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Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Ya la última etapa de este concurso, muchas gracias a todas las personas que participaron en estas actividades de febrero como Concurso historias SHINee Valentín 2.0 igual en la otra actividad de Envía un SHINee Cupido mensaje 3.0
Ahora bien, anteriormente ya habíamos mencionado lo que se calificaría en un tema especial, de cada historia mas aparte las características que se les había pedido, aquí lo vuelvo a agregar:
❥ Sobre las historias los criterios a calificar serán:
Originalidad
Coherencia
Redacción
Acorde al tema (San Valentín)
Desarrollo de los personajes (paradigma)
Y de que seria con Jueces quienes las calificarían:
De entre los jueces serán:
Juez 1 y 2: involucrados en el foro
Juez 3: con conocimientos acerca de SHINee, no es parte de SMF.
Juez 4: (El más importante) totalmente ajeno no sólo a SHINee, sino también al KPOP y sobre todo con mayores conocimientos en el tema.
Después de leer y analizar todos las historias, los jueces dieron sus puntos de vista para escoger al ganador.
Esta vez a diferencia del año pasado solo será un ganador del concurso y NO tres.
Aquí les presento al ganador del concurso de historias SHINee Valentín~
1° Lugar
- Spoiler:
- Comenzó en un desafortunado día de San Valentín. por G w i b σ σ n ♔
Mención especial~~~
- Spoiler:
- Unintended por Dayan
Cupido ♥
Todos <3
62
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
1° Lugar
Comenzó en un desafortunado día de San Valentín. por G w i b σ σ n ♔
La historia:
Comenzó en un desafortunado día de San Valentín. por G w i b σ σ n ♔
La historia:
- Spoiler:
- Titulo: Comenzó en un desafortunado día de San Valentín.
Autor: Samantha; username: G w i b σ σ n ♔
Genero: Romance/Comedia, H&C.
Couple/Pareja: Jongkey.
Nota: Me pasé del máximo de 5 hojas por que, honestamente, no quería que fuera una historia así de se conocen/se besan/terminan juntos; además, también intenté darle como un fondo de historia de la vida de Jonghyun y cómo fue que Kibum entró en ella. Perdí la historia que originalmente era para este concurso el día de ayer (l0l) y pues, esto fue lo único que pude hacer. Puse detalles sobre un parque de diversiones de Corea del Sur, y aunque los busqué en distintos sitios, obviamente no son exactos. Solo me queda esperar que lo disfruten :)
Comenzó en un desafortunado día de San Valentín.
Eran cerca de las siete de la tarde, catorce de febrero del año 2012. A esa hora, el crepúsculo había ya caído sobre la ajetreada ciudad y las últimas parvadas de aves cruzaban a través de ella, buscando un refugio para la noche. Las calles estaban atiborradas con numerosas parejas, disfrutando la agradable y fresca tarde, tomando café o simplemente caminando, tomados de las manos y cosas por el estilo. Todos las tiendas, cafés, y restaurantes se encontraban abiertos, y más de unos cuantos se encontraban minuciosamente decorados por las fechas. De haber estado en diferentes circunstancias, Jonghyun habría puesto atención a los brillantes colores y a las frases románticas y ridículas de los globos con gas de helio, y se habría reído. Incluso también habría comprado uno. Pero ese día, ver tantos corazones flotantes y corazones de caramelo únicamente le provocaba una sensación poco agradable en el estómago.
Exactamente en 30 minutos tenía una cita con su novia en un exclusivo restaurante en el centro de Seoul, aunque no realmente. Hacía treinta minutos que le había llamado, y al instante en el que Jonghyun escuchó su voz a través de la bocina del celular, supo que algo andaba mal. Se preguntó si era algún tipo de habilidad que había desarrollado al estar tanto tiempo con ella, pero no tuvo suficiente tiempo de llegar a una conclusión. Ella quería terminar la relación, y por si el hecho de que era precisamente catorce de febrero no le parecía suficiente, ella había decido simplemente hacerlo por teléfono.
“Realmente lo siento, Jonghyun.” Habían sido sus últimas palabras, y brevemente se preguntó si ella verdaderamente lo sentía tanto como él.
Jonghyun no se consideraba una persona muy sentimental. Aunque, si tuviera que ser honesto consigo mismo, aceptaría que sí, en realidad era una persona extremadamente sensible. También era una persona demasiado orgullosa como para admitir ser sensible, pero ese no era el caso. Caminaba hacia la parada del autobús a paso lento, pues se encontraba ensimismado en sus increíblemente insensibles pensamientos. Mientras cruzaba la calle, intentaba ignorar a la pareja de enfrente, y evitaba con toda su fuerza de voluntad no contar los corazones flotando en la acera.
El aire olía a dulces de todo tipo, y aquello le traía unas náuseas insoportables.
Se dio cuenta de que iba a ser difícil de superar. Él, hasta cierto punto, había desarrollado un afecto hacía ella que nunca en su vida habría imaginado ser capaz de sentir. No era que la considerara el amor de su vida, pero el hecho de que lo había hecho sentir mil cosas con acciones tan simples como un beso o una sonrisa significaba que era algo para él. Ella significaba algo para él, pues a final de cuentas, habían estado juntos cerca de once meses.
→
Llegó a su apartamento arrastrando los pies, el ceño fruncido y los labios formando una delgada línea. Adentro del apartamento se encontraban las luces de la sala y la cocina prendidas, y como lo esperaba, Taemin se encontraba en el sofá más grande, frente al televisor.
“¡Ah, Jongh–... ¿Jonghyun?” Dijo Taemin, inmediatamente perdiendo la emoción en su voz al ver la no tan radiante cara del mayor. Taemin frunció el ceño y se levantó del sofá, estirando los dobleces de su suéter. “¿Sucedió algo? Te ves– uh...”
“Sucedió que–“ Comenzó, inhalando audiblemente. “Jieun decidió que sería una buena idea terminar conmigo en el Día de San Valentín. Siempre tan ocurrente, ella.” Agriamente respondió Jonghyun, casi gruñendo al final. Pudo ver claramente cómo las palabras abandonaban a Taemin por completo, mientras su quijada caía colgando y sus ojos se abrían como platos.
“¿Estás bromeando? Eso es–“
“Ni lo menciones. Déjame dormir, ¿de acuerdo?” Sugirió Jonghyun, a regañadientes deshaciéndose de sus zapatos en el recibidor. Sentía el cuerpo adormilado, y en aquél momento caminar era la tarea más tediosa del mundo. Sin embargo, logró llegar a su habitación, quitarse la chaqueta y aventarse sobre el colchón, y finalmente, dormir.
Si mal no recordaba, aquél podría fácilmente colocarse en el puesto del segundo día más amargo de su no tan amarga vida. El primer puesto lo obtendría el día en el que se quedó en el aula de suspensión por más de 6 horas por una travesura que ni siquiera había salido como él la había planeado. No estaba seguro qué lo había hecho enojar más, pero podría apostar que era el hecho de que uno de sus compañeros había arruinado su perfecto plan y no las seis horas que pasó sentado en una dolorosamente incómoda silla.
Al día siguiente, despertó con un dolor en el cuello y el brazo entumido. Forzosamente rodó de la cama, sintiendo el sol caer justamente sobre su rostro, como si se estuviese burlando de él, y se dirigió al baño del pasillo. Se cambió de ropa, pues había dormido con los jeans negros y la camisa que recién había comprado, y se dispuso a adentrarse a la cocina. Para su fortuna, Taemin se había tomado la molestia de cocinar un desayuno para los dos.
“¿Hambre?” Taemin cuestionó, sonriendo mientras levantaba el sartén de la estufa. Solamente atinó a asentir, y a jalar uno de los bancos altos frente a la barra desayunador. Taemin vestía sus pijamas de rayas, y tenía el cabello señalando a todas las direcciones humanamente posibles. Le habría gustado hacer mención del intrincado peinado del menor, pero simplemente no tenía humor, y hablar le parecía una pesadez. Miró al plato ya servido en la mesa, e inmediatamente supo que aquél era el de Taemin.
“Huevos revueltos con..” Quiso intuir Jonghyun, forzando la vista sobre el exótico platillo. Taemin lo miró por encima de su hombro y sonrió bobamente.
“Con nutella. Se nos acabó la mermelada.” Respondió, haciendo un mohín poco contento. Jonghyun negó con la cabeza y no logró suprimir la sonrisa asomándose en sus labios.
“Tengo una teoría de por qué eres así.” Dijo Jonghyun, finalmente despojándose de la pesada opresión en su pecho. Taemin volteó, interesado, clavaba el tenedor en su comida. Levantó una ceja, y asintió, señalándole a Jonghyun que continuara. “Tu mamá nunca te dio leche de fórmula, te daba agua con splenda.”
Ambos soltaron unas sonoras carcajadas, Jonghyun balanceándose sobre el banco en el que estaba sentado, mientras que Taemin intentaba evitar que todo el bocado de comida se fuera a sus pulmones.
Su primera clase empezaba a las 10 a.m., y de no haber sido por que su apartamento estaba a unas cuantas cuadras de la universidad, no habría llegado a tiempo. Afortunadamente, la profesora se había demorado un poco en la sala de profesores, y Jonghyun tuvo tiempo suficiente de correr por los pasillos hasta llegar al salón. Las clases pasaron rápido, para su suerte, fueron como una visión borrosa luego de un sueño profundo, con pocos ruidos y fantasmas de las voces que estaban a su alrededor. Jonghyun abandonó el edificio y se dirigió a la cafetería principal del campus, junto con su amigo y compañero de algunas clases, Jinki.
“¿Y bien?” Jinki preguntó, bebiendo un poco de su refresco. Jonghyun pausó la canción en su celular, se quitó uno de los audífonos y lo miró, cuestionándole con la mirada. “¿Qué tal te fue ayer?” Jinki preguntó nuevamente, sonriendo de oreja a oreja, como si hubiese conseguido engañar al mismo Sherlock Holmes. Jonghyun intentó no aniquilarlo con la mirada, pero estuvo cerca de fallar. La sonrisa de Jinki se desvaneció como marcador de agua en papel encerado.
