Página 1 de 1. • Comparte
*~Colorful~*
Colorful
*Tómenlo como mi "comeback"*
Para: FuerzaFriki
- click aquí:
-----------------------------------
Disclaimer: La historia a continuación es totalmente ficticia, no refleja en ninguna manera el carácter de las personas, las marcas y los lugares aquí señalados; así como tampoco recibo ningún beneficio económico por la mención de los mismos.
-----------------------------------
Las nubes brillaban bajo el ardiente sol, pronto la primavera iba a concluir y el verano daría la bienvenida con su cálida esencia.
—Creo que el verano es muy bonito— exclamó el joven Arcoíris; conocido en varias culturas con diferentes nombres pero, para los seres de la naturaleza que habitaban en el Cosmos, él era el pequeño Taemin.
—¿Ah, sí?, ¿Por qué lo piensas?— indagó Krystal, uno de los personajes más negativos y pesimistas: la guardiana de las Catástrofes Naturales.
—Porque el clima cálido siempre es sinónimo de paz— sonrió ampliamente.
—Pero, ¿qué no ves lo que conlleva?
Taemin, de piel casi tan clara como la nieve, cabello rojizo como el fuego y ojos cafés tal cuales avellanas, la miró algo confundido.
La Catástrofe explicó, —el verano es la estación que posee menos lluvias, eso quiere decir que ya no saldrás a jugar y que morirás de aburrimiento.
La sonrisa del muchacho se fue borrando, ¡claro!, olvidaba que Krystal siempre lo hacía ver un panorama muy, demasiado, realista.
—Menos lluvias no es lo mismo que ninguna; sí saldrás a jugar pero lo harás con menos frecuencia—, una muchacha de larga cabellera oscura y amistosa mirada apareció por las puertas del Cosmos.
—¡Luna!— el pelirrojo la saludó y volvió a sonreír.
La recién llegada miró a su hermana y negó con la cabeza, —Krystal, no lo asustes.
—Yo sólo le hago ver las dos caras de la moneda— se encogió de hombros como si lo que dijera fuese lo más obvio y normal.
—Eish— bufó por lo bajo, luego miró al chico, —no le hagas caso Taemin, mejor acompáñame, ¡Victoria esta por recoger unas flores hermosas!—, y no espero respuesta, sólo tomó al pelirrojo de la muñeca y lo arrastró con ella hasta el jardín del Edén.
Victoria era aquella que se encargaba de preservar las flores, y puesto que habría un cambio de estación en la Tierra, debía tener más cuidado con algunas, ya que sería tiempo de recoger y guardar otras.
—Los girasoles me gustan, pero no tanto como los claveles; los claveles son mis favoritos— escucharon las palabras de la muchacha cuando entraron al Edén.
—Yo creo que todas son hermosas— contestó una voz grave, una voz inconfundible para Taemin.
—¡Minho!— exclamó el jovial Arcoíris al notar la presencia del Rayo de Sol, aquél personaje alto, de piel morena y oscura mirada, que siempre estaba a su lado cuando visitaba la Tierra tras algún monzón.
—¿Taeminnie?— exclamó al instante, cuando lo vio una enorme sonrisa se dibujó en sus labios; —¿cómo estás?—, lo recibió con un cálido abrazo.
—¿Que cómo está?— repitió Victoria, cuya cabellera rubia ondeaba con la suave brisa, —pero si se acaban de encontrar hace poco—, lo dijo porque hacía un par de días que Heechul, el encargado de las Lluvias, dejó caer un chubasco sobre un gran bosque. Victoria había estado allí cuidando sus hermosas flores y presenció la aparición del Arcoíris, quien se le la pasó brincando y jugando antela mirada risueña del Rayo de Sol.
—Tan sólo unas horas estando separados es demasiado— argumentó Luna, —ellos fueron creados para estar juntos— bromeó al ver la cálida escena, donde Minho revolvía cariñosamente los rojos cabellos del más joven.
Y aunque Luna no lo hubiera dicho, varios personajes habitantes del Cosmos, Edén y Tierra podían notar la gran empatía que había surgido entre ellos dos.
***Nota: Este era un Shot, pero se alargó, así que lo subiré por fragmentos.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
Primer post y ni es para mi el Fic haha Perdón Dolores :cc
Me parece muy interesante, tu imaginación es muy grande y ahora con eso de los cosmos, tierra, arcoiris, tierra, etc. Creo que será muy divertido y bonito, con eso de que Minho disfruta tanto la presencia de Tae.
Por cierto, en la parte que decía; "de piel morena", no pude evitar acordarme la cancioncita de Thalia y la cante en mi mente hehehe
Bueno, ese fue mi comentario todo random, espero el próximo sea un poco más largo :3
PD: Felicidades por tu comeback!
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
- «------»
Los días transcurrieron, y como debía suceder, la primavera llegó a su fin; Victoria, que antes había estado en la Tierra, ahora iniciaría poco a poco su mudanza al Edén, donde permanecería durante el otoño y el invierno, luego, en primavera, nuevamente volvería a la Tierra; ése era un ciclo más que conocido para todos.
—Los hombres son seres muy interesantes— declaró Luna en una de sus visitas al Cosmos, —parece ser que han notado lo que ocurre— declaró.
—¿Qué ocurre?— indagó Taemin, él nunca había podido salir de noche; por su naturaleza solamente podía baja a jugar de vez en cuando, básicamente dependía de Heechul y de Minho para ello.
—Ocurre que Kibum y yo nos hemos hecho amigos y es algo obvio cuando conversamos, él a veces es muy divertido pero también da muy acertados consejos—; Kibum era el protagonista de los mares y océanos, por ello su interacción con Luna repercutía en el movimiento, ascenso y descenso de las mareas.
—He escuchado de él, dicen que es bastante equilibrado, me gustaría conocerlo— sonrió el pelirrojo.
—Cuando bajes a la Tierra podrías visitarlo, se llevarán de maravilla, te lo puedo asegurar— declaró la muchacha.
Pronto el ambiente en la Tierra se fue tornando más seco, puesto que las primeras semanas del verano acontecían, Minho tenía el deber de recorrer las aldeas humanas, bosques y cada rincón del área; el verano era la época más atareada para él. De repente, un día, Heechul decidió llamarlo.
—Rayo de sol, he solicitado tu presencia para advertirte— exclamó con palabras propias.
—Te he dicho que no son necesarias tantas formalidades, suficiente con que me llames por mi nombre de pila— explicó Minho.
—Jamás hay que perder la clase— sonrió, —pero ese no es el asunto, sino que pronto bajaré a la Tierra, el ambiente está algo seco y Victoria ha dicho que sus bellas flores me necesitan, he de saciar su sed.
—Muchas gracias por el aviso, pero yo debo visitar a Shindong, las parcelas necesitan un poco de sol, ahora es cuando deben producir más, los humanos lo necesitarán ya que es sabido que en las épocas de otoño e invierno pocos plantíos sobreviven— explicó. Shindong era la entidad protectora de las plantas y arbustos pequeños, en especial de las que la humanidad consideraba comestibles, él era muy apacible y sereno.
—Claro, los humanos— levantó suavemente una ceja, —aquella raza en evolución; a veces me parecen demasiado frágiles y dependientes.
—Al igual que Luna y Kibum, yo también los he observado, y coincidimos en que progresan bastante rápido, son increíbles.
Heechul sonrió, —ustedes los jóvenes se asombran con cosas simples— cuando dijo "los jóvenes" se refirió a la Luna, el Mar y el Rayo de Sol; —pero en fin, sólo deseaba informarte sobre el próximo monzón, no vayas a olvidar visitar a las flores también, ¿de acuerdo?
