Cuando Choi MinHo fue seleccionado como trainer en SM estaba seguro de que las mujeres eran para él, aunque siempre había tenido una personalidad callada eso no quería decir que no pudiera observar como sus noonas usaban faldas cortas y les gustaba (aunque con mucho respeto) mostrarles a sus hyungs cuan importantes eran para ellas.

Muchas veces se dio cuenta de que era uno de los principales espectadores cuando sus noonas daban chocolates en febrero, como se veían tan nerviosas y como a veces eran rechazadas; habían pasado solo unos años de eso y ahora él era el nervioso, seguía teniendo la afición de ver a las personas, por estudiarlas y aprender de ellas, sin embargo había notado que últimamente solo quería aprender de una; no era precisamente su noona, era su "diva", era su amigo, su consuelo y hoy esperaba que se convirtiera en algo más.

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Celos…
Una palabra tan conocida y a la vez tan nueva para Minho
Celos
Eran los que había sentido cuando su “diva” abrazaba a Jong, lo que sintió cuando las fans gritaban Jongkey a todo pulmón; pero él no podía hacer nada, ellas no sabían, en realidad ni Jong sabia, cuando su diva respondió a su nota acordaron que nadie lo sabría; y ahora se arrepentía, porque sentía como algunos de sus órganos se tensionaban y dolian al ver al Jongkey tan cerca.

Conto cerca de 10000 hasta el 10 y espero a que diera resultado, se calmo un poco y cuando llegaron a su departamento disimuladamente tomo a KiBum de la mano para llevarlo a su cuarto, en cuanto cerró la puerta tomo los labios que eran suyos y espero a que su pareja hiciera lo mismo, cuando se separaron su diva murmuro algo así como “tonto” y Minho pidió una explicación con la mirada.
-Celos ah?- y diciendo dejo un tierno beso su boca
– no deberías tenerlos soy solo tuyo- ahora el chico mas alto sonreía.

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Había pasado casi un año de su debut, casi la misma cantidad de tiempo de su reality y un mes desde que MinHo había dejado una nota en la cama de su “diva”, un mes desde que su “diva” le había respondido que quería estar con el por siempre y sin embargo hoy sentía la misma cantidad de adrenalina recorrerle el cuerpo.

Podía sentir a su hyung entre sus brazos mientras veían las estrellas desde Namsan, podía escuchar como Key soltaba pequeñas risitas, mientras MinHo respiraba muy cerca de su oído, eso hacía que MinHo no quisiera soltarlo nunca, pero lo que lo llenaba de alegría era el pequeño candado grabado que su Hyung le había regalado por tener un mes juntos.