“Jieun y yo... decidimos terminar. Justo ayer.” Dijo, intentando resumir la historia lo más que le fue posible. Jinki lo miró, confusión a nivel olímpico clara en su rostro. Después, como Jonghyun predecía, colocó las manos sobre la mesa y se levantó un poco de la banca.
“¡¿Rompieron?! ¿Por qué? Dios mío, ¿Cómo fue que– tú, Por qué?” Aulló Jinki, acercando su cuerpo por encima de la mesa.
“Shh, Jinki, no me grites– Shh.” Le dijo Jonghyun, empujándolo de regreso a su lugar sobre la banca. “No fue mi culpa. Fue ella quien decidió terminar. Y está bien, sabes, creo que fue lo mejor.” Argumentó Jonghyun, encogiendo los hombros indiferentemente. En ese momento pensó que, si hubiese tomado lecciones de actuación en su primer curso, habría podido engañar a Jinki. Por supuesto, no lo logró. Jinki suspiró, y dejó que sus hombros cayeran, sutil decepción pintada en sus facciones. Jonghyun decidió ignorar aquél tema, y agradeció que Jinki hizo lo mismo, sin preguntar nada más.
Minutos después, Taemin se deslizó junto a Jonghyun en la banca, una sonrisa satisfecha adornando sus facciones. Vestía unos jeans de mezclilla negra y una camisa blanca, extremadamente holgada, y con letras rojas en el frente. Jonghyun pensó que si no conociese a Taemin desde su niñez, habría salido con él. Pero desafortunadamente, lo conocía muy bien, y sabía que el encanto se acababa muy pronto detrás de esos ojos soñadores y la sonrisa tan soleada de siempre.
“Buenas noticias, Caballeros.” Anunció el menor de los tres, inflando su pecho orgullosamente. “Viernes por la noche, en casa de Dongwoon. Fiesta de San Valentín, cortesía de Taemin. ” Jinki lo miró sorprendido por unos segundos, luego miró a Jonghyun, regresó la mirada a Taemin y negó con la cabeza.
“No podemos– ya sabes, ir de fiesta cuando Jonghyun se encuentra totalmente abatido por su ruptura con Jieun.” explicó, haciendo ademanes exagerados para enfatizar su punto. Jonghyun se rió, una carcajada natural que hizo que se doblara un poco en su lugar. El dramatismo de Jinki siempre había sido su punto débil.
Cayó en cuenta de que tal vez, una fiesta no se encontraba entre los planes de alguien que recién había terminado una relación más o menos seria. Pero, a pesar de encontrarse decepcionado, triste, y tal vez un poco herido, decidió no hundirse más en el mismo océano al que todos se aventaban. Decidió que no, no se quedaría sentado, esperando a que por alguna razón Jieun se arrepintiera y quisiera volver con él. Taemin le había dicho alguna vez que no valía la pena regresar con alguien que había decidido romper contigo, por que eso significaba que no les preocupaba lo suficiente como para seguir intentando. Y aunque le costaba un poco admitirlo, Taemin tenía toda la razón.
“Claro que podemos ir, Jinki. ¿De qué estás hablando?” Dijo en un tono burlón, rodeando a Taemin por los hombros. “Tienen que distraerme y sacarme de ésta.” Y Taemin, lleno de entusiasmo, asintió, apoyando su argumento.
“¿Estás seguro de que no prefieres ver películas, comer helado, ya sabes, lo convencional?” Cuestionó Jinki, frunciendo el ceño graciosamente. Taemin bufó y comenzó a reírse bajo el brazo de Jonghyun, y éste le imitó en pocos segundos.
“Por favor, Jinki. ¿De quién crees que estás hablando, huh?” Jonghyun replicó, riéndose hasta que sus ojos desaparecieron y sus mejillas se tornaron rojas.
Esa tarde en el apartamento, Taemin sugirió ver la saga completa de Harry Potter. Jonghyun no se opuso, pues a pesar de que casi siempre se quedaba dormido en la quinta película, disfrutaba de las demás casi tanto como Taemin.
“¿Deberíamos comprar helado? Ya sabes, es casi una tradición...” Pensó Jonghyun en voz alta, mientras se acomodaba entre los cojines del sofá. Taemin negó con la cabeza y volteó a verlo desde su lugar en la alfombra, al pie del sofá.
“Tengo suficiente chocolate para tres meses. Quiero compartir un poco de mi futuro acné contigo.” Aclaró, presionando play en el control remoto, y luego le pasó una de las cajas con chocolates. Había una pila de cartas en la barra, cajitas de regalos en el pasillo a las habitaciones y chocolates de todas las marcas que Jonghyun conocía en el sofá más pequeño. Jonghyun sonrió para sus adentros, pensando en todas las chicas que se le acercaron tímidamente a Taemin. Se imaginó la sonrisa nerviosa que el menor portaría y la suavidad con la que pronunciaría el gracias que tanto lo caracterizaba.
“Por cierto, Tae. ¿Quién te invitó a la fiesta? Creí que Dongwoon estaba en el ala de administración.” Dijo Jonghyun mientras cortos de otras películas rodaban en la pantalla. Taemin volteó, con la expresión más orgullosa y presumida a la vez, arqueando una ceja arrogantemente. Tenía que admitir que varias veces la popularidad de Taemin les había dado ciertas ventajas.
“Kibum. Está en varias de mis clases; forklore, teoría de la música aplicada en la danza, contemporáneo por coreógrafos, teatro-” Jonghyun le disparó una mirada confundida y Taemin se detuvo. “En fin, somos muy cercanos, y fue él quien me invitó. Dijo que a Dongwoon no le importaría si llevaba amigos.” Dijo, y cuando escuchó la música instrumental de Harry Potter se volteó instantáneamente, y de forma literal, se sumergió en la película.
→
Jonghyun finalmente se permitió desahogarse con Jinki, el viernes que llegó a su apartamento antes de que se dirigieran a la fiesta. No había derramado ni una sola lágrima hasta entonces, siempre distrayendo su mente con cosas que no venían al caso, pero de alguna manera funcionaban y mantenían sus pensamientos ocupados. Sin embargo, a pesar de sus intentos de evadir el tema, únicamente Jinki pudo persuadirlo. Jonghyun se encontraba sentado en la orilla de la cama, mirando sus manos, apoyadas sobre sus rodillas. Jinki solamente entró a su cuarto, le sonrió y extendió sus brazos, siempre tan cálidos como solo él podía ser. Quería vaciarse totalmente, de la pesadumbre y la inconformidad y la sensación de haber sido traicionado, quería dejar caer todo.
Lloró hasta que sus ojos se rindieron, hasta que su cuerpo jalaba aire involuntariamente y no podía hablar.
“Sabes que puedes hablar conmigo cuando quieras, ¿verdad?” Le habló Jinki al oído, recorriendo su espalda con la mano. Jonghyun asintió, y soltó una risa de la nada. Cuando levantó la cabeza, Taemin estaba recargado en el umbral de su cuarto, sonriendo levemente. Taemin se enderezó y bajó los brazos de su pecho, y mientras Jonghyun se secaba los restos de las lágrimas aferradas en su rostro, aplaudió y los apuró para que comenzaran a arreglar sus cosas.
La casa de Dongwoon se encontraba al otro lado de la ciudad. Jonghyun tenía la ubicación clara en su cabeza pues Dongwoon y él habían sido compañeros durante el primer año de preparatoria, y varias veces se habían reunido en la residencia Sohn. En el recibidor los encontró Joon, un amigo cercano de Jinki y que era primo de Dongwoon, según le habían dicho. Les indicó a dónde estaba la barra de bebidas, el baño, y algunos cuartos vacíos por si se requerían para una ocasión.
Taemin comenzaba a mover los pies al ritmo de la música retumbando en toda la casa, los beats claramente audibles incluso en el recibidor.
“El último que quede consciente paga el taxi de regreso al apartamento.” Jonghyun declaró, corriendo sus dedos por su cabello, despeinado con detalle. Taemin asintió sin prestarle mucha atención, al contrario de Jinki, quien bufó, cansado.
“No es justo, ya sabes que algunas de esas cosas me hacen vomitar y no pued-”
“Ya, tranquilo, Jinki. Olvidé mi cartera, así que ibas a pagar, ebrio o no.” Y con una sonrisa en la cara se esfumó, perdiéndose entre el mar de gente en la sala principal. Se encontró con un grupo de amigos ahí, y uno de ellos lo acompañó a la barra a servirse una bebida. Con la música haciendo que su cabeza vibrara era difícil escuchar a sus propios pensamientos, por lo cual le fue fácil olvidarse de sus tormentos.
La noche rodó escandalosa, y no le sorprendió – o tal vez, a ese grado de ebriedad ya no le importaba – ver a Taemin bailando en una mesa, ni tampoco el hecho de que uno de sus zapatos había mágicamente desaparecido. Se encontraba incapaz de preocuparse.
→
El estruendoso sonido del motor de un carro entró por la ventana, y después le siguieron muchos más. Se encontraba despierto pero se rehusaba a abrir los ojos, pues se temía que se le fueran a salir de sus cuencas si separaba mucho los párpados. La cabeza le daba vueltas, aunque también consideró el hecho de que podía ser el mundo el que estaba girando. De cualquier manera, no le importaba mucho. Sentía el cuerpo cálido, a una agradable temperatura, contraria a las sábanas que se encontraban levemente frescas.
Con los ojos cerrados, tentó su abdomen con una mano, y se dio cuenta de que había un brazo alrededor de su cintura. Despegó los párpados cuidadosamente y vio un brazo pálido cubriendo su piel. Siguió dicha extremidad hasta que se encontró con una cara desconocida. Intentó gritar pero un ardor en la garganta le sugirió que no lo hiciera. Se enderezó un poco, apoyándose sobre sus codos, y vio a Taemin abrazando al chico que lo abrazaba a él. Nadie tenía camisa, y en un momento de pánico levanto la sábana que los cubría a los tres. Para su gran alivio, aún tenían los pantalones – y los zapatos – puestos.
El chico junto a él gimió y se giró hacia el otro lado, quedando frente a frente con Taemin. Sin mucho cuidado se deslizó fuera de la cama y analizó la cara del desconocido que dormía entre ellos. Le era imposible recordar si alguna vez se había encontrado con él.
