio cuenta cuando sus manos y sus pies fueron a dar hacia las esquinas de la cama siendo atados a ella con corbatas.

—Así que esto es lo que estabas buscando… no me hagas esto —suplico mirándolo con lujuria.

—Vamos a jugar un rato —dijo el pelirrojo para después darle otro beso apasionado al moreno.

Metió sus manos bajo la playera de su prisionero regalando deliciosas y sensuales caricias, mientras mesia sus caderas causando que sus miembros ya despiertos bajo sus pantalones se rozaran descaradamente causándoles roncos gemidos a ambos.

—Esto estorba —señalando la playera ceñida al cuerpo que llevaba puesta Jonghyun.

El pelirrojo se levantó del moreno y se dirigió hacia el escritorio de la habitación moviendo sus caderas sensualmente sabiendo que el moreno lo miraba expectantemente, se regresó hacia el moreno aun moviendo sensualmente sus caderas para después montarse sobre él.

—Tendrás que despedirte de la ropa que llevas puesta por que lamentablemente ya no la podrás volver a usar ¬—Le dijo al oído mordiendo el lóbulo de sus oreja sensualmente causando un suspiro en el moreno.

El moreno aun sin comprender lo que el pelirrojo le estaba diciendo solo se le quedo mirando con la duda impregnada en sus ojos, hasta que vio como el pelirrojo sacaba de su espalda unas tijeras de plata y la dirigía hacia la orilla de su playera y comenzaba a cortar lentamente mientras le mandaba una mirada de lujuria pura y deseo desenfrenado.

El pelirrojo iba cortando la estorbosa prenda dejando que el frio de las navajas de acero se pegara a la piel caliente del moreno causando que este soltara sonoros jadeos, cuando termino de cortar la prenda la quito de Jonghyun.

—Crees que deba quitar esto —dijo el pelirrojo poniendo una mano en el pantalón del moreno por encima de su entrepierna ya notoria haciendo ligera presión, causando que el moreno soltara un gemido ronco.

—Por… Por favor —espeto con dificultad el moreno, este se encontraba extasiado nunca en toda su vida hubo alguien que lo hiciera sentir como lo estaba haciendo ese pelirrojo en tan solo cuestión de segundos, cada segundo que pasaba lo hacía sentir una fuerte atracción hacia ese pelirrojo, sentía que no podía dejarlo ir después de esto.

Como si sus plegarias fueran escuchadas este comenzó a cortar justo debajo de su ombligo pasando la punta de las tijeras peligrosamente sobre su entrepierna dándole una sensación de adrenalina, deseo y excitación. El pelirrojo desvió la tijera hacia la pierna derecha cortando la mezclilla haciendo el mismo proceso en la pierna izquierda, cuando termino de cortar la prenda igual que la playera la quito de Jonghyun arrojándola a alguna parte de la habitación, dejando al moreno solo en bóxer.

—¿Tengo mucha ropa no crees? —espeto mirándose el mismo al tiempo que le mandaba al moreno una mirada de deseo mientras el otro lo miraba suplicante porque lo soltara para poder despojar de esas horribles prendas al pelirrojo.

—Por favor… desátame… quiero tocarte —dijo el moreno de manera suplicante.

—No… jugaremos un poco más —el pelirrojo se levantó del moreno y empezó a quitarse lentamente la ropa bajo la atenta mirada del moreno.

Key se quitaba la ropa de una manera extremadamente sensual sabiendo que Jonghyun no le quitaba la mirada de encima. Mientras se quitaba la playera lentamente no quitaba sus ojos del moreno, se limitaba a comérselo con su mirada felina.

Jonghyun seguía viendo como el pelirrojo se quitaba su playera lentamente siendo para él una de los más grandes sacrilegios, sabiendo que esa cremosa piel que ahora yacía expuesta al haber quitado la playera no pudiera ser tocada por sus manos recorriendo cada centímetro de esa gloriosa obra de arte, siendo para él una de las más crueles torturas que recibiría en toda su vida.