El más joven asintió.
Al no tener donde acudir, Taemin se quedaba en el Cosmos, donde nunca había oscuridad y el ambiente era pacífico, demasiado pacífico a veces, ya que su personalidad era traviesa y vivaz, por no decir inquieta. Se recostó sobre una suave nube y apoyó la nuca en sus manos entrelazadas. Si él tuviera la habilidad iría todos los días a la Tierra a jugar y brincar por allí, le gustaban los bosques mediterráneos, adoraba las montañas, podría decirse que eran sus favoritas. Recordó una vez que se dedicó a brincar entre ellas mientras se escondía de Minho para jugarle una broma; sí, definitivamente había sido entretenido.
Exhaló aburrido, ¿qué haría sólo en el Cosmos? Krystal usualmente andaba en ese lugar, ya que contadas veces bajaba a la Tierra, pero se la pasaba durmiendo y no era buena idea despertarla. —¡Ya sé!— se dijo a sí mismo, iría al Edén, el lugar más parecido a la Tierra, tenía muchas flores y plantas, pero no montañas, tenía ríos tranquilos e infinitos, pero no lagos ni mares; demasiado tranquilo pero suponía que era mejor que quedarse recostado en la nube.
Se incorporó y se dirigió al Edén, cruzó las puertas y se adentró. Caminó por las extensas planicies y observó las flores, Victoria tenía razón, los claveles eran bonitos, pero también lo eran las orquídeas, aunque para él los girasoles eran los más hermosos, el color le parecía muy bello. Tras mirar tantas flores se preguntó: ¿cómo le hacía Victoria para aprenderse tantos nombres?
—Wow— musitó Minho, los humanos eran realmente interesantes para él. Tras visitar las áreas donde Shindong residía, el Rayo de Sol no pudo evitar detenerse a observar a una de las creaciones del Gran Inventor de todo.
Estaba fascinado con su naturaleza, sin duda poseían un gran corazón, eran humildes y solidarios, bastante ingeniosos; puesto que estaba ideando mecanismos para aprovechar las fuerzas de la naturaleza, como el flujo de los ríos y el viento. Sin duda, observarlos se estaba volviendo su pasatiempo. Hasta que recordó algo importante.
—¡Las flores de Victoria!— exclamó de repente, sacudió la cabeza, ¿cómo pudo haberlo pasado por alto?, hacía un par de lunas que Heechul le había pedido que no lo olvidara. Lo bueno que sólo estaba retrasado unas horas, sólo por ausentarse unos instantes a las plantas no les iba a pasar algo grave, ¿cierto?
—Oh, Minho; me alegra que llegaras— sonrió Victoria al verlo, —por un segundo pensé que te olvidaste de estas bellas flores.
Le devolvió el gesto facial, pero algo nervioso, —eso jamás, es solo que me entretuve un poco por allí, pero prometo que no volverá a suceder.
—Muchas gracias— dijo ella y ensanchó su sonrisa.
Las nubes poco a poco se fueron alejando, el cielo se despejó y gotas de agua fueron volviéndose más finas hasta convertirse en rocío para luego desaparecer, entonces Minho se dedicó a proveer a las flores de luz solar.
—Sería bonito que siempre fuera primavera— declaró Victoria, —así siempre habría flores.
—Eso sería una idea muy buena, y yo tampoco tendría por qué estar por tanto tiempo en el Cosmos, me la pasaría aquí— coincidió.
—Pero también es una idea muy egoísta— reflexionó la muchacha y se acercó a una hortensia para acariciarla, —es justo que Jonghyun y Jessica también tengan un tiempo aquí, en la Tierra—; el primero era el encargado del otoño y Jessica del invierno.
Minho desvió la mirada, era verdad, lo que había dicho había sonado bastante mezquino viniendo de un ente como él.
—Pero no te acongojes— le dijo Victoria, —comprendo tu pensamiento, estás entusiasmado por pasar tiempo aquí.
Tras asegurarse que sus flores hubieran recibido el agua y el sol necesario, Victoria regresó al Cosmos. El lugar estaba tranquilo, todos estaba ocupados con sus deberes, excepto Krystal, que de seguro se hallaba durmiendo; pero ¿y el joven Arcoíris?
—¿Taemin?— lo llamó, lo buscó por los pasillos del Cosmos pero no lo halló, hasta que se le ocurrió ir al Edén.
—Pequeño, con que aquí estabas— le dijo.
—Estaba algo aburrido, por eso vine, espero no haberte molestado— explicó mirando sus pies; era sabido que el Edén era el lugar favorito de Victoria.
—No no— negó, —para nada, es bueno tener visitas, ahora que el otoño está más próximo deberé quedarme aquí, algo de compañía no me caería mal.
—Gracias— sonrió y luego miró a su alrededor, —¿te puedo ayudar a cuidar de ellas?
—Oh sí, esa sería una magnífica idea. Lo que me recuerda que hace unos instantes las flores en la Tierra recibieron mis cuidados y lo necesario gracias a Heechul y Minho.
Al oír esos dos nombres, los ojos de Taemin brillaron. Cuando Heechul y Minho trabajaban juntos quería decir que pronto este último iría por el pelirrojo para ir a jugar. Porque siempre, después de la Lluvia, el Rayo de Sol traía al Arcoíris. Sin embargo, por primera vez eso no sucedió.
El joven Taemin esperó y esperó, pero Minho no llegó por él. Victoria insistió en todo momento que de seguro el Rayo de Sol tuvo una tarea inesperada, probablemente alguna otra entidad había solicitado su presencia, pero que no debía de tardar.
Lamentablemente el Arcoíris se cansó de esperar y sin planearlo cayó dormido aún con algo de esperanza.
Algunos de los fragmentos son cortos (como el primero) y otros un poco más largos... pero en general trataré de que el contenido sea sustancioso(?) y que las actus no demoren mucho.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
Holi, holi! debo decir que son muchos nombres hehehe pero aun así sigue siendo interesante, no había leido algo así en fanfics(?) y que penita por mi Taeminnie, el esperaba que Minho viniese por el y no fue así u-ú ya quiero que se junten ><'
Tambien es muy bonito que el rayo de sol y el arcoiris se llevn bonito <3
Espero el siguiente :3
Tambien es muy bonito que el rayo de sol y el arcoiris se llevn bonito <3
Espero el siguiente :3
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
«------»
Interesante, no encontraba otra palabra para describir al hombre. Era más que obvio que existía bondad en ellos, pero también maldad, una casi tan grande y poderosa como su parte buena. Por ser un ente del Cosmos él actuaba con raciocinio, o al menos eso pensaba, por ello Minho aún no entendía la lógica y la explicación para semejante comportamiento.
En una de tantas veces que acechaba a los humanos, vio a una mujer defender a una cría de humano ante la amenaza de un feroz felino. Ella, sabiendo que tenía las de perder, enfrentó al animal, y sólo gracias a que otros humanos llegaron a tiempo, aquella mujer y su cría se salvaron.
—Sin duda fue algo sorprendente— enfatizó al finalizar la explicación de los sucesos.
—He visto comportamientos similares— le dijo Krystal algo pensativa, —en una ocasión, durante un terremoto, algunos humanos fueron capaces de olvidar sus diferencias e hicieron lo posible por salvarse.
—¿A qué te refieres con algunos humanos?— frunció las cejas confundido.
—Pues que no todos son iguales; si lo fueran no serían interesantes.
—¿No son iguales?— ladeó el rostro mostrándose aún más confundido.
—No, no lo son. Es como si dijeras que todas las flores son iguales; para ti y para mi puede que luzcan muy parecidas, pero te apuesto que ante los ojos de Victoria cada flor es única. Lo mismo ocurre con los humanos, pensé que ya lo habías notado.