Luego de una extenuante lucha contra Taemin inconsciente, logró que el menor se despertara, gruñendo.
“Déjame dormir, por el amor de dios-” Comenzó a quejarse el pelirrojo, cubriéndose los ojos con las manos. Jonghyun continuó jalándolo de las piernas.
“¿Quién es ese? ¡Taemin, Abre los ojos! ¿Quién es ese?” Insistió Jonghyun, y ante la mención de un tercero, Taemin finalmente se enderezó. Soltó una sonora carcajada, con la voz rugosa y débil. Miró más de cerca al cuerpo semi inmóvil junto a él y volteó a ver a Jonghyun.
“Es Kibum. Al parecer también tuvimos una pijamada de San Valentín.” Taemin respondió, sonriendo de manera burlona.
Jonghyun decidió preparar hot cakes para desayunar, mientras que Taemin y Kibum, su invitado, seguían aún adheridos a la almohada. No tenía mucho en la cabeza, solamente un zumbido incesante que no cedía a dejarle en paz. Estaba concentrado en los hot cakes sobre la sartén, esperando el momento preciso para darles la vuelta y después moverlos a un plato extendido. No se percató de la persona apoyada en el otro lado de la isla para desayunar, hasta que dicha persona tosió por lo bajo, y luego soltó un bostezo.
Jonghyun brincó en su lugar, apretando con fuerza la espátula en su mano. Kibum lo veía entre confuso y divertido, tratando de re acomodar su cabello.
“Me sorprendiste.” Confesó Jonghyun, dándole la espalda al muchacho y regresando a sus preciados hot cakes.
“¿Buenos días?” Respondió Kibum, con una sonrisa colgando en sus labios, terriblemente resecos y escasos de color. Jonghyun lo miró por encima de su hombro y asintió en su dirección. Levantó uno de los hot cakes del sartén y lo colocó sobre el plato extendido que se encontraba en la barra junto a la estufa.
“Me imagino que te sorprendiste al encontrarme en tu cama. Con Taemin.” Dijo Kibum, a pesar de que Jonghyun se encontraba esmerado en verter más mezcla para hot cakes en el sartén. Luego de un rato, se giró un poco y miró a Kibum, analizándolo a detalle. Ahora sí podía apreciar bien su cara, cada una de sus facciones.
“Tienes suerte, ¿sabes?, de no haberme sentido en estado vegetativo al despertar, te habría lanzado por la ventana.” Admitió Jonghyun, riéndose con flojera. Kibum le imitó, moviendo la cabeza hacia los lados.
Kibum tenía bonitos ojos. Eran como imanes que le atraían por causas naturales, profundos y tentadores, elegantemente afilados, definidos en cada ángulo que podían tomar, al igual que sus altos pómulos, sobresaliendo de su rostro con un extraño toque femenino y a la vez no, pues también le daban un aspecto masculino un tanto peculiar, poco común. Por debajo de su alborotado cabello se veían sus cejas, robustas y estéticas, de una forma sin falta alguna. Su rostro era un enigma, pensó Jonghyun mientras lo miraba a la cara. Tenía los labios en forma de moño, delineados perfectamente, pálidos y del tamaño adecuado para su nariz.
“–hyun? ¿Jonghyun?” Kibum le llamaba, agitando su mano en el aire. Jonghyun parpadeó repetidas veces, y se encontró con la expresión desconcertada de Kibum. “Tu hot cake se va a incendiar.” Le informó después, señalándole con el dedo índice hacia la estufa, de donde provenía un aroma poco conveniente.
Decidió terminar de preparar hot cakes suficientes para los tres antes de seguir conversando con Kibum, quien seguía sentado en la barra, distrayéndose con cualquier objeto que se encontrara.
Taemin despertó poco después de que Jonghyun había colocado una pila de hot cakes sobre la barra. Kibum comentó cómo su instinto animal hacía que su olfato se agudizara, mientras que Jonghyun se dedicaba a llenar su estómago y Taemin pronto le imitaba.
Salió de la ducha con una bermuda y una camisa puestas, con una toalla colgada en sus hombros y el cabello y la piel aún húmedos. El ruido de la sala se había detenido y, con la curiosidad en la mano, se dirigió hasta donde había dejado a Taemin y a Kibum platicando, antes de meterse a la ducha.
Encontró a Taemin con el control remoto en la mano, sin mucho entusiasmo brincando de canal en canal a través de la programación. Miró a su alrededor, escaneando con los ojos el espacio de la cocina. Taemin se percató de esto y le dijo: “Se fue hace unos minutos.”
“Oh. Bien.” Respondió Jonghyun con aire ausente. Taemin regresó la mirada al monitor, mientras que Jonghyun caminaba hacía la cocina para tomar un poco de agua. “¿Taemin, recuerdas a dónde dejé mi zapato?” preguntó casualmente, inclinando el vaso sobre sus labios.
“No, cuando te encontré estabas con Kibum y no había rastros de tu zapato.”
“¿Estaba con Kibum?” Quiso saber, acomodándose junto a Taemin en el sofá. Taemin asintió pero no dio más detalles, por lo que supuso que no sabía realmente mucho sobre cómo es que habían terminado juntos en la fiesta o por qué Kibum había amanecido en su cama. Jonghyun decidió que investigaría los detalles más tarde.
→
El lunes vino más pronto de lo que esperaba, y a pesar de haber pasado casi todo su domingo bajo las cobijas de su cama, sentía el cuerpo cansado, como si hubiese recorrido largas distancias a pie; lo cual le parecía simplemente ridículo. Miró a Taemin mientras caminaban por la acera, unas cuadras antes de llegar al campus de la universidad, y se dio cuenta de que ni siquiera tenía señales de ojeras bajo los ojos, ni cansancio en su mirada y aún no había indicios de acné de San Valentín en su piel. Se veía impecable, a pesar de portar una expresión irritada y poco amigable.
“¿Enserio no te sientes mal?” Preguntó por tercera vez esa mañana. Taemin lo miró por el rabillo de su ojo y suspiró, pareciendo cansado.
“No, ya te dije que yo soy joven y saludable.” Y era cierto, ya lo había dicho. Lo decía siempre que Jonghyun parecía envejecer 5 años de un día para el otro. “Llegaré tarde a casa, comienzan los ensayos intensivos del recital del que te hablé.”
Jonghyun asintió, y por la esquina de su mirada vio como Taemin caminaba hacia el otro lado del campus, dirigiéndose a la extensa ala de Artes.
Pasados los primeros tres periodos, coincidió con Jinki en una de las salas de lectura del edificio. Fue totalmente inesperado, ya que la idea original de ir a encerrarse a la sala era dormir por lo menos cuarenta minutos antes de la clase de interpretación.
“Aún hoy se te nota lo mucho que te divertiste el viernes, huh.” Dijo Jinki, brincándose un saludo. Jonghyun rodó los ojos y asintió, sobándose la frente con las yemas de sus dedos.
“¿Tienes detalles de la fiesta?” Le preguntó a Jinki, sentándose en la silla junto a la de él. La sala se encontraba parcialmente vacía, a excepción de un montón de chicas ensimismadas en una pila de libros que tenían sobre la mesa. No había maestros alrededor por lo que Jonghyun se permitió tener una charla antes de dormir.
“Tiraste uno de tus zapatos por la ventana, uh– también tomaste shots de Jessica y te andabas besuqueando con alguien que no conozco. Pensé que irías a su apartamento pero Taemin se las arregló para arrastrarlos a ambos. No sé más, no te estuve vigilando toda la noche.” Confesó Jinki, encogiendo los hombros. Escuchar en boca de su amigo sus magníficas aventuras de la fiesta le había invocado una pequeña resaca. “Pudiste haber hecho algo peor.” Al final Jinki le consoló.
Taemin llegó al apartamento pasadas de las 6, con el cabello despeinado y adhiriéndose a sus mejillas por el sudor que corría por entre las hebras. Jonghyun se encontraba en su cuarto, con un montón de hojas alborotadas sobre su escritorio.
“¿Adivina quién te mandó su número?” Canturreó Taemin desde el umbral de su puerta. Muchos rostros sin nombre pasaron por su mente, pero solamente hubo uno que se quedó presente más de lo necesario. Quiso creer que era por las posibilidades de que en verdad fuera él y no por que quisiera su número. Jonghyun levantó los hombros en respuesta y el menor continuó: “Dice Kibum que lo llames cuando tengas tiempo libre.” Y con una excelente puntería le lanzó una bolita de papel al cuello. Había adivinado.
Trató de regresar el papel a un estado legible, y lo colocó en el pizarrón de corcho que estaba colgado en su pared, junto a las notas, pedazos de canciones, frases y pensamientos que no tenían más lugar en su cabeza. Esa serie de números no dejaba de dar vueltas por su mente.
A pesar de tener el número en su habitación, a la clara vista de sus ojos, no llamó. Taemin continuó con los ensayos para el recital, Jinki lo visitó repetidas veces e incluso decidieron hacer un poco de tarea en el apartamento. Dos semanas pasasaron rápido, como aire por entre las hojas de un árbol, llevándose a unas cuantas. Los exámenes y proyectos, letras y melodías le tenían al borde la mayor parte del tiempo. Sin embargo, el número estaba ahí, escrito con sharpie negro, números libres y descuidados, sin fijarse en el tamaño o la rectitud de sus trazos.
El día antes del recital de baile recibió un mensaje de texto de un número desconocido. El mensaje simplemente decía ”Nos vemos mañana en el recital?” . Con la curiosidad en mano respondió en breve.
”Depende de quién seas?” Decidió regresar la mente a la composición sin terminar que yacía sobre su escritorio. Llevaba cerca de treinta minutos sin que alguna palabra cayera en tinta, sin nada que sonase correcto en su mente. Su celular vibró de nuevo, interrumpiendo el tren de sus pensamientos.