—¿Crees que… deba de también quitarme esto? —dijo el pelirrojo señalando sus pantalones mientras movía sus caderas sugerentemente presionando con ellas el ya notoria bulto en el bóxer, haciendo que el moreno gimiera y se desesperara.

—Por favor Key… déjame tocarte… no quieres que te toque —espeto el moreno mientras hacia un esfuerzo por levantarse y acercarse lo más que pudiera a los labios del pelirrojo, logrando solo rosarlos.

El pelirrojo sonrió ante eso último, y se debatía internamente entre si debía de soltarlo o no ya que él también quería que el moreno lo tocara, lo tomara y lo hiciera suyo toda la noche, sentir esos labios recorriendo su piel, y esas habilidosas manos tocando hasta los lugares más recónditos de sus ser. Definitivamente estaba teniendo una batalla con su yo interior.

Después de mucho haberlo pensado, dejando al moreno con una mirada que decía más de mil palabras, el pelirrojo al fin se decidió por liberarlo, al momento en que soltó el primer amarre de su brazo derecho se dirigió hacia la pierna derecha para poder desamarrarla, cuando lo hizo apenas se dirigía a la pierna izquierda para desamarrarla pero se dio cuenta que esta ya se encontraba desatada junto con el brazo izquierdo del moreno, en ningún momento se había dado cuenta cuando Jonghyun había podido librarse de los amarres que lo mantenían prisionero tan rápido.

Después todo ocurrió tan rápido que el pelirrojo apenas y pudo reaccionar cuando ya se encontraba aprisionado entre los brazos del moreno y la cama.

—Ahora vivirás en carne propia lo que yo sufrí — Besándolo con toda la pasión que tenía resguardada desde el inicio de su tortura.

El pelirrojo se derretía bajo sus toques, sabía que había invocado ahora al mismísimo demonio.

Las caricias iban y venían por parte de ambos, los besos salvajes, profundos y apasionados, era una batalla feroz por cobrar el dominio de esto que se estaban convirtiendo en un juego sumamente peligroso.

Los labios del moreno se acoplaban perfectamente a los del pelirrojo, mientras que este recorría todo lo que podía con sus habilidosas manos, tan sumiso estaba en su trabajo que no se dio cuenta cuando fue que Jonghyun le había hecho lo mismo que le hizo a él, ósea, amarrarlo a la cama.

Estuvo a punto de reprocharle cuando un beso apasionado término callándolo, dejándose llevar por esas sensaciones tan pasionales en las que lo sometía el moreno, al cortar ese beso que sin duda había sido uno de los mejores que había tenido en su vida pero por obvias razones jamás admitiría, se le quedo mirando al moreno quien traía en su cara una mirada de extrema lujuria y pasión.

No podía creer que esa criatura que en esos momentos se encontraba debajo de él estuviera totalmente a su merced, después de que habían cortado ese apasionado beso no lo dudó ni un segundo y lo había amarrado a la cama como lo había hecho con el anteriormente.

El moreno se alejó de él yéndose de la habitación por unos instantes.

—Hey tú. ¡¡¿A dónde crees que vas?!! ¡No puedes dejarme así! —Espeto mirando al
No podía creer que se atreviera a dejarlo en ese estado, como se atrevía, tan excitado estaba que ya le dolía el Traer puesto los pantalones, trataba de zafarse del amarre de la cama pero valla que el moreno supo amarrarlo para, que no escapara.

Siguió forcejeando con las sabanas que lo estaban apresando a esa cama, no podía creer que el gran Kim Key allá caído en eso, pero eso no quedaría así, agarraría venganza contra ese moreno sexy, hermoso y... Espera que estaba haciendo Elogiando a su apresar definitivamente estaba enloqueciendo, tan encimado estaba en sus pensamientos que no se había dado cuenta cuando había vuelto el moreno.

Lo vio dejando una caja al lado de la cama, pero no había alcanzado a ver que era.