—La verdad es que no.
—Me parece que deberías prestar más atención— declaró Krystal.
—Tienes razón; aunque creo que el ejemplo de las flores no es válido, es obvio que son diferentes.
La Catástrofe rodó los ojos, —sólo fue un decir—; ella solía hablar de manera directa, sin rodeos, por ello el dar un ejemplo lo más acertado posible era algo que la tenía sin cuidado.
Minho soltó una fugaz risita, —no me imagino qué diría Victoria si te hubiera escuchado decir que las flores son iguales.
—Y hablando de la señorita primavera— musitó Krystal al ver a la nombrada cruzar el umbral de las enormes puertas del Cosmos.
—Minho— exclamó Victoria al llegar junto a ellos, —¿donde habías estado?
—¿Yo; pues donde más? En la Tierra por supuesto, es verano.
—No, no; eso ya lo sé. Me refiero a que ¿porqué tardaste tanto?
—¿Tardar?—, primero Krystal y ahora Victoria le confundía. No recordaba haber hecho algún compromiso con ella, sus flores habían recibido suficiente luz solar semanas atrás.
—Pensé que estarías de regreso pronto por Taemin.
Por Taemin. Esas dos palabras le hicieron darse cuenta de que, por andar mirando a los humanos, había abandonado al pequeño Arcoíris.
—¡Por el Creador; lo olvidé!— exclamó llevando ambas manos hacia su cabeza.
—Te estuvo esperando— explicó la guardiana de las flores.
—No debió— intervino la Catástrofe, —le dije que el verano no era la época idónea para salir a jugar.
—¡Krystal!— la reprendió Victoria; a pesar de ser hermanas, ambas eran bastante opuestas: una siempre sonriente y optimista, y la otra sobria y pesimista.
—¿Qué?— levantó los hombros, dando a entender que no se arrepentía por lo dicho, ya Luna le había llamado la atención antes y no había cambiado su parecer, Victoria no haría la diferencia.
—¿Dónde está?— Minho las interrumpió, ahora que lo pensaba no había visto a Taemin desde hacía varias lunas, y era extraño no verlo corriendo por el Cosmos.
—En el Edén— apenas Victoria pronunció esas palabras, el Rayo de Sol caminó directo hacia el jardín.
Sobre el suave césped, a la sombra de un hermoso roble, Taemin descansaba; su respiración era acompasada y serena, su cabello rojo contrastaba con la verde hierba.
—¿De verdad me esperó?— Minho arqueó las cejas al encontrar semejante escena.
La rubia asintió y agregó, —estaba algo triste, aunque trataba de distraerse con las flores al final se cansó y cayó dormido.
El moreno se acuclilló y acarició la suave mejilla del Arcoíris; —Taemin, aquí estoy— dijo más para sí mismo que para el pelirrojo, pero no contó con lo que ocurrió después.
Sus párpados temblaron y luego se abrieron para dejar ver el par de orbes cafés, —¿Minho?— sonrió, —viniste; Victoria me dijo que sí lo harías.
También sonrió, parecía que no lo había visto en años cuando en realidad habían pasado semanas; —sí, aquí estoy— repitió.
—¿Iremos a la Tierra?— preguntó emocionado, sentándose en un sólo movimiento e inconscientemente deshaciendo el contacto de la mano del alto.
—¿Ahora? Nn-no, no lo creo— y no era porque no quisiera llevarlo consigo.
—¿Por qué no?
—Porque la situación no es propicia— explicó; —será la próxima vez, lo prometo.
—Pero yo quiero ir— infló las mejillas, —aquí me aburro—; tras decir aquello, en seguida llevó ambas manos a sus labios para taparse la boca; Victoria estaba allí, de pie junto a ellos, y sin querer había dicho que su compañía no era entretenida.
La rubia rió, —no te preocupes Taemin— también se acuclilló y revolvió el rojizo cabello, —te comprendo, por tu naturaleza deberías estar jugando en alguna montaña, y no aquí cuidando las flores conmigo; aunque agradezco tu intención.
—Lo lamento, no quise decir eso— de disculpó.
—Pierde cuidado.
Victoria sonrió para transmitirle confianza y dejarle en claro que no había rencores; el Arcoíris ensanchó su sonrisa, aquella que hacía que sus ojos amenazaran con desaparecer. Minho inevitablemente copió el gesto, cuando estaba con Taemin siempre se contagiaba de su alegría.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
«------»
El ambiente se fue tornando cada vez más seco, como debía ser; entonces Heechul anunció su última visita de la temporada, no tendría otra razón para ir a la Tierra sino hasta después del otoño, cuando las primeras semanas del invierno llegasen.
Esta vez sería un chubasco ligero, pero sufriente para calmar la sed de las pocas flores que quedaban, Victoria ya había realizado toda su mudanza, ya que después de esa lluvia ella tampoco tendría por qué estar más en la Tierra.
—Veo que este año has previsto acertadamente, ya has removido todas las flores— la voz del Viento hizo sonreír a Victoria, quien admiraba las últimas plantas marchitas, puesto que su ciclo llegaba a su fin.
—Sólo fue una vez— giró para enfrentar a Amber, —¿acaso nunca dejarás de recordármelo?— trató de sonar indignada pero fue inútil, su sonrisa la delataba.
—Fue bastante gracioso, admítelo—, Amber, la encomendada del Viento, se recargó en un árbol; —verte correr de aquí para allá, apresurada por guardar tus flores, fue divertido. Incluso Sully lo disfrutó, y eso que ella no es de reír por las desgracias ajenas.
—Afortunadamente pude salvar las que debía; si no lo hubiera logrado no permitiría que te burlaras.
—Lo sé, y es un alivio, en verdad disfruto reírme de ti.
—A veces no sé que me impacienta más; si tus bromas o el pesimismo de Krystal— hizo la comparación.
—Al menos conmigo te diviertes, en cambio el estoico rostro de nuestra querida hermanita no es para nada agradable.
Por la forma en la cual se llevaban, pocos creerían que eran hermanas: Victoria, Amber, Luna, Krystal y Sulli, esta última la encargada de velar por las aves.
Victoria iba a decir algo más, pero una gota de agua fría cayó sobre su mejilla, así que decidió despedirse de una vez, —fue entretenido charlar contigo.
—¿Ves como sí tengo razón?
—Ya, ya— rió, —lo admito, pero creo que llegó la hora de marcharme, regresaré después del invierno. Saluda a Jonghyun y Jessica por mi— le pidió.
—Por supuesto— exclamó, luego agregó una pregunta, —y tú, ¿irás al Cosmos?
—Aún no, primero iré al Edén, ¿necesitas que lleve algún mensaje?
—Si; dale mis saludos a Taemin, y dile que por favor a nuestra agradable hermana que no olvide que debe visitar las costas del mediterráneo al inicio del invierno.
La rubia cabeceó de manera afirmativa y luego se marchó; su tiempo en la Tierra había finalizado, para cuando Heechul llegara ella ya no debería estar allí.
Gracias a Victoria ahora ya sabía más sobre las flores, ya entendía por qué debía mudarlas al Edén antes del otoño y muchas otras cosas más. Pero eso no le quitaba lo aburrido, estaba tan deseoso por ir a jugar, lo necesitaba tanto que incluso su cuerpo lo había externado.
—¡Taemin, adivina a quien vi hoy!— exclamó jubilosa Victoria al entrar al Edén, sabía que el Arcoíris congeniaba muy bien con Amber y tener noticias de ella y sus saludos lo alegraría, ya que días anteriores lo había notado algo melancólico.