”Dormiste conmigo y no me recuerdas ᅲᅲ eso no habla muy bien de ti!” . Frunció el ceño, y comenzó a retroceder en sus vagos recuerdos. Claramente recordaba las personas con las que había dormido recientemente y sus respectivos nombres. Antes de que pudiese pensar de una respuesta lo suficientemente inteligente, recibió un mensaje nuevo. ”Pijamada de San Valentín? Ta–dah~ `ᄇ´”
Intentó suprimir la sonrisa que gradualmente se esparcía por sus labios, y falló notablemente. ”Entonces nos veremos mañana!”
Apenas y recordaba cómo sonaba la voz de Kibum, pero algo dentro de él sentía la extraña necesidad de traerla de vuelta a su memoria.
”Llámale una cita, entonces. ♥”
→
Llegó al auditorio del campus quince minutos más temprano, y encontró a Jinki ya acomodado en los asientos de la primera fila, con agua embotellada y cámara en mano.
“Pareces su papá y no su mejor amigo, Jinki.” Le dijo, señalando con la mirada la cámara digital. Jinki únicamente sonrió y negó con la cabeza, murmurando algo como 'ustedes dos son como mis inadaptados hijos' pero no le prestó mucha atención. La gente comenzaba a llenar el lugar y acomodarse en sus lugares. Antes de que las luces se apagaran recorrió el lugar con la mirada pero no encontró caras conocidas; al menos no la cara que esperaba ver. Esperó a que corrieran el telón mientras se imaginaba cómo sería haber sido hijo de Jinki.
Jonghyun miraba con admiración como la mayoría de los bailarines parecían no tener huesos impidiéndoles moverse libremente. Todos seguían el ritmo a la perfección, guiándose con los latidos de la música como si les viniera por instinto. Y también estaba Taemin, quien parecía ser todo menos humano junto a los demás. Taemin guió el último número sin faltas, completamente absorto en su mundo.
El recital acabó poco antes de las nueve. Jinki y Jonghyun se dirigieron al backstage, colándose por entre los encargados del escenario y unos bailarines.
“Lo hiciste perfectamente, Taemin, ¡Lo digo enserio!” Alguien estrangulaba a Taemin en un abrazo y gritaba en su oído. Taemin estaba riendo y asentía. Cuando esa persona se alejó de Taemin, que se encontraba sudado y le faltaba un poco el aliento, Jonghyun se dio cuenta de que era nada más y nada menos que Kibum. Taemin los notó cuando levantó la vista, y Jinki fue el primero que corrió a felicitarlo. Kibum volteó segundos después, y encadenó su mirada con la de Jonghyun, que se encontraba levemente sorprendido.
“Hola, Jonghyun.” Saludó Kibum primero, dejando que una sonrisa coqueta se escapase de sus labios. Jonghyun sintió cómo lentamente perdía la habilidad del habla, sin embargo logró asentir y sonreír a tiempo.
“¿Qué haces acá atrás?” Preguntó Jonghyun, corriendo sus dedos por entre su cabello.
“Soy parte del staff de vestuario.” Dijo, re acomodando su flequillo, que al parecer de Jonghyun se mantenía inhumanamente perfecto. “¿Qué te parece si te despides y nos vamos? Antes de que algún profesor me encuentre y me encargue más tareas.” Sugirió después, mirando hacia sus costados.
Jonghyun caminó hacía Taemin, quien se encontraba entretenidamente viendo cómo Jinki trataba de imitar sus pasos favoritos.
“Hey, lo hiciste genial. Pudiste haber hecho el recital tu solo, honestamente.” Comentó sonriente, asintiendo totalmente seguro de sus palabras. Estaba siendo completamente honesto con lo que decía.
“Gracias, pero no es para tanto”
“Me tengo que ir. ¿Nos vemos en el apartamento?” A lo que Taemin asintió.
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Luego de su abrupta ruptura con Jieun, no había tenido ni una sola cita, por lo que se sentía un poco ajeno al escenario. A parte de que sentía que era la primera cita de su vida, era la primera vez que salía formalmente con un chico, y no tenía ni la más mínima idea de cómo debía actuar. Tan extraño como parecía, no sabía qué decir, no sabía cómo iniciar una conversación. Para su suerte, tan pronto como entraron al café, Kibum comenzó la plática. No fue de la manera más amena, pero al menos había algo de lo que hablar.
“Nunca me llamaste.” Dijo mientras se acomodaba en la silla. No sonaba precisamente molesto, si no sorprendido. Escogieron una mesa junto a la pared, del otro lado del mostrador. Junto a ellos había un aparador con revistas y libros de pasta suave para hojear, un extinguidor, y un árbol de aspecto otoñal plantado en una maceta en la esquina. El café parecía un lugar agradable, con un sutil aroma a canela y a café, y un ambiente cálido y acogedor que se agradecía en un fresco anochecer.
Jonghyun carraspeó un poco, e intentó formar oraciones en su cabeza.
“Lo lamento, en verdad nunca tuve la oportunidad. Ya sabes, entre composiciones, canciones, investiaciones– no hay tiempo de por medio.” Y al final, agregó una sonrisita culpable. Kibum asintió, sonriendo de igual manera.
“Algo así me comentó Taemin.” Comentó Kibum casualmente.
“¿Hablas sobre mí con él? ¿Qué más te ha dicho?” Cuestionó Jonghyun, un poco sorprendido; sus cejas arqueándose graciosamente, y sus labios formando una pequeña 'o'.
“Nada relevante, enserio.” Añadió Kibum, riéndose de la reacción de Jonghyun. “Solo lo básico.”
Jonghyun analizó la situación un poco mientras escogían algo del menú. Los precios de cada bebida –así fuese fría o caliente– eran ridículamente altos, pero no objetó nada al respecto. En resumen, Kibum estaba interesado en él, en un plan 'más que amigos', y Jonghyun se sentía extrañamente orgulloso. Kibum parecía ser una persona fuera de lo común; estudiante de moda y artes, gustos exquisitos, personalidad impecable. Había algo en Kibum, Jonghyun creía, algo que le impedía alejar la vista de él. Por más incoherente que le pareciera, se sentía inmensamente atraído. No había caso en negarlo.
“Aquella noche en la fiesta,” comenzó Kibum, cuidadosamente inspeccionando su croissant. “no dejabas de quejarte de una tal Jieun. Por lo que pude entender, recién habían roto.”
“¿Te hablé de eso?” Jonghyun preguntó, apenado. Kibum asintió y dio el primer mordisco a su bocadillo.
“Sí. De hecho, no dejabas de quejarte. Aunque pronto se te olvidó.” Comentó Kibum, básicamente ignorando la manera en la que Jonghyun enterraba su rostro en la cuna que formaba con sus brazos sobre la mesa.
La conversación, para el alivio de Jonghyun, tomó otras rutas. Terminaron hablando de sus grupos y películas favoritas, imitando una que otra frase célebre de sus personajes favoritos. Hablaron de sus peores maestros y las clases que más disfrutaban, de qué marcas de ropa eran las mejores y los colores que les iban con la piel, e incluso sobre qué animales preferirían tener como mascotas.
Pagaron la cuenta – estúpidamente elevada, en su humilde opinión.– y salieron del café, caminando hombro con hombro. Hacía frío afuera, como si febrero se estuviese despidiendo en su última semana, y según el celular de Jonghyun, pasaban treinta minutos después de las once. Se sentía una gentil cortina de humedad en el aire, que rozaba sus mejillas a cada paso y vuelta que daban. Iban encerrados en un cómodo silencio, y Jonghyun podría jurar que conocía a Kibum desde que salió de su cuna.
Llegaron a una parada de autobuses prácticamente vacía, a excepción de un hombre con un traje elegante esperando en la banca del lugar. Jonghyun sumergió las manos en sus bolsillos, disfrutando la momentánea calidez de sus piernas a través del material de sus jeans. Kibum encogía el cuello y respiraba adentro de su bufanda, que cubría su boca y apenas tocaba su nariz.
Se encontraban parados junto a una lámpara en la banqueta, y la luz blanquecina se derramaba completamente sobre ellos, aún más que la de la luna. Kibum palidecía bajo dicha luz, y Jonghyun podía sentir una infinidad de palabras aglomerándose en su mente al verlo, canciones y melodías y cosas que no podía explicar pero podría morir en el intento de hacerlo. Era como ver a un príncipe salido de un cuento infantil, con facciones delicadas, cabello de oro y un encanto prometedor en cada sonrisa. Tenía algo enigmático en la forma en la que se movía, la forma en la que parpadeaba y la manera en la que sus labios se curveaban, rehusándose a formar una sonrisa pero a punto de rendirse. Jonghyun estaba embelesado por la presencia del menor.
“¿Tengo algo en la cara?” Preguntó Kibum, mirando hacia arriba. Él se encontraba sentado en la banca, hundiéndose tanto como le era posible en la cálida temperatura de su abrigo y bufanda. Jonghyun parpadeó rápidamente y volvió a la realidad.
“Eh, no. No tienes nada.” Respondió, desorientado. Kibum le sonrió, y Jonghyun de nuevo trepó al barco de sus pensamientos, pero esta vez intentaba buscar adjetivos adecuados para describir el rostro de Kibum, que se encontraba mirando hacia la avenida. Perdido en su tarea mental, no se dio cuenta cuando Kibum se levantó de la banca y se puso de pie frente a él.
“Aquél de allá es mi autobús.” Aclaró Kibum, capturando la atención del castaño. Señalaba con el dedo índice al autobús que apenas venía pasando la esquina y se dirigía hacia la parada. Jonghyun intentó no verse muy decepcionado, y sonrió ampliamente. “Fue una grandiosa cita. ¿Se puede repetir?” Kibum dijo, su voz fundiéndose entre coqueta y tímida. Jonghyun pensó que de ambas maneras sonaba hipnotizante.
“Por supuesto que se tiene que repetir.”
“¿Llamarás esta vez?” Kibum cuestionó. Jonghyun encogió los hombros culpablemente, y corrió sus dedos por entre su cabello.
“Tenlo por seguro.” Kibum murmuró un 'bien, y velozmente se acercó a Jonghyun y plantó un delicado beso sobre su mejilla, que apenas se sintió como el toque de una pluma, pero logró permanecer sobre su piel por minutos.
“Nos vemos.”