El moreno se posiciono sobre el pelirrojo otra vez para después besarlo apasionadamente, el pelirrojo no se resistía tan pronto se había posado sobre el había perdido todo sentido de cordura respecto a su venganza.

El beso seguía feroz, pasional y entregado por parte de ambos lados.

El pelirrojo estaba tan concentrado en seguirle el feroz beso al moreno que no se percató cuando agarro las tijeras con las que le había cortado la ropa a Jonghyun anteriormente.

Todo lo que podía era ver ya que no se poda mover gracias a las agarraderas de las esquinas de la cama, un jadeo profundo salió del pelirrojo al sentir las frías tijeras recorrer su piel recortando lentamente su pantalón.

—Aaah... No — forcejeaba con Jonghyun mientras que este seguía recortando el pantalón de su trabajo, no es que le importara mucho. Dejo de forcejear cuando el moreno lo beso con rudeza, mordiéndole el labio causando que el pelirrojo soltara un quejido permitiéndole al moreno meter su lengua para explorar esa cavidad que tanto anhelaba.

Cuando terminar por cortar el pantalón descubrió esa piel lechosa, que tanto lo incitaba a pecar.

Trato de abstenerse a tocar esa piel que tanto lo tentaba, él quería ver a la reina en su traje natural, dirigió las tijeras hacia el borde del boxer y comenzó a cortar pasando muy descaradamente sobre su muy abultada entrepierna causando en el pelirrojo un sonoro gemido que retumbó en las paredes del cuarto.

—Aaah…

Cuando termino de cortar el pantalón lo arrojo a alguna parte de la habitación. Dejando a su amante como dios lo trajo al mundo. Después de tirar los restos de ropas inservibles que el llevaba encima se dedicó ver el cuerpo de ese ser tan perfecto que se encontraba debajo de él, nunca en su vida había visto algo tan hermoso.

Se acercó lentamente hacia el pelirrojo y comenzó a besarle lenta y sensualmente sus labios mordiéndolos, succionándolos, siguió bajando por su cuello succionando tan fuerte como podía para al final dejar unas marcas que tardaran semanas en quitarse.

El pelirrojo no podía creer lo bien que se sentía las caricias que le proporcionaba ese moreno que tenía frente a él, sintió como este bajaba desde sus labios hasta su cuello y aun iba descendiendo, sentía como iba repartiendo besos húmedos por todo su abdomen hasta bajar a su vientre.

Seguía saboreando esa piel que lo había estado tentando desde que lo vio en la entrada con la pizza, cuando recordó eso inmediatamente se separó del pelirrojo y se dirigió a la caja que había traído.

Estuvo a punto de gritarle por que se atrevía a dejarlo de nuevo cuando se dio cuenta que el moreno estaba agarrando la caja de había traído, ya se había olvidado de ella con tanto ajetreo, vio que el moreno sacaba algo de la caja, el moreno volteo conectando por unos instantes sus mirada pero para Key esa mirada significo su sentencia, posiblemente mañana no podría caminar.

Jonghyun se incoó sobre la cama aun lado de Key y comenzó a besarlo apasionadamente, soltó un intenso jadeo cuando sintió algo caliente que se posaba sobre su vientre, volteo a ver que era y no podía creer lo que veía, era un pedazo de la pizza que le había traído, no podía creer que el moreno hubiera echo eso.

—¿Sería malo desperdiciar la pizza no crees? —dijo el moreno mientras movía la pizza por todo el estómago del pelirrojo sacándole sonoros gemidos.

Jonghyun acercó lentamente su boca hacia el estómago del pelirrojo, agarrando un trozo grande empezó a masticarlo en frente de el para después besarlo para que no fuera el único que comiera de ese manjar.

Podía sentir el pedazo de comida en su boca pero también podía sentir la lengua de ese moreno que lo traía loco recorriendo cada rincón de su boca, soltaba sonoros gemidos, que salían desde lo más profundo de su ser.