—Me encontré con Amber— se contestó ella misma, —te manda muchos salu... ¡Taemin!— se interrumpió y se acercó de inmediato al pelirrojo; hace apenas unas horas que lo había visto y juraba que no estaba así de mal: su cabello ahora carecía de brillo, su piel estaba más pálida y sus labios muy resecos; —¿qué te sucedió?
—¿Qué me sucedió de qué?— la miró, entonces la rubia notó unos círculos oscuros que enmarcaban los ojos del pequeño.
—Creo que debes ir a descansar— dijo ella tendiéndole la diestra, —ven, te acompañaré al Cosmos— en ese lugar estaban las nubes más cómodas, por eso Krystal jamás quería salir de allí.
Pero al darle la mano, Taemin la sostuvo sólo por unos instantes al incorporarse, los segundos que se mantuvo de pie, y luego se desplomó sobre el césped.
—¡Taemin!— gritó la rubia asustada; —¿qué te sucede?— repitió, aunque nadie podría responderle. Con cuidado lo viró para examinarlo, aunque no tuviera idea de lo que buscaba; sólo lo dejó boca arriba, en una posición más cómoda y fue a buscar a alguien que pudiera ayudarle. Y para su desgracia, o fortuna, a la única que encontró fue a la más pesimista que conocía.
—Vamos Krystal, no me digas que no pudiste predecir esto— dijo Victoria tras explicarle lo sucedido, ahora estaban frente al cuerpo de Taemin.
—Yo sólo me encargo de las catástrofes en la Tierra, nunca se me hubiera ocurrido semejant...
—Bien, entonces olvidemos eso, mejor busquemos una solución... aunque no sepamos lo que le ocurre— la interrumpió Victoria, pero en realidad Krystal no había detenido sus palabras a causa de la rubia, sino porque sus propias palabras le llegaron a la cabeza:
El verano es la estación que posee menos lluvias, eso quiere decir que ya no saldrás a jugar y que morirás de aburrimiento.
—Está muriendo de aburrimiento— dijo Kystal a manera de explicación.
—¿Cómo dices?— abrió los ojos en demasía, sorprendida, o tal vez esperando haber escuchado mal.
La Catástrofe suspiró y dijo lo que le parecía racional, —es como si de repente ya no hubiera más agua, tus flores morirían; supongo que algo así le ocurre a Taemin.
—¿Y él qué necesita?
—Yo que sé— se encogió de hombros, —recuerda que soy sobria y pesimista; digamos que el aburrimiento es mi elemento—, la rubia lo pensó, eso sería algo lógico, ya que la mayor parte del tiempo Krystal se la pasaba durmiendo.
—¿Y qué hacemos?
—Ya te dije que no lo sé— repitió la Catástrofe.
Victoria se frotó el rostro tratando de tranquilizarse y pensar, si estaba muriendo de aburrimiento entonces necesitaba lo contrario, ¿no?
«------»
Cada vez los humanos se mostraban más hábiles, o tal vez siempre lo habían sido sólo que Minho no lo había notado. Estaba impresionado por la solidaridad que estos mostraban que cuando presenció un asesinato no lo pudo creer. Su cabeza comenzó a trabajar a toda prisa tratando de explicarse el por qué de semejante acto. Pronto notó que cosas como la avaricia, envidia y el egoísmo eran los causantes de los daños; y no sólo de forma directa, sino también de manera inconsciente.
Continuó recorriendo el terreno, observando y dejando escapar de vez en cuando algunos ligeros "wow" de sus labios; hasta que, sin planearlo, se encontró con Shindong.
—Vaya hora de llegar— frunció el ceño, era un sujeto corpulento e imponente.
—¿Eh?
—Hace horas que Heechul se marchó, pensé que ya no vendrías— explicó sin borrar su gesto severo; él era un ente que evocaba a la serenidad, por lo que verlo un poco molesto era algo extraño y de cuidado.
—¿Heechul? Pp-pero ¿qué hacía él aquí?
—Minho, estás bromeando, ¿verdad?— Shindong se aproximó a él y lo observó minuciosamente.
—Claro que no.
—¿Cómo que no?, ¡no me digas que lo olvidaste!— manoteó dramatizando su exasperación y sorpresa, —¡pero si hace tres lunas anunció su última estadía en la Tierra! Ya visitó a Kyuhyun en los Alpes, a Victoria con sus flores, a Siwon en la selva, incluso a Eunhyuk en la sabana— enumeró, —esta vez yo fui el último en la lista.
"El último", eso quería decir que había dejado a los demás esperando; ya que él debía hacer su entrada justo minutos después de que Heechul se marchara.
—Yo no sab...
—Es obvio que no lo sabías; en lugar de estar acechando a los humanos deberías estar atento a tus deberes. Ahora haz tu trabajo— sentenció, —que esas berenjenas necesitan algo de sol.
—No puede bajar a la Tierra así como así— dijo Luna, quien había llegado, como siempre, inesperadamente de vista al Cosmos; —sólo lo hace en condiciones especiales— terminó de explicar.
—Entonces debemos decirle a Heechul, él puede ayudarnos con un pequeño monzón, de esa manera el Arcoíris brillará— exclamó Victoria de manera optimista.
Luna negó con la cabeza, al estar más tiempo que la rubia en la Tierra sabía más sobre cómo eran las cosas, por ello explicó, —Taemin sólo aparece junto con Minho, en el momento en que Heechul se está retirando del lugar de los hechos.
—Entonces es Minho quien debe venir por él— no se daría por vencida, siempre buscaría el lado positivo o alguna salida.
Nuevamente, Luna cabeceó, —hay un ligero inconveniente, aunque Minho viniera, sería imposible para Taemin salir a jugar; Heechul se ha ido a descansar, volverá hasta la primera semana de invierno.
—¿Qué? Pp-pero... ¿cómo?, eso quiere decir que... ¿ya realizó su última visita a la Tierra?
Ahora Luna afirmó con la cabeza, —así es, ya visitó, los Alpes, sabanas y demás ecosistemas.
—¿Ya; todos?
—Todos y cada uno. De hecho tú fuiste la penúltima a quien visitó— confirmó la morena.
—¿Entonces por qué Minho no vino por Taemin? Habría salido a jugar muchas veces.
—Esa es una buena pregunta— Luna se quedó pensativa; —eso habría que cuestionárselo al mismo Rayo de Sol— y como si lo hubiera invocado, una alta silueta apareció por el umbral de puerta.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
«------»
Había regresado al Cosmos con la intención de descansar un poco. Después del casi regaño de Shindong había recorrido de manera inmediata, y sin detenerse, todos los ecosistemas; dándoles el calor suficiente y luego continuando su recorrido. Pero no contó con encontrarse ante semejante situación: las palabras de Shindong habían sido nada comprado con la reprimenda de Victoria y Luna juntas, y eso no era lo peor, sino lo que había ocasionado. Además de que había faltado a su palabra dos veces.
La primera, cuando visitó a las flores de Victoria con algo de retraso y esta le dijo que pensó que lo había olvidado, él contestó: "Eso jamás, es solo que me entretuve un poco por allí, pero prometo que no volverá a suceder"
La segunda, cuando Taemin le pidió que lo llevase a la Tierra; él había dicho que no, y cuando fue cuestionado sobre el por qué, contestó: "Porque la situación no es propicia; será la próxima vez, lo prometo"
Ahora a causa de ello, de su falta compromiso y a sus promesas, Taemin estaba muriendo.
—Tranquilos— habló Luna al ver la expresión consternada del Rayo de Sol, —le preguntaré a Kibum, puede que él sepa qué hacer— declaró y se marchó.