Jonghyun lo miró subirse al autobús y buscar un asiento relativamente cerca de la puerta de salida. El señor con traje elegante seguía en la banca, mirándole como si fuese una cucaracha mutante. Supuso que no había nada que hacerle, y sonrió complacido consigo mismo. Cruzó la calle y se dispuso a volver a casa.
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“¿Y bien?” Cuestionó Taemin, sentándose en su cama. Jonghyun se encontraba frente a su escritorio, furiosamente escribiendo y garabateando palabras y notas en una hoja de papel. Jonghyun lo miró por unos segundos y frunció el ceño, antes de regresar a su trabajo. “¿No me vas a contar cómo te fue?”
“¿No se supone que deberías estar dormido?” Respondió Jonghyun, desinteresado. Taemin rio escandalosamente. Jonghyun intentó mentalmente bloquear el sonido.
“¿Quién eres tú para hablar?” Respondió el menor, mientras se levantaba del colchón y se dirigía a la puerta. “Kibum es un buen partido. Por alguna razón está dispuesto a lidiar contigo.” Y entonces, cerró la puerta tras de él.
Aquellas palabras quedaron flotando en el aire, aún después de que Taemin había abandonado la habitación. Jonghyun las meditó mientras mordisqueaba la cola de su lapicero. Se preguntó vagamente si Kibum tendría algún interés en especial; pero entonces recordó que Kibum era simplemente Kibum y uno no podía simplemente leer sus acciones. Recordó que Kibum estaba obsesionado con el Señor Cara de Papa y era fan de El Extraño Mundo de Jack y le gustaba coleccionar figuras de Bob Esponja. Una sonrisa apareció en sus labios sin que él se percatara.
Pensó que tal vez, si llegaba a formar una relación con Kibum terminaría harto, justo como Jieun. Se preguntó si también hablaría por teléfono y le diría que las cosas no estaban funcionando, y entonces se disculparía. Una pregunta encontró a la otra, y de nuevo se encontraba reflexionando sobre sus errores, pues uno de ellos habría de ser la falla en él. Uno de esos defectos debía ser la razón por la cual Jieun ni siquiera se molestó en romper con él de frente, pues ella consideraba que tal vez no valía la pena. Se preguntó si Kibum también llegaría a terminar así.
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El penúltimo día de Febrero, Jonghyun recibió un mensaje de texto. Rápidamente desbloqueó el teléfono y notó que era Kibum. El mensaje decía: ”Mañana paso por ti, exactamente a las 4 p.m. ¡Será San Valentín toma 2! `ᄇ´*”
”Eso suena como una amenaza '-' ¡Pero también suena prometedor!” , tecleó rápidamente y envió el mensaje. Metió su celular a su bolsillo y con una gigantesca sonrisa en la cara, regresó su atención al Profesor.
Tal como el mensaje decía,cinco minutos antes de las 4 había alguien tocando la puerta del apartamento con insistencia. Jonghyun abrió la puerta con una mano, mientras que con la otra reacomodaba su cabello, que se había salido de orden al cambiarse repetidamente de camisa. Kibum le obsequió una sonrisa de oreja a oreja, haciendo que sus ojos se cerraran y se convirtieran en adorables curvitas, levantando ligeramente el pecho.
“Pensé que recordaría mejor la dirección, pero me tomó más tiempo de lo que esperaba.” Fue lo primero que dijo.
“Eso es por que la primera vez que viniste estabas más borrado de lo que crees.” Jonghyun respondió, riéndose burlonamente. Kibum lo golpeó en el hombro, sin tanta fuerza como para causar dolor. Después, procedió a sacarle la lengua al mayor.
“¿A dónde planeas llevarme?” Quiso saber Jonghyun.
“Es una sorpresa~” Canturreó Kibum, presionando sus labios juntos, un gesto extraño que aparentaba ser una sonrisa medio seria. Jonghyun intentó no pensar demasiado en las consecuencias de creer ciegamente en Kibum quien seguía haciendo aquella cara extraña.
Kibum vestía un ceñido pantalón de mezclilla clara, una camisa de rayas azules con blanco; holgada alrededor de su torso, una chaqueta negra de tela opaca y unos botines negros. Además, portaba unos lentes de aspecto lujoso que iban a la perfección con su rostro. Jonghyun intentó ignorar la manera en que el pantalón moldeaba sus piernas, y la perfecta curva que se hacía en la parte de sus muslos.
En resumen, Jonghyun se veía irremediablemente simple a lado de Kibum. Jonghyun vestía unos pantalones de mezclilla oscura, una camisa con estampado de rayos amarillos con un fondo rojo, y unos tenis blancos que rara vez usaba.
Desbordaron del metro en hasta el final de la línea 2, en Jamsil. Había un acceso directo a Lotte World desde ahí. Jonghyun miró a Kibum, sin poder creer lo que el rubio tenía en mente. “¿Lotte World? ¿Enserio?”
Kibum soltó una carcajada para entre los dos, sin inmutarse realmente de la gente a su alrededor. El lugar no estaba precisamente a reventar, pues no mucha gente tomaba esa línea del tren hasta el acceso al parque. La mayoría simplemente iba en automóvil y usaban la entrada principal. “Tengo mi lado romántico, ¿de acuerdo?” Se defendió sin mucho éxito.
Jonghyun lo miraba con una sonrisa incrédula en la cara. “Tiene años que no vengo a este lugar.” Admitió finalmente, mientras cruzaban las rejillas y puertas que había para entrar al recibidor del parque, a donde vendían los tickets y revisaban mochilas y bolsos.
Mientras entraban al inmenso edificio, platicaban sobre las veces que durante su adolescencia e infancia habían visitado diversos parques de diversiones. Kibum tenía miedo a las alturas, pero eso no le impedía subirse a los juegos mecánicos más aterradores si de orgullo se trataba. Jonghyun había confesado jamás haberse montado en el gyro swing, a pesar de que sus hermanas insistieron e insistieron.
Adentro del parque, parecía ser un mundo nuevo. Jonghyun lo recordaba un poco menos abarrotado, pero no se sorprendió a ver los nuevos edificios y atracciones amontonados en cada esquina. Kibum miraba a su alrededor maravillado, y no podía decidir a qué juegos entrar primero.
Decidieron ir a la pista de hielo del centro, en el piso inferior a donde estaban. Había una larga fila que avanzaba fluidamente. Consiguieron los pases y se dirigieron por sus patines, protecciones y finalmente, se adentraron a la pista. Kibum brincó sobre el hielo sin esfuerzo alguno, y patinaba con la gracia de un experto entrenado para deslizarse sobre dos filosas hojas en sus patines. Jonghyun, en cambio, apenas y podía mantenerse de pie y derecho. Le tomó un par de pasos encontrar el ritmo adecuado y distancia que debía manejar entre sus pies. La hora y media que tenían permitida pasó como si hubiesen sido cinco minutos.
“En el mensaje de ayer, ¿Por qué le llamaste San Valentín toma 2?” Preguntó Jonghyun, realmente sin una pista de lo que Kibum planeaba conseguir con aquella cita.
“¿Recuerdas que te dije que en la fiesta no dejabas de quejarte del peor San Valentín de tu vida?” Kibum comenzó, ignorando la breve expresión frustrada de Jonghyun. “Estabas al borde del llanto. Al principio me dio mucha risa, pero no pude evitar no hacer algo por ti.”
“No tenías que hacerlo.” Murmuró Jonghyun, mirando hacia otra dirección donde no estuvieran los profundos ojos de Kibum, que lo miraban fijamente a la cara, y podía seguir una avalancha de sangre aglomerándose en sus pómulos.
“Pero quise hacerlo. Todos merecemos una segunda oportunidad, ¿no es cierto?, esta es tu segunda oportunidad para pasar un lindo día de San Valentín.” Explicó Kibum, asintiendo seriamente a lo que había expuesto como argumento. Jonghyun creyó que no tenía sentido.
“Pero no es 14 de Febrero.” Argumentó Jonghyun a su defensa. Kibum bufó, tirando las manos al aire. Entonces volteó a ver a Jonghyun, y con el rostro determinado le dijo:
“¿Quién necesita que sea exactamente el 14 de Febrero para demostrar un poco de amor? Podemos salir el 3 de abril y seguiría siendo una muestra de cariño, ¿no crees?”
Jonghyun se quedó sin habla, y su corazón parecía querer llevar acabo la tarea de hablar por él, palpitando rápidamente dentro de su pecho. Kibum sonrió triunfante.
“¿No tienes hambre?” Preguntó Kibum, a lo que Jonghyun, totalmente fuera de aliento, asintió. Se deshicieron de los patines y los protectores, los devolvieron a las urnas en las que correspondían y subieron al tercer piso, donde se encontraban numerosas franquicias de restaurantes
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Mientras subían por la rampa eléctrica, Jonghyun observaba a Kibum mientras éste analizaba el lugar. Más de una vez olvidó respirar mientras lo hacía, pero no podía despegar los ojos de él. Aún se sentía inseguro, desconfiado y quizá no estaba preparado para saltar a otra relación; pero ver a Kibum sonriendo como un infante, o verlo fruncir el ceño y levantar los labios en descontento le hacía pensar que incluso si tuviera que volver a pasar por la misma decepción de una ruptura inesperada, Kibum haría que aquello valiera la pena por completo.
Antes de que oscureciera por completo salieron a la isla anexa al parque, y Kibum, habiendo recurrido a sus asombrosos encantos de persuasión, convenció a Jonghyun de subirse con él al Gyro Swing.
“No sería una típica cita de San Valentín si no tenemos un poco de adrenalina, ¿no crees?” Había argumentado, mientras parpadeaba tiernamente frente al mayor. Jonghyun gruñó.
“Pero no tiene que ser una cita típica–“ Dijo Jonghyun, estirando su terquedad al máximo, lo cual a Kibum parecía tenerlo sin cuidado. “Quizá debamos cambiar algunas cosas.”
“Nope.”
“Voy a vomitar encima de ti.” Amenazó Jonghyun, adoptando un tono serio y consternado en su voz. Kibum se ahogó una risa en la garganta, y lo miró, divertido.
“Inténtalo y sales volando del juego.” Jonghyun decidió dejar la discusión por la paz.