Aunque ya que no había quedado nada de comida en ese beso no era impedimento para que estos siguieran besándose fervientemente.

—Con un demonio… hazlo ya… —el pelirrojo no lo quiso demostrar porque para él su orgullo era lo que más importaba, pero ya no aguantaba estar amarrado a esa cama quería que el moreno atendiera el “ligero” problemita que tenía entre sus piernas.

El moreno ante tal petición no lo dudó ni un segundo y desamarro al pelirrojo que ya de tanto forcejear tenia las muñecas rojas, justo cuando el moreno libero a su presa de su ultimo amarre, este no dudo ni un segundo en lanzársele encima quedando el moreno aprisionado entre la cama y el pelirrojo, devorando sus labios con mucha pasión y enredando sus manos alrededor del cuello de este para que no escapara.

Las manos del moreno recorrían fervientemente todo el cuerpo del pelirrojo, quería marcar ese cuerpo con caricias, con mordiscos… con amor quería marcarlo para que fuera suyo y de nadie más. No supo por qué pero desde que lo vio en el umbral de su casa había tenido una fuerte conexión con esa mirada misteriosa que el otro le profesaba, lo que el menos quería es que el pelirrojo se tomara esto como un calentón de una sola noche.

Algo lo saco de sus pensamientos, un gemido que profesaba de sí mismo, fue cuando miro lo que el pelirrojo estaba haciendo, tenía su anatomía atrapada entre sus manos, subiendo y bajando de una manera lenta y desesperante, del moreno solo se podían escuchar los jadeos y gemidos que salían de él, Key solo se dedicaba a mirar las como las facciones de Jonghyun se deformaban por el placer, el pelirrojo comenzó a descender por el cuerpo del moreno hasta llegar a su bien dotada anatomía, sonrió de lado antes de cambiar sus manos por su boca causándole al moreno un fuerte gemido ronco mientras arqueaba su cuerpo.

La cabeza del pelirrojo subía y bajaba a una velocidad lenta y torturante, el moreno dirigió sus manos hacia la cabeza del pelirrojo imponiendo el ritmo que él deseaba en un momento sintió una presión en su bajo vientre sabiendo que pronto se vendría, cosa que trataría de prolongar lo más posible, de inmediato quito con mucho a su pesar la cabeza del pelirrojo de su anatomía para besarle con mucha pasión cambiando así la posiciones quedando el pelirrojo debajo de él, lo seguía besando como toda una fiera tenía una mano al lado de la cabeza del pelirrojo para apoyarse y no aplastarlo, mientras que su otra mano se dirigió hacia el sexo de su amante, y sus piernas a cada lado de las caderas de este.

Primero con su dedo índice toco la punta causando un jadeo en su amante, para consiguiente seguir subiendo y bajando su mano.

El pelirrojo no podía dejar de soltar ligeros jadeos causados por ese dios griego que se encontraba justo enfrente de él.

—Más… Rápido —Al diablo con el orgullo, ese moreno lo estaba volviendo loco, por fin o había logrado, le había sacado de sus cabales y lo único que quería sentir en esos momentos era al menor desgarrándole por dentro.

Jonghyun no se hizo de rogar y acelero sus movimientos causando en el pelirrojo en el pelirrojo roncos gemidos que para el eran música para sus oídos.

—Ahhh… ahh —los gemidos por parte del pelirrojo seguían hasta que este sintió una presión en la parte baja de su vientre sabiendo que pronto se correría

Unos últimos movimientos bastaron para que Key se viniera en su mano, acercándola a su boca para lamer todo el líquido seminal que corría por ella de una manera un tanto erótica y sensual, causando que al pelirrojo otra vez se excitara con tan erótica escena.

—Te quiero… dentro… ya —Más que una petición parecía que era una orden directa, y valla que no estaba dispuesto a desobedecerla.