—¿Cómo pude ser tan egoísta?— exclamó Minho al ver el cuerpo de Taemin inerte, sobre una suave nube. Lo había tomado entre sus brazos para llevarlo hasta el Cosmos, pensando que sería lo mejor; el césped no se veía muy cómodo.
—¿Qué has dicho?
—Me entusiasme tanto con los humanos que olvidé mis responsabilidades.
Victoria recordó aquella charla, donde Minho decía que le gustaría permanecer en la Tierra.
—Supongo que tienes razón— la voz de la Catástrofe se escuchó haciéndolos mirar hacia la puerta de la habitación; —olvidaste tus deberes y eso trajo una consecuencia; lo mejor hubiera sido que sólo te afectara a ti a manera de castigo, pero ¿quién iba a saber que perjudicarías a otros?
—¡Krystal!— le reprendió Victoria al notar que Minho bajó la mirada avergonzado.
—¿Qué? Yo solo digo la verdad. Es como si yo, olvidara lo que conllevan mis actos y en un ataque de ira bajara a la Tierra y...
—Si, ya entendimos— interrumpió la rubia, —es sólo que no tienes tacto.
—¿Tacto? ¡Ah, te refieres al disimulo!— sonrió, —¿para qué disfrazar la verdad? Minho cometió una falta y hubo una consecuencia; eso es más que claro.
—Krystal, por favor— dijo Victoria con los dientes apretados, señalándole a Minho con un movimiento de cabeza; al alto estaba encorvado.
—¡Eish— la nombrada rodó los ojos; —está bien, sólo diré una cosa más; espero que resuelvan esto, ya que cada vez que voy a la Tierra es Taemin quien clausura el evento, yo también lo necesito— giró sobre sus talones disponiéndose a salir de allí. Entonces Victoria recordó el mensaje del Viento.
—Por cierto— habló, —Amber me pidió que te recordara la visita a las costas del mediterráneo al inicio del invier...
—Sí, gracias hermana— la interrumpió, —no lo olvidaré. Sería imposible pasar por alto mis deberes— soltó una risotada carente de alegría. A diferencia del humor de Amber, el de Krystal era desconsiderado.
—Minho, no le hagas caso— cuando se hubo marchado, Victoria regresó su mirada hacia el moreno,—sabes que de mis cuatro hermanas ella es la...
—Ella tiene razón. Soy el culpable.
La rubia no sabía qué decir, era claro que él lo había ocasionado pero la palabra "culpa" era demasiado fuerte.
—Entonces hazte responsable— Luna entró al recinto, su rostro se veía relajado, eso quería decir que muy probablemente había podido resolver algo con el tal Kibum.
—¿Cómo?— inquirió Minho.
—Cuando le expliqué la situación, Kibum dijo que no sabía que un ente del Cosmos pudiera morir.
Al escuchar la última palabra un nudo se instaló en el pecho de Minho, morir era una palabra hosca.
—Pero que el Tiempo podría esclarecer nuestras dudas— continuó la morena.
—¿Yunho?— exclamó Victoria, —¿él sabe?
—Yo también me sorprendí, pero luego analicé las cosas y tiene lógica; él es el más antiguo de todos nosotros, estuvo junto al Gran Inventor cuando creó todo, supongo que debe tener conocimiento.
Ambos asintieron con la cabeza antes de que Minho preguntara; —¿y dónde puedo encontrar al Tiempo?—; pocas veces lo había visto, y no era porque lo buscaran, sino porque se aparecía cuando deseaba.
—Eso también se lo pregunté a Kibum, y dijo que la última vez supo que estaba residiendo con Changmin, en los volcanes del occidente; pero que si su recorrido era el mismo de siempre y que si sus cálculos no fallaban, Yunho debería estar ahora en el polo norte, visitando a Jessica.
«------»
Viajó hasta el Polo Norte de manera inmediata, con la intención de encontrarse con Yunho. Le solicitaría su ayuda para poder remediar lo que había causado. Con lo que no contaba era con la reprimenda que recibiría primero y el cuestionamiento.
—Y yo que pensé que Heechul sería el primero en olvidar sus responsabilidades— exclamó el Tiempo con ese tono de voz inquisidor que a muchos hacía temblar, no por nada Taemin había dicho una vez que Yunho le daba miedo.
—Estoy arrepentido, créeme, lo lamento.
—Con lamentarlo no resolverás nada— respondió el Tiempo; ambos se hallaban en lo que parecía una pequeña habitación subterránea, ubicada bajo gruesas capas de nieve, esa era la residencia de Jessica, que aguardaba allí la mayor parte del año hasta que llegara el turno del invierno.
—Eso lo sé, por eso vine a solicitar tu ayuda— bajó la cabeza.
—¿Ayuda?— levantó una ceja, —eres tu quien debe remediarlo.
—Lo haría si pudiera, el problema es que no sé cómo.
Yunho no borró su semblante hosco, no es que fuera malo, en realidad era todo lo contrario, pero debía permanecer así, sino ¿quién pondría orden?, alguien debía hacer el papel de padre, ¿no?
Exhaló tras unos segundos que le parecieron a Minho eternos y luego explicó de manera general, —Taemin debe estar en su ambiente, como sabes cada ser tiene su naturaleza y una tolerancia a los demás, la tuya por ejemplo es el calor pero soportas cierto tiempo aquí— se refirió al frío, —la naturaleza el Arcoíris es diferente a todos los demás; él posee todas y ninguna a la vez.
—¿Todas y ninguna?— preguntó confundido; tal vez estaba pensando que sería como llevarle un poco de agua, pero al parecer las últimas palabras del Tiempo lo desconcertaron.
—Además de gustarle salir a jugar, Taemin es alegre, apasionado, de personalidad fresca, enérgico, puro, sereno y dulce.
Minho contó los adjetivos mentalmente y los memorizó de inmediato.
—Debes hallar los objetos que representen todo eso y llevárselos; sólo de esa manera despertará, podrá salir a jugar y divertirse, y no morirá de aburrimiento.
—¿Y cómo encuentro todo eso?
—Como dije antes, eres tú quien debe remediarlo— y sin decir más, Yunho giró sobre sus talones y se adentró por un oscuro pasillo de la cueva.
Apretó los puños, no sentía que su información le ayudara demasiado; por primera vez percibía un sentimiento que desconocía, ya había escuchado antes de él pero no lo había experimentado: frustración.
—¿Minho?— la voz del Invierno retumbó en la cámara de piedra, —¿estás bien?
—Jessica— la miró y trató de esbozar una sonrisa, —lamento la inoportuna visita— se disculpó porque no había intercambiado palabras con ella, sólo había llegado y buscado a Yunho.
—No te preocupes— negó con la cabeza, —sé que es algo importante; no pude evitar escucharlos— bajó la mirada apenada por haber oído una plática ajena, pero esperaba que lo que estaba a punto de decir pudiera ayudarlo, así que se arriesgó y continuó, —y creo saber donde puedes buscar lo que necesitas.
Abrió sus grandes ojos oscuros en demasía, —¿de verdad?— cuestionó.
La muchacha de piel blanca y suaves rulos amarillos que caían en forma de cascada sobre su espalda le explicó, —todas las cualidades que mencionó Yunho pertenecen a varios seres del Cosmos, si hubiera dicho que una de las características del Arcoíris era el pesimismo entonces Krystal podría ayudarte directamente, o si hubiera mencionado la indiferencia yo podría intervenir con un poco de frío como su equivalente; pero también hay que tener en cuenta que Taemin es diferente porque su naturaleza son los colores.
Minho escuchaba atentamente las palabras de Jessica tratando de entender y armar la frase más coherente a la situación, pensando que tal vez eso quiso decir Yunho con "todos y ninguno a la vez"; —¿entonces debo buscar colores?— por fin habló.