Al final, Jonghyun y Kibum se subieron al gyro swing, que se mecía de lado a lado, como un columpio lateral. La rueda que estaba en la base era donde se encontraban todos los asientos, y sus piernas quedaban colgando en el aire. Jonghyun sentía iban a estrellarse contra el edificio colindante, Kibum se reía a carcajadas y soltaba gritos despavoridos cuando alcanzaban el punto más alto.
Comenzaba a anochecer, y la mayoría de las parejas y familias empezaban a caminar a través de los pasillos del parque principal, y se dirigían a las diversas salidas.
“No puedo creer que me obligaste a subirme a todos esos– instrumentos de tortura.” Se quejaba Jonghyun, mientras Kibum disfrutaba de un té de burbujas y Jonghyun apenas y prestaba atención a su algodón de azúcar. “Realmente sentí que moría y–”
“No, no– stop.” Le calló Kibum, parándose justo frente a él. “No intentes negar que te divertiste, por que sé que lo disfrutaste.” No podía esconder la complacida sonrisa que sus labios presumían, y honestamente, Jonghyun lo prefería de aquella manera.
“Bueno, quizá deba confesar que– fue el mejor día de San Valentín de mi vida.” Jonghyun confesó, mientras que un ligero rubor trepaba por sus mejillas. Kibum pensó en hacer un comentario burlón, pero la sinceridad e incertidumbre que Jonghyun demostraba en sus pupilas le hizo tragarse sus palabras. Se quedaron en silencio por unos segundos, Kibum sosteniendo los brazos de Jonghyun gentilmente.
“...Me alegra que pienses así.” Respondió con una voz suave, mirando directamente a los ojos del mayor, que se enfocaban en todos lados menos en su rostro. Regresó a un costado de Jonghyun y continuaron caminando. El mayor estaba avergonzado, y lo más gracioso era que no lograba conseguir un medio por el cual disimularlo. “La verdad, fue la primera vez que salgo con alguien de esta manera– ya sabes, de San Valentín” Comentó Kibum, intentando disipar el silencio que volvía a envolverlos.
“Te salió muy natural todo, si quieres mi opinión.” Comentó Jonghyun, con un tono burlón pero sin ánimos de molestar al menor. Kibum lo empujó por el hombro, haciendo que el castaño se saliera de la línea en la que estaba caminando.
“¡Incluso pagué por tu comida, deberías estar más agradecido!” Se quejó el rubio, fingiendo indignación. Jonghyun le sacó la lengua.
“Entonces, ya estamos a mano. Me debías los hot cakes que te preparé.”
Continuaron bromeando hasta que llegaron de nuevo al acceso por el que habían llegado.
En el tren iban sentados en uno de los asientos de en medio, junto a los tubos de las puertas de acceso. El vagón iba parcialmente vacío, a excepción de un par de familias que se encontraban en el lado opuesto a ellos. Iban compartiendo los audífonos del iphone de Kibum, escuchando una de las canciones del disco más reciente de Lady Gaga. Jonghyun no era precisamente un fan, y difícilmente lograba pescar algunas palabras en inglés y su significado, pero la canción era demasiado pegajosa.
Cuando salieron de la estación, las calles se encontraban únicamente iluminadas por las lámparas de cada esquina, y por uno que otro local que aún estaba abierto. Hacía frío, y Jonghyun sentía la gélida brisa nocturna colarse por la delgada mezclilla de sus pantalones. Kibum tenía los brazos cruzados frente a su pecho, escudándose de los repentinos soplidos del viento.
Jonghyun pensaba en la manera correcta de agradecerle al menor lo que había hecho por él; sin embargo, se encontraba escaso de palabras en aquél momento, pues sólo era capaz de oír el errático sonido de sus latidos, incesantes.
“Deberíamos salir de nuevo, no sé, la próxima semana.” Comentó el rubio, como si le hablase al aire mismo. Jonghyun asintió, mientras una cálida tranquilidad se esparcía por su pecho.
“Deberíamos de salir más seguido.” Corrigió Jonghyun.
“Deberíamos salir.” Kibum pronunció aquellas palabras sin realmente pensarlo, y fue como si su mente hubiese logrado deslizar una carta por debajo de la puerta de su cabeza. Cubrió su boca con su mano, y con los ojos redondos e incrédulos, miró a Jonghyun para ver su reacción. Había sido brusco, pues aquella no había sido para nada la idea al sacarlo a una cita.
Esperaba que Jonghyun mostrase una mala expresión; que frunciera el ceño o que se viera decepcionado. Al contrario, recibió en respuesta una audible carcajada.
“Eso suena mejor.” Jonghyun creía que Kibum se veía adorable así, anonadado ante sus propias palabras, con las mejillas y orejas rojas como cerezas. “Yo diría que sí.”
“No quise decir eso.” Kibum argumentó, clavando los ojos en el piso, acelerando su paso sobre la acera.
Jonghyun lo dejó seguir caminando por delante por unos minutos, en lo que la sangre regresaba a su lugar de origen y el rostro de Kibum perdía la coloración rojiza que, incluso bajo la tenue luz de las lámparas de la calle, era notable. Una vez más se encontró a sí mismo pensando en cómo sería si las cosas se tornaran diferentes. Qué sucedería si por azares del destino, terminaban saliendo juntos y formaban una nueva historia; el estudiante de artes y el aspirante a músico. Se preguntó, también, qué pasaría si las cosas no resultaban como las había planeado y su relación terminaba de un día para otro, si el afecto se deterioraba día con día, o si simplemente no era lo que ellos buscaban.
Se imaginó cómo sería sostener la mano de Kibum, mientras nadie miraba. Pensó que, si estuvieran juntos, tendría una carpeta especial en su celular dedicada a las selcas de ambos. Se preguntó cómo sería despertar y mirar a un lado, y encontrar el imperturbable rostro de Kibum junto a su almohada.
Jonghyun se sentía dispuesto a esperar a vivir aquello en carne propia. En eso, mientras se deslizaba por el laberinto de anécdotas creado en su imaginación, Kibum detuvo el paso abruptamente. Él se encontraba a unos cuantos metros más adelante sobre la acera.
“¡Yah! ¡Apúrate, Jjong!” Chilló el rubio, golpeando el suelo con un pie. Jonghyun le sonrió en respuesta, y trotó hasta estar junto a él una vez más. “Si me cierran el dormitorio, Kim Jonghyun–“ comenzó Kibum, con un tono amenazador. Jonghyun encogió los hombros, totalmente despreocupado.
“Organizamos una pijamada de San Valentín toma 2.” Sugirió, como si fuese la lógica más normal del mundo. Kibum rodó los ojos, sin preocuparse por la sonrisa que le vino a la cara.
Jonghyun encontraba gracioso el hecho de que todo aquello había sucedido gracias a un desafortunado evento en el día de los enamorados; había conocido a Kibum en una fiesta, a donde se desahogaba y limpiaba las heridas en un estado no muy sobrio, y Kibum había sido la única persona que se había tomado el cargo de reparar las pequeñas rupturas de su corazón. Jonghyun llegó a la conclusión de que no había perdido nada, y supuso que Kibum tenía razón: cuando se trata de demostrar afecto, no es necesario hacerlo en un único día en cierto mes del año.
No, de hecho, hay tiempo de sobra.
Cupido ♥
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Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Mención especial~~~
Unintended por Dayan
La historia:
Unintended por Dayan
La historia:
- Spoiler:
- Titulo: Unintended
Autor: Dayan
Género: songfic (creo XB)
Couple/pareja: 2min
Nota: Hello, bueno creo que este fic esta peor que el del año pasado, la verdad no es muy bueno (además que no tiene nada que ver con el 14 de febrero, me pregunto por qué lo envié DX), perdón por eso, es la primera vez que escribo un songfic, espero haberlo hecho medio decente, la canción es Unintended, artista Muse, la verdad es canción me gusta mucho XD.
UNINTENDEDGiro una y otra vez en mi cama mientras escucho el agua correr dentro del baño, no quiero pero mi vista cae en el buro a lado derecho y ahí está el resplandeciente y pequeñísimo recordatorio de que nunca será totalmente mío.
Un suspiro sale de lo más profundo de mi pecho y una lágrima traidora recorre mi mejilla, me tiro sobre mi desnuda espalda apretando ojos y puños antes de navegar entre mis recuerdos… de nuevo…“Tú podrías ser mi imprevista-“Taemin… te toca limpieza en la terraza…”- grita mi jefe, tomo lo necesario y corro torpemente hacia fuera, hoy es el día mas agitado de todo el año; 14 de febrero, el restaurante en el que trabajo, hasta hace unos minutos estaba abarrotado de parejas demostrando su amor, ahora luce casi vacío. Recojo los pocos platos que quedan, doblo los manteles rojos y junto en un jarrón todos las rosas rojas que se salvaron, ya casi está terminado cuando recuerdo la “mesa especial”. Me dirijo veloz hacia ella, pero a mitad de camino me detengo, en la mesa aun permanece un joven de ojos grandes y piel morena que observa tristemente el cielo nocturno con una copa de vino en su mano, de seguro debe estar pasándolo muy mal, la mesa fue reservada para dos y yo solo veo uno.
elección para vivir mi vida extendida
tú podrías ser el único que siempre ame…”
No quiero, pero debo acercarme –“…disculpe señor…”- digo despacito, el hombre gira hacia mi –“lo sé… ya van a cerrar…”- el desconocido se levanta –“no importa… no importa… toma…”- sujeta mi mano y me entrega un celular –“no quiero saber nada de ella…”- realmente se ve triste, por lo que intento decir algo –“señor… no puede…”- el hombre se detiene y pone su mano en mi hombro –“claro que sí… já que gracioso… combinas a la perfección con el día…Taemin”- alborota mi cabello y se aleja, no puedo evitar contemplar su amplia espalda mientras se aleja arrastrando sus pasos, luego un mechón de mi cabello cae sobre mi frente, lo observo y sonrió, es rojo, rojo como el día de San Valentín.