Acerco tres de sus dedos a la boca del pelirrojo, diciéndole con la mirada lo que tenía que hacer para que no le doliera. El pelirrojo agarro la mano del moreno y la dirigió a su boca metiendo sus tres dedos y recorriéndoles lentamente con su lengua, ya bien ensalivados sus dedos el moreno dirigió su mano hacia la entrada del pelirrojo.

—Dat-te prisa

El moreno por acatar esa orden metió los tres dedos de golpe sacando al pelirrojo un ronco gemido de dolor, el moreno lo beso lentamente para disipar un poco los pensamientos del pelirrojo acerca del dolor, comenzó a mover sus dedos abriéndolos y cerrándolos lo más que podía, en círculos y muchos más movimientos para dilatar bien la entrada del pelirrojo.

—Y...Ya no resisto —Tanta fue la desesperación del pelirrojo, que el alejo la mano del moreno de su entrada que aún no se encontraba totalmente dilatada, cambio de posiciones con el moreno quedando el arriba.

Comenzó besándolo fervientemente mientras que con una de sus manos masajeaba el miembro del otro, cuando ya lo sintió totalmente duro lo agarro y sentándose a horcajadas descendió de golpe, obligando al moreno a entrar en el de una sola estocada causando un gemido de dolor tan fuerte, que se podría haber escuchado en todo el edificio.

—Si se…serás tonto — le regaño el moreno por la tontería que se le había ocurrido hacer, Jonghyun se apoyó en su brazo para poder acercarse a la cara del pelirrojo y con el otro levantándole el mentón para besarlo dulcemente mientras le quitaba con sus pulgares las lágrimas que salían de el a causa del dolor por la reciente acción

Al pelirrojo si le había dolido y debería decir que mucho, además de no haber estado preparado adecuadamente el moreno no tenía precisamente un tamaño normal, no es que eso le disgustara al contrario, le encantaba y le excitaba tener al moreno de esa forma. Al sentir como el moreno lo besaba lentamente para quitarle las lágrimas que escurrían por sus mejillas no se lo dijo pero se le hizo un gesto extremadamente tierno.

Mientras que esperaba que el pelirrojo se acostumbrara a la intromisión siguió besándolo lo más lenta y tiernamente posible, el moreno lo besaba con amor, lo que el menos quería era que en la mañana él se despertara y ya no encontrara al pelirrojo por ningún lado dado como resultado solo otra noche de calentura.

El moreno dejo de nuevo a su presa debajo de el para tener un mejor acceso, esperando aun así que su amante se acostumbrara a esa intromisión.

Sentía al moreno besarlo lentamente, hasta que sintió que le moreno lo besaba con ¿Amor? No, no podía, disipando sus pensamientos comenzó a mover sus caderas en señal de que ya podía comenzar.

Al sentir los movimientos de cadera del pelirrojo, comenzó con ese lento y tortuoso vaivén sacando gemidos de ambas partes.

—M…Mas Ra…Rápido —sentía que iba a explotar si el moreno no aceleraba sus movimientos, pero parecía que se había propuesto no escucharlo porque lo único que logro fue que hiciera mucho más lentos esos movimientos que lo estaban poniendo al borde de la locura.

Los lentos vaivenes que estaba haciendo el moreno causaron que el pelirrojo llegara al borde de la locura, si el moreno no quería ir más rápido el sí, en un rápido movimiento invirtió las posiciones quedando el arriba, comenzó subiendo y bajando de una manera rápida consiguiendo lo que él quería desde un principio.

Jonghyun no podía ver escena más erótica desde su punto de vista, su amante perlado de sudor, gimiendo como si su vida dependiera de ello, auto-penetrándose y sonrojado definitivamente no conseguiría una mejor vista que esa que tenía enfrente de él.

Una orquesta de gemidos era lo que se escuchaba en esa habitación además del olor a sexo que embriagaba todo el ambiente.