—Supongo que sí; pero la experta en colores es Victoria, con sus cientos de flores tal vez pueda darte una solución.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
[color=black]El último fragmento de esta noche...
- click aquí:
«------»
De regreso en el Cosmos, Minho se dirigió directo a la habitación donde había dejado a Taemin, y en efecto, no solo Luna se encontraba acompañando al pelirrojo.
—¿Pudiste resolver algo?— indagó Victoria. Minho asintió y se dispuso a hablarles sobre lo que Yunho le había dicho y sobre la intervención de Jessica.
—Me parece algo tan lógico y obvio que no puedo creer que no se nos ocurriera antes— declaró Luna cuando el relato del alto hubo terminado.
—No, no es tan sencillo— objetó Victoria; —tiene razón en cuanto a los colores, cada uno tiene un significado, pero al mencionar la palabra "objetos" y "cualidades" quiere decir que sólo una cosa en específico los representa.
—¿Cuáles fueron las características que te dijo Yunho?— preguntó Luna.
—Alegre, apasionado, de personalidad fresca, enérgico, puro, sereno y dulce—, Minho recitó prácticamente de memoria.
—¡Siete, como sus colores!— exclamó la morena levantando los brazos en señal de emoción por su descubrimiento, pero luego los bajó un poco más seria, —¿pero dónde encontraremos la alegría?— musitó.
Tras unos segundos, Victoria chasqueó los dedos y sonrió ampliamente, —el amarillo simboliza la felicidad, alegría, optimismo y inteligencia; y ya sé qué podría representarlo— corrió de inmediato hacia el Edén y luego regresó con un gran girasol en la diestra; —una vez Taemin me dijo que estos eran sus favoritos, ahora sé porqué, el amarillo es uno de sus colores—. Colocó la enorme flor sobre la extensa nube, a una distancia prudente del cuerpo del pelirrojo, entonces los pétalos centellaron.
—¡Wow!— Luna dejó escapar un exclamación de sorpresa; —¡entonces eso es!; ahora hay que traer algo que simbolice la pasión, como una rosa roja.
Victoria negó con la cabeza, —no, eso no funcionará, el rojo representa la pasión, pero una rosa no es suficiente. El rojo es pasión, fuerza y acción.
Los tres se quedaron pensativos, hasta que como un rayo de luz una palabra surcó la mente de Minho, —el fuego.
—¡Claro, sí, por supuesto!— afirmó Victoria.
«------»
Los volcanes del occidente no estaba tan cerca, por lo que cuando arribó al pie de la montaña más alta se encontraba un poco exhausto.
Las puertas eran más altas de lo que recordaba y el rechino más estridente de lo que pudo soportar, así que con ambas manos tapó su orejas.
—¿Quién osa molestarme?— la voz rasposa del señor de los volcanes retumbó en la recámara.
Minho dudó por unos instantes, pero no debía retroceder, así que se adentró a la enorme habitación donde sólo existía una enorme cama.
—Oh, pero si es el Rayo de Sol— Changmin borró su ceño fruncido; —hace un par de lustros que no te veía ¿qué te trae por aquí?— bajó del colchón, su cabello estaba un poco revuelto pero eso no pareció importarle al recibir a su inesperada visita.
Minho se sentía algo incómodo, por mucho tiempo no había saludado al guardián de los Volcanes y ahora que lo veía era para pedirle un favor, pero tenía que tragarse su malestar y solicitar un poco de fuego, de lo contrario Taemin podría no salvarse.
—Hmm— Changmin acarició su barbilla, meditando las palabras del otro, —¿y qué te hace pensar que te daré un poco del fuego de la pasión así como así?— cuestionó.
—Yy-yo... — eso no lo había pensado, no creyó que los seres del Cosmos fueran a pedirle algo a cambio; y como si Changmin hubiese leído su mente le dijo.
—Te lo proporcionaré con una condición— sonrió, —que compitamos para ver quién es el más fuerte.
En segundos la enorme cama desapareció, o mejor dicho, se evaporó y dio lugar a un par de sillas y una mesa.
—Toma asiento— indicó Changmin.
Estando uno frente al otro, colocaron el codo derecho sobre la mesa, juntaron sus palmas y se dispusieron a ejercer fuerza. Ganaría quien lograra doblegar el brazo del contrario.
—Espera— interrumpió Minho; —¿cuántas veces haremos esto?
—Con una bastará, y déjame informarte que hasta ahora sólo Yunho ha podido vencerme, así que no creo que tengas oportunidad— declaró con una sonrisa.
Tragó saliva de manera pesada, de su esfuerzo dependía regresar con un poco de fuego. Aplicó toda la fuerza que tenía, pero al final fue inútil, miró con susto cómo su brazo era azotado y aplastado contra la mesa.
—¡Gané!— gritó Changmin eufórico y saltó de su silla.
Minho entonces experimentó algo extraño y que pocas veces había sentido, o al menos no tan fuerte como en ese momento: impotencia.
—Vamos Rayo de Sol, no seas mal perdedor; aunque te entiendo, cuando Yunho me venció no dejó de recordármelo a cada segundo. Así que toma, no quiero verte triste.
El moreno de ojos grandes levantó el rostro y se encontró con el brazo extendido de señor de los volcanes, le estaba ofreciendo un pequeño quinqué que contenía una flama, roja y brillante.
—Pero si yo pedí.
—Así es— afirmó Changmin, —mi condición era que compitiéramos para ver quién es el más fuerte, no era necesario que me ganaras para obtenerlo. Aunque admiro tu fiereza, pude ver el gran esfuerzo e ímpetu en tus ojos mientras hacías todo lo posible por ganarme.
—Gracias Changmin— sonrió y se puso de pie para tomar lo que le ofrecía.
—Por nada, espero que tu amigo se mejore.
Cuando regresó a la habitación, sólo Luna se hallaba al cuidado de Taemin.
—He traído el fuego— levantó la lámpara que traía en la diestra para luego colocarla sobre la nube. Maravillados, notaron cómo la flama brillaba aún más, incluso podría decirse que lanzaba pequeñas chispas que se perdían luego en el ambiente.
—¿Dónde está Victoria?— indagó el alto, ella era la experta en colores.
—Se ha ido al Edén, le hubiera gustado quedarse a cuidar de Taemin pero no puede dejar sus flores por mucho tiempo— iba a decir "no puede descuidar sus deberes" pero sería una certera pedrada hacia Minho. —¿Qué sigue en la lista de cualidades?— indagó, tal vez ella podría ayudar.
—Una personalidad fresca— declaró.
Luna se quedó pensativa, definitivamente ningún color le venía a la mente, pero lo de la personalidad fresca y tranquila si, había alguien que encajaba perfectamente con esa descripción, y si no era él directamente estaba segura de que podría ayudar a encontrar lo que buscaban.
—Minho— le dijo, —debes ir con la Tierra.
—¿Con la Tierra? Querrás decir a la Tierra.
—No no— manoteó, —no me refiero al lugar, sino al sujeto que vive entre las raíces, el amigo de Victoria.
—¿Jinki?
—Sí, él mismo.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
Eeeess "Colorful Time" ~ \o/
Sólo quienes han comentado lo pueden ver ^^!
Sólo quienes han comentado lo pueden ver ^^!
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
«------»
Ahora tenía la alegría del amarillo, la pasión del rojo, la frescura del verde y la energía del naranja; los cuatro objetos los colocó alrededor del cuerpo de Taemin y observó su brillo.