Un especie de mambo resuena por todo mi departamento, no es mi celular lo sé, no quiero levantarme por lo que solo me remuevo entre la cobijas antes de recordar el pequeño incidente del día anterior, me incorporo y busco en la mochila el aparato que dejaron de propina –“bueno… si… si… claro que no… no lo necesito… no se preocupe… mmm… creo que si… ok… si… ahí estaré…”- el dueño desea recuperarlo como era obvio, ahora que lo pienso quizás debí dejar el celular en el restaurante eso era lo más lógico, pero algo en mi corazón me lo impidió y ese mismo sentimiento me pide a gritos que lo entregue a su dueño en persona.“Tú podrías ser el que escuchará-“buenas noches señor… aquí tiene… intacto… y con su crédito completito…”- le extiendo el aparato blanco, él lo toma y hace una pequeña reverencia –“con su permiso señor…”- no espero respuesta estoy dispuesto a retirarme, cuando una duda aterriza en mi cabeza –“señor… ¿cómo sabe mi nombre?…”- el desconocido sonríe amplia, divinamente –“por el gafete del restaurante…”- contesta y me siento estúpido –“ah! Soy un tonto”- golpeo mi frente –“no lo creo, solo eres distraído… el tonto soy yo… por creer que… soy un estúpido…”- la sonrisa encantadora desaparece, dejando en su lugar una mueca de tristeza que rompe el alma –“ah? ¿Tienes tiempo?…”- pregunta tímido yo solo asiento con mi cabeza.
mis más profundas inquisiciones
tú podrías ser el único que siempre ame…”
-“… y por eso… por eso me dejo como perro…”- apura otro vaso de alcohol después de terminar su historia –“Minho no creo que seas un tonto… simplemente la quieres…”-mis palabras salen un tanto atropelladas –“mírame… mírame Minho… no tienes de que preocuparte… todo se arreglara… te perdonara… ya verás…”- trato de darle ánimos, de hacerle ver que todo está bien y al parecer lo logro, él se ha tranquilizado y ahora observa fijamente mis ojos, tanto que no puedo evitar perderme en los suyos, siento como su corazón se tranquiliza –“gracias pequeño…”- dice en un murmullo y sin previo aviso me jalo hacia él dándome un abrazo que siento tan cálido como los primeros rayos de sol, de pronto he dejado de escuchar el bullicio del bar, todo se ha ido y tan solo el fuerte palpitar de su corazón invade mis oídos, sin querer mis manos se aferran a su espalda y ambos soltamos lagrimas, que extraña reacción ante un desconocido.“hubo quien desafió primero-“pero en que estas pensando Taemin!...”- mi autoproclamada madre me gritaba –“en nada Key-umma, en nada… más que él…”- le doy la espalda, pensando aun en la confesión que le acabo de hacer –“minnie… ¿sabes en lo que eso te convertiría?...”- me pregunta mientras se acerca a mi –“si… umma lo sé… pero no importa… no importa…”- siento la mirada de Key fija sobre mí, yo tan solo puedo seguir pensando en Minho y su probable reacción –“minnie… supongo que no hay nada más que decir…”- observo a mi amigo extrañado –“… no estoy del todo acuerdo con tu decisión, pero si esta te hace feliz adelante… jamás había visto ese brillo en tus ojos antes, es el mismo que yo veo todo los días en mi precioso puppy y creo… que es el mismo que veo en los ojos de Minho cuando esta cerca de ti…”- mi curiosidad crece aun mas –“es amor… simple amor…”- me regala un abrazo y me despido de él.
todos mis sueños y todo mi equilibrio
ella nunca podría ser tan buena como tu…”
Llego a mi departamento y lo limpio lo mejor que puedo Minho me visitará, dice que tiene algo muy importante que decirme y que un bar no es lo adecuado. Hace tanto tiempo que deseaba visitara mi casa, tenemos tanto tiempo en este juego de indirectas, de roces, caricias disimuladas que hoy me he decidido a confesarle mi amor. El timbre suena y Minho aparece tras la puerta –“hola Taeminnie…”- me da un abrazo fuerte y yo aspiro su aroma –“Hola… Minho…pasa…”- se adentra escaneando cada rincón y riendo de manera encantadora –“wow!... como puede alguien que es un desastre en el trabajo, ser tan ordenado en casa…”- se deja caer en un sillón –“ya… no te burles de mi…”- si por algo era reconocido en el trabajo, aparte de mi cabello rojo, era mi torpeza, siempre tropezando, tirando platos y golpeando comensales, tenia suerte de aun tener trabajo –“me quieres impresionar…verdad?...”- me había atrapado, haría cualquier cosa por él –“claro…”- digo en un murmullo, que estoy seguro pudo escuchar ya que le vi sonreír de lado –“quieres cenar Minho…”- le tomo de la mano y le jalo hacia la cocina, pero me detiene y me hace quedar frente a él –“mírame… mírame Taemin… que ves en mis ojos…”- me quedo paralizado observándolo, mi pecho comienza a agitarse y mis labios se entreabren, sin pensarlo mi boca ataca la suya presionándola ligeramente esperando su reacción de asco, pero no ocurre así, Minho ladea su rostro ligeramente y corresponde el beso, puedo sentir como sonríe antes de pasar una mano por mi cintura y otra por mi nuca, mis brazos rodean su cuello acercándonos más, saboreando el momento, este divino momento en que por primera vez sentimos los labios, la piel del otro en un plan diferente al de error en proximidad.
Una vez que nos separamos menciona las palabras que hace tanto tiempo he estado esperando –“Taemin… Taeminnie… yo…te quiero… como un loco…”- de nuevo me regala un tierno beso –“me… he enamorado de ti… y quiero estar contigo…”- sonrió feliz -“pero tú sabes… que yo…”- no quiero escuchar mas, poso mi dedo índice en sus labios –“lo se Minho… lo sé y no me importa… porque yo te quiero…te quiero…”- sujeto su mano izquierda y la acaricio lento –“…y no me importa tu situación… yo solo quiero estar contigo no importa el titulo que tenga…”- me envuelve de nuevo en sus brazos y yo me dejo llevar por su calidez –“gracias Taemin… gracias por aceptar… te prometo que en cuanto pueda…”- me separo de él acallándolo de nuevo –“Minho… escucha, no te pido más de lo que tú me puedas dar… “- estábamos en medio de la habitación abrazados balanceándonos de un lado otro lentamente, pensando en lo que vendría para nosotros, pero felices por estar juntos…“tú podrías ser mi imprevista-“adónde vas minnie…”- me preguntaba Key mientras tomaba mis maletas y le obligaba a salir del departamento –“Minho salió de viaje… y voy a encontrarme con él…”- puse el cerrojo –“minnie…”- de nuevo ese tono de reproche en su voz –“por favor no me digas nada… ya todo me lo sé de memoria… tu dijiste que esto era amor… o no?... pues déjame disfrutarlo…-“ tan solo suspiro y me dejo partir.
elección para vivir mi vida extendida…”-
Este era el viaje numero un millón en todo el tiempo que llevaba a lado de Minho, amaba esos días por que era cuando nos sentíamos más libres, descubríamos cosas interesantes de nosotros, como el que Minho odia perder en cualquier juego, incluso “piedra, papel o tijera”, que tengo fobia a los insectos verdes, que amo la leche de fresa y que Minho puede permanecer minutos sin parpadear, cosas simples, cosas odiosas, cosas imperceptibles, cosas raras, cosas que odiar del otro, defectos, virtudes, cualidades, errores, pero sobre todo motivos para amar al otro, ambos éramos felices, sin interrupciones, sin sombras, ni puertas con seguro, como si viviéramos un muy privado cuento de hadas, que tenía su fin no a las doce de la media noche, si no cuando regresábamos a casa.
Porque en casa todo es diferente, todo es oscuro, secreto, sellado, tan solo visitaba mi departamento en contadas ocasiones y a veces demasiado rápido, pero por muy decepcionante que pareciera para cualquier otro, para mi… para mí eso era más que suficiente.“…tú deberías ser el único a quien siempre amaré…”-“Taemin… cambiaste de shampoo?...”- pregunta Minho después de salir de la ducha, trayéndome de nuevo al departamento y dejando mis recuerdos en el pasado –“si…”- le digo y me recorro en la cama para que él se siente a mi lado –“por qué?... me gustaba el anterior… huele a ti…”- sus palabras me gustan y me duelen al mismo tiempo, tomo mis piernas entre mis brazos y apoyo la cabeza en las rodillas –“pues… porque dices que ella esta sospechando… porque hueles diferente… supuse que era por mi shampoo…”- ambos desviamos la mirada por segundos, antes de iniciar un beso intenso que termina en ternura –“Taemin… te amo… lo sabes verdad…”- besa mi frente, yo solo asiento –“en serio te prometo, te juro … que en cuanto pueda dejare a mi esposa… tu sabes lo mal que me llevo con ella y que si seguimos juntos es por mi pequeña…”- me abraza y yo sonrío, recuerdo lo que Key me había dicho, era exactamente las misma palabras que Minho había mencionado hacia segundos, aquellas lindas frases que los hombres casados dicen para tener una aventura, mentiras que las tontas victimas creemos.
Pero yo se que Key está equivocado, los años que llevo con Minho gritan lo contrario, estoy seguro que de haberlo conocido primero yo sería el absoluto dueño de su corazón, pero desafortunadamente no fue así, él ya tenía una esposa y una pequeña, yo lo sabía, siempre lo supe, pero aun así decidí embarcarme en esta aventura, aun así decidí convertirme en su amante, porque lo amo tanto que prefiero tenerlo de esta manera que no volverlo a ver nunca. Era mejor vivir en las sombras, esperar cada día 14, ser silencioso e incluso comprar el mismo shampoo que ella compraba, si mi recompensa era una caricia, un beso, un te amo más sincero del que le pudiera dar a ella en toda su vida, eso para mí hacia que valiera la pena.
-“Minho… ya te he dicho un montón de veces… yo jamás te obligare a nada…”- le sujete hundiendo mi cabeza en su pecho –“lo sé minnie… pero es algo que yo quiero hacer… quiero estar contigo siempre… pero no sabría como explicarlo a mi hija… Yoona no me importa…”- besa mi rojo cabello, ese que le recuerda eternamente el 14 de febrero –“lo sé… no te preocupes yo te esperare… toma…”- alcanzo la sortija de bodas y la acomodo en su lugar con delicadeza –“vete… es tarde…”- le dio un último beso antes de que se comience a vestir.