Sentía como las paredes del pelirrojo comenzaban a cerrarse sabiendo que pronto acabaría, sus manos que hasta ahora estuvieron agarrando las caderas del pelirrojo para ayudarlo con las embestidas, comenzaron a masajear sus muslos de arriba hacia abajo para volver a sus caderas y agarrándolas fuerte mente para alzarlo y dejando caer al pelirrojo sobre su hombría adentrándose cada vez más hasta que oyó un gemido diferente a los demás, sabiendo que había dado en el punto exacto donde su amante se moriría de placer.

—Hay… justo hay... mmm ahh

Cumpliendo sus órdenes siguió dando en ese punto tan certero hasta que sintió ese cosquilleo en su bajo vientre cabiendo que estaba al punto del clímax, dirigió una de sus manos hacia la hombría de su amante comenzando a masajearla al ritmo de sus embestidas, cuando sintió la explosión del orgasmo viniéndose en el pelirrojo, este al sentir ese líquido caliente en su interior no aguanto más causando que se viniera entre ambos vientres.

Ambos estaban perlados de sudor y exhaustos por el ejercicio recién hecho, el pelirrojo recostado sobre el moreno aun con él en su interior tratando de regular su respiración, mientras que este con cuidado salió del interior de su amante causando un quejido de disgusto por parte de este acomodándolo al lado suyo para después abrazarlo por la cintura acercándolo a él lo más posible con miedo a que cuando despertara este ya no estuviera.

Cuando el moreno salió del no pudo contener ese quejido de disgusto al no sentirlo en su interior, ahora por alguna razón se sentía vacío, sintió como el moreno lo acomodaba a su lado para después pasar un brazo por su cintura.

Pensando en que es ese sentimiento que estaba albergando en él, ya vería que pasaba en la mañana, pero fuera de eso ya se imaginaba la regañada que le darían mañana en su trabajo pero bueno eso era lo de menos ahora, volteo a ver a su moreno… espera había dicho Su, encimado en sus pensamientos se recostó sobre el pecho del otro para después caer en un profundo y dulce sueño.

El moreno sintió como el pelirrojo se acomodaba encima de el para después quedarse dormido, se quedó viendo como esa persona que estaba junto a él, mostraba una cara de tranquilidad infinita, sintiendo como esa aura de paz que ahora rodeaba en esa habitación era suficiente para que pudiera descansar por esa noche, ya mañana se permitiría pensar en lo ocurrido, cerro sus ojos para después caer al igual que el pelirrojo en ese sueño tan tranquilizador y profundo esperando con ansias por que en la mañana pudiera aun encontrarlo hay.

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A la mañana siguiente el moreno se fue despertando lentamente. Recordando lo que pasó en la noche, comenzó a tantear con su mano la cama para poder abrazar otra vez ese cuerpo que tanto amaba… espera… ¡amar?. En la noche justo cuando comenzó a besarlo con dulzura se dio cuenta que no podía estar sin ese hermoso ser que le quitaba la tranquilidad así que si, se podría decir que se había enamorado a primera vista, siguió tanteando la cama hasta llegar al borde, abriendo sus ojos rápidamente pero lo único que vio enfrente de él, fue un espacio vacío

Entonces supo que su mayor miedo se había cumplido, sintió una opresión en su corazón al saber que su amante se había ido, que para él había sido solo una calentura de una noche, estaba pensando lo peor cuando escuchó como la puerta de la ducha se habría dando paso a un pelirrojo que estaba cubierto solamente por una toalla en la cintura, y gotas de agua que se escurrían por su lechosa piel.

—Veo que ya despertaste —Caminó lentamente por toda la habitación mientras recogía sus ropas rotas para después tirarlas.

—Tendrás algo que me prestes, creo que sabes porque no puedo utilizar mi ropa verdad —dijo mirándolo con una sonrisa de medio lado y una sonrisa un tanto pervertida
El moreno tan solo asintió y se dirigió a su ropero para sacar una playera y unos pantalones.

—Son los más pequeños que tengo

—No hay problema

El pelirrojo agarro las prendas y se dirigió al baño a cambiarse, al salir el moreno se dio la vuelta para mirarlo, era una imagen un tanto graciosa puesto que aun siendo las prendas más pequeñas que el tenia aun así le quedaban grandes al pelirrojo, este fue a sentarse en la cama y prendió la televisión, ya que hoy era su día libre no tenía que trabajar.