—Eso no es suficiente— declaró Victoria. El joven Arcoíris se notaba más pálido, —si no te das prisa comenzará a desaparecer—, desaparecer era el equivalente a morir para ellos.
—No digas eso— exclamó Luna, algo temerosa ante la idea de perder a un buen amigo; —yo sé que eso no sucederá.
Minho sólo escuchaba, había sido su culpa y estaba haciendo lo necesario para remediarlo y debía darse prisa; —Victoria— la llamó, —¿dónde podría encontrar algo que representara la pureza? — la palabra "puro" era el siguiente adjetivo en la lista que Yunho le había dado.
—Pureza— lo pensó unos instantes, —el azul es el adecuado, ese color representa no solo la pureza, sino también el equilibrio y raciocinio.
Equilibrio, una palabra que Taemin había usado para describir a alguien, Luna pudo recordarlo.
—Ocurre que Kibum y yo nos hemos hecho amigos y es algo obvio cuando conversamos, él es muy divertido pero también da muy acertados consejos
—He escuchado de él, dicen que es bastante equilibrado, me gustaría conocerlo.
—Cuando bajes a la Tierra podrías visitarlo, se llevarán de maravilla, te lo puedo asegurar.
—¡Kibum, el protagonista de los mares!— exclamó la pelinegra sorprendiendo a los otros dos por su repentino alboroto, —él podría darte algo que represente la pureza y el equilibrio.
Minho miró a Luna y luego a Victoria, esta última asintió con la cabeza respaldando la teoría de su joven hermana, entonces Minho se decidió a bajar a la Tierra en compañía de la pelinegra, ya que nunca antes la había visitado de noche.
«------»
Tuvo un poco de frío, en definitiva no estaba acostumbrado a estar en un lugar tan obscuro. Sólo podía ver el reflejo de la luz de la Luna en las crestas de las olas.
—No debe de tardar— explicó la pelinegra, —siempre nos reunimos aquí— ambos se hallaban en un acantilado.
—Si Taemin desaparece jamás me lo perdonaré— declaró de la nada. Antes no había hablado sobre cómo se sentía, todo se lo había guardado para él, y ahora que estaba a solas con Luna, con el sonido de la marea chocando contra las rocas, pensó que era hora de externar su sentir.
—Las cosas saldrán bien, ya lo verás— sonrió, —Taemin estará feliz de verte.
—Debí estar con él; sabía que estas épocas son en las que menos oportunidades tiene de bajar a la Tierra a jugar, y yo olvidé ir por él.
—No sólo lo olvidaste, sino que no sabías que tus actos podrían tener consecuencias así de peligrosas— una tercera voz se escuchó. Ambos giraron sobre sus talones para encontrarse con un muchacho casi de la misma complexión que Taemin, sólo que su cabello era oscuro dejando al descubierto sólo uno de sus ojos, el cual se notaba afilado e inquisidor.
—¡Kibum!— saludó Luna sonriente, —has llegado.
—Nunca faltaría a mi palabra— le devolvió el gesto, luego miró al más alto, —he notado que el joven Arcoíris no ha visitado la Tierra tras los últimos monzones, Luna vino hace un tiempo a preguntarme por la muerte de los seres del Cosmos, y dado que escuché por casualidad su reciente conversación puedo deducir porqué están aquí.
—Me sorprendes, siempre eres tan acertado— la chica lo alagó.
—Sólo fue cuestión de atar cabos— respondió y luego se dirigió al joven alto; —ha de ser muy importante como para que el Rayo de Sol se pasee por la noche.
—Lo es.
—Bien— meneó ligeramente la cabeza, —tengo lo que buscan, algo que representa la pureza, el equilibrio y que además proveerá al joven Arcoíris del color azul.
—¿Qué es?— Luna se adelantó a preguntar.
—Es una burbuja; pero antes Minho deberá responder una pregunta con la verdad— su mirada se tornó más juiciosa cuando observó al nombrado, luego soltó la cuestión, —¿qué harías si no lograras completar la recolección de los objetos?
—¿Eh?— eso en definitiva no lo había pensado, no lo había querido pensar, ni siquiera considerar.
—No, él lo logrará, estoy segu...
—Luna— la interrumpió el Mar, —deja que él hable, es su responsabilidad.
La chica bajó la cabeza, nunca podía refutarle a Kibum, él siempre tenía una buena razón para hacer lo que hacía.
—Yy-yo...
—¡Vamos, dilo! ¿Qué harías si el pequeño Arcoíris dejara de existir a causa de tu descuido?
—¡No lo sé!
Kibum lo miró por unos instantes, tal vez evaluando la respuesta torpe, sopesando la sinceridad de la misma; luego exhaló.
—Es tuya, te daré la burbuja porque sé que dices la verdad— extendió una mano al frente con la palma hacia arriba y luego un leve destello azulado brotó de ella, poco a poco una esfera se fue materializando; así como las burbujas de aire existían dentro del agua, esta era una burbuja de agua en el aire. Caminó un poco hasta quedar muy cerca del Rayo de Sol.
Minho extendió la mano y el otro depositó la esfera, esta flotaba a escasos centímetros de su piel; —gracias.
—No me lo agradezcas aún, mejor ve pensando en una mejor respuesta a mi pregunta.
«------»
Durante el camino de regreso ninguno de los dos habló. Luna sabía que Kibum hablaba siempre con raciocinio, por ende Minho había estado sumido en sus reflexiones, pero por más que buscaba una respuesta, como el Mar le sugirió, no podía; no podía porque simplemente no podía concebir el hecho de que Taemin desapareciera. Las visitas a los personajes anteriores habían sido como juego hasta cierto punto, pero esta última lo había dejado en verdad reflexionando. Ahora se tomaba el tiempo para evaluar todas las sensaciones que había experimentado; nunca les había prestado atención, ¿sería que los humanos vivían con sentimientos como esos? Una vez escuchó decir a Yunho que el Creador había elaborado a los humanos a su imagen y semejanza, entonces, ellos también lo eran, puesto que al ser entes del Cosmos estaban ligados el Creador también. Entonces los humanos no eran tan fascinantes, al parecer sólo estaba descubriendo en ellos lo que él mismo poseía.
—Minho— Victoria lo llamó regresándolo al presente, donde Taemin se hallaba postrado en una suave nube; —debes darte prisa, cada vez este niño luce peor—, la rubia dijo lo obvio: el cuerpo del Arcoíris ahora era casi traslúcido, como si en cualquier momento fuera a evaporarse.
—Serenidad, es el penúltimo adjetivo— dijo para que Victoria pueda ayudarle.
—Serenidad... veamos... el color que lo representa es el violeta, ese color evoca a la relajación y serenidad; mi amigo Shingdong es el indicado.
Minho tragó de manera pesada, la última vez que había intercambiado palabras con él había sido cuando olvidó pasearse por los lugares que Heechul había visitado.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
- click aquí:
«------»
Caminó precavidamente, sus pies acariciaban el pasto que pronto dejaría de ser de color verde, se podía notar ya que el contorno parecía marchitarse.
—Es extraño verte por aquí— exclamó Shindong cuando notó a Minho llegar. El ente protector de los vegetales se hallaba en una improvisada parcela, comiendo unos frutos rojos que habían dejado incluso sus mejillas manchadas; —ya que Heechul no me ha visitado—, Shindong se hallaba disfrutando de lo que las plantas le ofrecían puesto que una vez que Jonghyun y Amber pasaran por ese lugar se quedaría sin muchos de sus deliciosos manjares.
—Eh— desvió momentáneamente la mirada, al parecer todos estaban empeñados en recordarle su desgracia, tal vez algunos no de manera consciente, pero lo hacían; —yy-yo... no he venido por eso— explicó al aproximarse un poco más.