Una vez en la puerta del departamento Minho vuelve a reafirmar su promesa de que algún día estaremos juntos sin necesidad de escondernos, estoy consciente de que es casi imposible pero me gusta escucharlo, me gusta hacerme ilusiones e imaginar que es todo mío –“hasta luego Minho… te amo…”- desaparece por la escalares.
Con su aroma aun flotando en el ambiente me dirijo a la ventana en espera de verlo salir a la calle en busca de su auto, segundos más tarde aparece alto, hermoso, como siempre, abre la puerta del conductor y antes de entrar gira su rostro hacia mi ventana y me observa fijamente, pongo mi mano en el vidrio y sonrío, el también lo hace y casi por instinto su mano derecha juguetea con el anillo en su mano izquierda, eso me hace recordar sus palabras y querer más que nunca que se vuelvan una linda realidad -“Taemin te juro… te juro, que pronto tu nombre estará grabado en esta argolla… después de las palabras Te amo…”-“Estaré allí en cuanto pueda
pero estoy ocupado reparando
pedazos rotos de la vida que tenía
Antes que tú…”
Cupido ♥
Todos <3
62
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
❥ Los Premios
Los siguientes premios serán enviados o entregados a los ganadores.
1° Lugar
♥ Lamparita de SHINee
Descripción: Una de las lamparitas de SHINee, esta es la versión B.
Descripción: Camisa oficial de SMTOWN <3
Descripción: NO DATA
Mención especial~~~
♥ 샤이니 lightstick
Descripción: Lamparita de SHINee.
Los siguientes premios serán enviados o entregados a los ganadores.
1° Lugar
♥ Lamparita de SHINee
Descripción: Una de las lamparitas de SHINee, esta es la versión B.
- Spoiler:
Foto con luz y sin~ lol
Click en la imagen para verla mas grande.
Descripción: Camisa oficial de SMTOWN <3
- Spoiler:
- Foto con luz y sin~ XDDD
Descripción: NO DATA
- Spoiler:
Mención especial~~~
♥ 샤이니 lightstick
Descripción: Lamparita de SHINee.
- Spoiler:
- Foto con luz y sin~ lol
Cupido ♥
Todos <3
62
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
MUCHAS GRACIAS A TODOS LOS MIEMBROS QUE PARTICIPARON.
Se despide Cupido, hasta el próximo año~
Se despide Cupido, hasta el próximo año~
Cupido ♥
Todos <3
62
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Awwwwww fleicidades a las ganadoras (?) ya me lo leo now!!!!
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
OwO felicidades a las ganadoras ..sus historias estan geniales !!! De verdad me encantaron xP
lurysandry121
♥Jonghyun♥
987
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
wow que genial!!!
felicidades a los ganadores!!!
buen trabajo XD
felicidades a los ganadores!!!
buen trabajo XD
Latefanya
Taemin
803
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
MUCHAS FELICIDADES A LAS GANADORAS!!!!!
isashawol
온유 y 태민 ♥
544
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Felicitaciones chicas!!!
OMG!! un jongkey y un 2min!!! *3*
me los leeré!! xD
OMG!! un jongkey y un 2min!!! *3*
me los leeré!! xD
Janess
♥♥Minho♥♥SHINee♥♥
1470
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
¡Wow! Me gustaron mucho los fics.
Felicitaciones a ambas, se lo merecen por completo. ♥~
Y..y...quiero más del primero -3-~
#Jongkey shipper mode on (?) xD!
Que bonitos regalos C:!
Felicitaciones a ambas, se lo merecen por completo. ♥~
Y..y...quiero más del primero -3-~
#Jongkey shipper mode on (?) xD!
Que bonitos regalos C:!
Última edición por 'Dara el Sáb Mar 10, 2012 3:57 pm, editado 1 vez
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah omg
sob ok no me lo esperaba sdljflgkñ;ñfl un lightstick uhguhgu siempre he querido uno ;; y jkshdlkf el premio sorpresa #notamused pero bueno ok omg gracias uh a los jueces ? no sé a quién debería agradecer ; A ; supongo que gracias a los organizadores y así ;; realmente me da gusto que les haya gustado el fic, y pues que lo hayan escogido como primer lugar!
guhguhdflgñ
también felicidades a la mención especial!
lkfldglç dflkgñ
sob ok no me lo esperaba sdljflgkñ;ñfl un lightstick uhguhgu siempre he querido uno ;; y jkshdlkf el premio sorpresa #notamused pero bueno ok omg gracias uh a los jueces ? no sé a quién debería agradecer ; A ; supongo que gracias a los organizadores y así ;; realmente me da gusto que les haya gustado el fic, y pues que lo hayan escogido como primer lugar!
guhguhdflgñ
también felicidades a la mención especial!
lkfldglç dflkgñ
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
felicidades a ambas~ ^^
leeré los fics oh si~
@Dayan yo sé que tu escribes bien bonito ; ;
y ni sabía que estabas participando xD
muchas felicidades ^^
-le hace fiesta-
que bonitos regalos ; ;
SMF siempre me sorprende ^^
leeré los fics oh si~
@Dayan yo sé que tu escribes bien bonito ; ;
y ni sabía que estabas participando xD
muchas felicidades ^^
-le hace fiesta-
que bonitos regalos ; ;
SMF siempre me sorprende ^^
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
muchas felicidades!
bren de minho
minho♥ y jonghyun♥♥
3885
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
muchas felicidades a la ganadora, me gusto mucho tu historia, muy bonita y con un lindo significado del san valentin.
tambien muchas felicidades Dayan, me encanto, el fic es tan tuyo, tiene ese lindo amor que siempre sufre, que te distingue.
muchas felicidades chicas
tambien muchas felicidades Dayan, me encanto, el fic es tan tuyo, tiene ese lindo amor que siempre sufre, que te distingue.
muchas felicidades chicas
Noreri94
minho
1304
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
waaaaa >u< muchas felicidades a las ganadoras!!!!!
seguro sus fics estan geniales n.n y los leiria ahorita mismo de noser porque sufro de un severo caso de "fff" = fanficfobia ._. ... TAT
ok, igualmete muchas felicidades ^w^
seguro sus fics estan geniales n.n y los leiria ahorita mismo de noser porque sufro de un severo caso de "fff" = fanficfobia ._. ... TAT
ok, igualmete muchas felicidades ^w^
Taeminfangirl
Taemin ❤u❤ , ahhh!! ya no puedo negarlo!!! Onew tambien te amo!!!
1830
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
MUCHAS FELICIDADES!!!! ME ENCANTARON LAS HISTORIAS XD!!!!
CONGRATULATIONS!!!
CONGRATULATIONS!!!
kasumi93
Minho ♥.♥
119
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
felicidades! muy bonito el tiempo y esfurzo fue recompensado!
que bonitos obsequios y bien merecidos!
que bonitos obsequios y bien merecidos!
CrazyLuUup
Taemin
370
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Ohhhh!!!!
*Brinca por toda la oficina*
Jajajajaja la verdad no pensé que ganaría algo , la historia en verdad no me gusto nada, siento que pudo haber quedado mejor, pero con un límite de 5 hojas no se puede hacer mucho y menos si estas amargada como yo jajajajajajajajaja Gracias por esta mención especial que la verdad no creo merecer, *vuelve a saltar como loca*
Muchas felicidades a la ganadora, yo amo el jongkey!!!!!!!
*Brinca por toda la oficina*
Jajajajaja la verdad no pensé que ganaría algo , la historia en verdad no me gusto nada, siento que pudo haber quedado mejor, pero con un límite de 5 hojas no se puede hacer mucho y menos si estas amargada como yo jajajajajajajajaja Gracias por esta mención especial que la verdad no creo merecer, *vuelve a saltar como loca*
Muchas felicidades a la ganadora, yo amo el jongkey!!!!!!!
Dayan
온유
1169
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
oh ni me había dado cuenta de esto!
aahh tendré que leer a los ganadores ^^
aahh tendré que leer a los ganadores ^^
DubuMa
Lee Jinki
4504
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
¡Wow!
Amé las dos historias, personalmente me gustó más la segunda.
De todas maneras son increíbles.
¡¡¡¡¡¡¡Felicidades a ambas y muchas gracias!!!!!!!
:MUA:
Amé las dos historias, personalmente me gustó más la segunda.
De todas maneras son increíbles.
¡¡¡¡¡¡¡Felicidades a ambas y muchas gracias!!!!!!!
:MUA:
'~' Always Taemin'~'
^-^Taemin^-^
4
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
muchas felicidades a las ganadoras SE LO MERECEN :3
JaneMin
Choi Minho♥
3737
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Jajaaja, no voy a mentir, esto me rompió un poquito el corazón, pero me alegra haber participado n.n No he leído los oneshots, pero estoy segura de que son muy buenos, y me pone feliz el saber que dos hermanas shawols ganaron por elección de los jueces. De seguro Gwiboon-ssi va a verse preciosa con su playerita y su lightstick. ¡Tendrás que subir una foto! x)
¡Felicidades a las ganadoras! El siguiente año volveremos a participar, ¿cierto? n.n
¡Felicidades a las ganadoras! El siguiente año volveremos a participar, ¿cierto? n.n
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Tranquila nena esté es el del año pasado, se que las historias también serán geniales esté
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Chicas si saben que este es el del año pasado?, no se desesperen, ahorita subimos resultados!!!!!!!!!!!!!!
Cupido ♥
Todos <3
62
Re: Ganadores Concurso historias SHINee Valentín 2.0
Felicidades a as 2 ganadoras!!!
Pude enviar mi historia pero por cosas de la vida no pude u.u....
Felicidades
Editado: Oki Oki ya entendi
Pude enviar mi historia pero por cosas de la vida no pude u.u....
Felicidades
Editado: Oki Oki ya entendi
Última edición por Kyuhaemin el Vie Mar 01, 2013 10:46 pm, editado 1 vez
Kyuhaemin
Minho
14
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