Jonghyun se paró e imitando al pelirrojo agarro las prendas del suelo para tirarlas, adornándose en su cara una sonrisa al recordar lo pasado en la noche.

Se dirigió a su armario para sacar nueva ropa y se fue a bañar esperando que cuando saliera Key aun estuviera hay, después de que termino de bañarse y cambiarse se dirigió a la cocina donde encontró al pelirrojo haciendo el desayuno, llego justo detrás de el para abrazarlo por la cintura y poner su cabeza en el cuello de su amante.

Cuando sintió como el moreno e acomodo detrás de él, se sintió protegido, pero pudo sentir como al abrazarlo le trasmitía ¿amor?, después desayunar le dio un beso apasionado al moreno para empezar a caminar hacia la puerta, estaba a punto de irse cuando sintió como el moreno lo agarraba del brazo.

—No te vayas ¬

—¿Porque no habría de irme?

Cuando Jonghyun estuvo a punto de abrir la boca para decir algo, Key prosiguió.
—Escúchame, no te lo voy a negar, anoche fue grandioso pero…

—¿Pero qué?

—Pero soy libre, esto fue sexo sin sentimientos.

A Jonghyun eso le dolió mucho, pensar que para él fue mucho casi su todo y para el otro solo allá sido un calentón de una sola noche, ahora de seguro él se iría por esa puerta que en esos momentos tanto odiaba y no lo volvería a ver nunca más.

Al ver la mirada de tristeza que puso el moreno no lo dudó ni un segundo más y se acercó a el lentamente.

—Pero… aun puedes seguir llamando a las pizzas y decir que quieres un repartidor predilecto. —dijo el pelirrojo para después besarlo como si fuera la última vez que lo vería

El beso continuo fogosamente pero la falta de oxígeno y el racionalismo los hizo volver a la realidad, sino paraban ay no saldrían de ahí hasta mañana. Con un último beso el pelirrojo salió del departamento

Al moreno esa idea no se le hizo tan descabellada, no negaría que se sintió mal por el comentario del pelirrojo, pero a la vez feliz porque lo volvería a ver cada vez que pidiera pizza… pensándolo bien ahora tendría que comprar a un perro que le gustaran las pizzas por que no estaba seguro de querer comer pizzas todas las noches, pero estaba seguro de algo... estaría más que dispuesto a cenar a un delicioso repartidor.

--------------------------------------------------- ¿FIN?---------------------------------------

aparto

aparto

aaaawww qu bonito te quedo
y con un lemon muy largo eso me encanto
la vdd se me hizo muy triste que key se fuera obviamente el tambien sintio amor por jonghyun
pero estuvo muy lindo todo romantico y bonito
aunque se me hizo extraño que pusieras a key de pelirojo aveces me confundia y me imaginaba a taemin
pero eso no inporta estuvo muy hermoso
ME ENCANTO
(quien no va a kerer pedir pizza si va llegar ese repartidor)

Hey!! es interesante ver como el que se enamora es Jong,
y maldito Key como que "sexo sin sentimientos", por unos momentos odie
mi hermoso Diva, aunque despues di con la razón.
Esta muy bueno, un lemmon bastante largo!!
me encanto!!

waaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa *-* si hay algo que me encanta despues del ontae es el jongkey!

dios psicologos chicos malos modelos repartidor de pizza dasdasda!!!!! desde ya amo todas esas cosas XD!!!!!!

pero estaba seguro de algo... estaría más que dispuesto a cenar a un delicioso repartidor.

jaja ame esa frase fue tan pv, tu os, lo ame xDD

APARTO
Edito llegando a mi casa (:

Dios!!!
lo amé! xD ahahahaha

de verdad siento no escribir mas pero es qu no es mi

lap!

Pero realmente lo amé!