—¿Ah, no?— sacudió sus robustas manos para deshacerse del exceso de zumo que había escurrido de sus alimentos; —¿y entonces qué te trae por aquí?
—Estoy aquí porque necesito tu ayuda.
—¿Mi ayuda?— alzó una ceja confundido, —¿tienes hambre?— le dio la espalda, —porque aún hay sandías y algunas manzanas también.
—Oh, no no— negó incluso con las manos; —Victoria me ha dicho que tu puedes proporcionarme algo valioso para mí puesto que es tu naturaleza, necesito algo que represente la serenidad.
—¿Victoria dijo eso de mi?— al parecer todos los diálogos de Shindong iniciaban con una interrogante, —no creo que tenga algo como eso— rió un poco, —se me hace que se ha equivocado.
—Ella dijo que eras el indicado, que me podrías proporcionar el color que simboliza la serenidad.
Rascó su cabeza algo pensativo y musitó más para él mismo que para Minho, como si con eso se ayudara a recordar; —el color que simbolice la serenidad.
Remembró una de sus charlas con su querida amiga, una que tenía que ver con los colores del universo y la sensación que despertaban en ellos, Victoria tenía mucho de qué hablar, puesto que prácticamente vivía entre ellos. Se concentró un poco más, y entonces lo recordó, ¡sí, esa fruta tenía que ser!
—Minho, ya sé qué puede ser— dijo sonriente y se dirigió hacia el oeste del rústico huerto, —sígueme.
El alto obedeció, y entonces se sorprendió al encontrarse con conjunto de arbustos curiosos, sus frutos eran esferas pequeñas que colgaban en espesos racimos.
—La vid pertenece a la familia Vitaceae— habló de la planta, —cuando está en su punto exacto su fruto es muy dulce— bajó un racimo, —¿quieres probar?
Minho lo aceptó y desprendió una pequeña esfera para llevarla a sus labios. Ahogó un gruñido de satisfacción cuando el exquisito zumo tocó su lengua y bajó por su garganta; sin duda, cuando Taemin despertara lo llevaría a ese lugar, él adoraría ese fruto.
—¿Cómo se llama?— preguntó, debía saber su nombre, de seguro el joven Arcoíris querría saberlo.
—Uva— contestó.
«------»
Con el racimo de uvas en la diestra, Minho ingresó al Cosmos; rogaba por que funcionara, debía, no, tenía que funcionar, ya que había ido por todas las cosas que Yunho mencionó.
Cuando las puertas de la habitación se abrieron vio la espalda de Victoria, notó que temblaba, parecía tener espasmos.
—¿Qué suce...?— la tomó suavemente del hombro para girarla y verla de frente, pero la cuestión murió en sus labios cuando notó los ojos aguados de la rubia; entonces desvió la mirada a la nube, donde estaba el cuerpo de Taemin, o mejor dicho, donde pronto desaparecería, ya que ahora el pelirrojo se encontraba totalmente traslúcido, pronto no quedaría nada de él.
—Date prisa— la chica caminó hacia el joven Arcoíris y empezando a colocar en torno a él los objetos.
Un girasol amarillo, un quinqué con una llama roja, una esmeralda verde, una hoja otoñal color naranja, una mágica burbuja azul y una racimo de uvas violetas.
—La alegría del amarillo, la pasión del rojo, la frescura del verde, la energía del naranja, la pureza del agua y la serenidad y dulzura del violeta— enumeró al alto, —todo está listo— exclamó al depositar lo último en la suave nube.
Los objetos emitieron un resplandor, una luz de esperanza para Victoria y Minho, pero tras unos segundos estos de apagaron y Taemin se volvió más pálido.
—¡¿Qué? No puede ser!— el moreno frunció el ceño, haciendo una mueca anormal, se estaba aguantando las ganas de llorar; llorar por la frustración, la incertidumbre, pero sobre todo llorar por el miedo.
Luna, que había ingresado al recinto en silencio, pudo apreciar cómo el resplandor se esfumaba; se encogió de hombros sobresaltada por la exclamación del Rayo de Sol.
—Calma— Victoria le tocó el hombro; —sólo debemos pensar.
—Uno, dos, tres— Luna comenzó a contar en voz baja, —cuatro, cinco, seis...— calló por un par de segundos y luego soltó, —¡siete! El arcoíris tiene siete colores, aquí sólo hay seis.
Minho frotó su cara de manera descuidada, la pelinegra tenía razón, qué tonto fue al no darse cuenta de ese pequeño-gran detalle; no era excusa pero la desesperación lo estaba carcomiendo y no lo dejaba pensar con claridad.
Se acercó al cuerpo de su amigo y acarició sus cabellos, estos ahora eran más finos y delgados, era evidente que pronto desaparecía; eso le molestó, entristeció y mortificó. ¿Cómo era posible que sintiera esas tres cosas de manera simultánea?
—Rojo, naranja, amarillo— Victoria comenzó a recitarlos, —verde, azul, añil y violeta. ¡Falta el añil!— el añil, o índigo como algunos lo conocían, puso a trabajar las mentes de los tres al cien por ciento, tenían que recordar qué cosa tenía ese color.
—Las berenjenas— dijo Luna.
—No no no— Victoria se paseó algo nerviosa, —son demasiado oscuras; el añil está entre el azul y el violeta.
Sabía que aquellas dos se hallaban debatiendo sobre el color faltante, pero no pudo presentarles la debida atención ya que tras la tercera caricia, sus dedos ya no pudieron tocar los cabellos del joven; todo él parecía fugarse poco a poco.
Las palabras de Kibum resonaron en su cabeza, ¿qué haría?, ya lo sabía.
—Taemin, no me dejes, por favor— sonó más como un lloriqueo. Las hermanas callaron y miraron la escena: Minho sentado en la nube, acariciado lo que podía del joven Arcoíris, ya no reprimía las lágrimas.
—Seguirlo, a donde sea su destino— habló y tragó saliva, sin dejar de mirar el rostro pálido de Taemin, —la respuesta a la pregunta de Kibum es esa.
Luna contuvo la respiración, ella había estado cuando Minho fue cuestionado, así que en burdas palabras la respuesta era: morirse.
—Lo siento tanto, te fallé— sollozó antes de depositar un suave y casto beso sobre los fríos labios de Taemin, luego el pelirrojo desapareció.
Star...☆
Taemin & Bithae
1046
Re: *~Colorful~*
Esto va muy rápido, jejeje, apenas estaba poniendo el link en el índice de fan fics.
Muchas gracias por la dedicatoria, estoy emocionada, aunque mareada, no debería estar en la compu, pero shhh, es nuestro secreto.
Vuelvo pronto con mi verdadero comentario sobre la historia.
Muchas gracias por la dedicatoria, estoy emocionada, aunque mareada, no debería estar en la compu, pero shhh, es nuestro secreto.
Vuelvo pronto con mi verdadero comentario sobre la historia.
Re: *~Colorful~*
Estan genial tu fic y tan interesante que cuando empeze a leerlo me atrapo hay es tan tan tan...... No hay palabras para describirlo!
Figting!
Figting!
Kaede_Jongkey
Key
48
Temas similares
» [2MIN/Drabble] Colorful
» [Descarga/MV] SHINee - Colorful
» [TRAD/LETRA] Colorful / Colorido.
» [VIDEO/201213] SHINee @ Colorful MV
» [PROYECTO] 040414 Colorful SHINee World Concert
» [Descarga/MV] SHINee - Colorful
» [TRAD/LETRA] Colorful / Colorido.
» [VIDEO/201213] SHINee @ Colorful MV
» [PROYECTO] 040414 Colorful SHINee World Concert
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.