Sólo por ti]

Tipo: OneShot
Género: Hurt/Comfort
Pareja: OnKey, JonHo.
Summary: Universo alterno. Sólo por ti volvería a sufrir si eso significa verte sonreír.

Creo que deberíamos terminar.

Su mente le repetía esa frase cada 10 minutos, llevaba escuchándola durante 1 mes y aún así recordaba perfectamente, el sonido de esa voz…

-Vamos Kibum, necesitas salir- La voz de su mejor amigo le llegó desde el otro lado de las cobijas, gruñó un poco y se volvió a acomodar asegurándose que ningún rayo de luz se filtrara entre los bordes del ‘capullo’ que había formado con sus cobijas.

-Kibum, no hagas preocupar más a tu familia- aunque no quería sabía que su amigo tenía razón, llevaba intentando disimular su dolor frente a su familia durante un mes, pero había veces en que no podía mentirse ni a sí mismo, esos días era cuando lo veía con él.

Salió a regañadientes, Onew ya tenía en sus manos una muda de ropa suya, sin decir ni una palabra la tomó y comenzó a cambiarse, ignorando por completo el sonrojo de su mejor amigo.

-Listo, vamos- sin esperar respuesta, tomó su mano y salieron juntos de su cuarto.

-Debes al menos desayunar, traje pollo- la emoción que tenía su voz al hablar sobre su comida favorita hizo que sonriera de lado, era gracioso ver las reacciones de su mejor amigo a lo que él llamaba ‘un manjar de los dioses, un ave directo del paraíso’

-¿Lo trajiste para mí o para ti?- le cuestionó dirigiéndose hacia la cocina, en donde había un pequeño comedor.

-¡Para ambos! No hay nada mejor que compartir pollo con un amigo- le dijo soltando su mano y mostrándole una sonrisa sincera, mientras lo sentaba en el comedor- hoy te consentiré.

-¿Y eso?- levantó una ceja, mostrando incredulidad en sus ojos castaños.

-Sólo… creí que te vendría bien un poco de mimo- le contestó en un susurro, dándole la espalda mientras acomodaba el pollo en platos.

-¿Y empiezas dándome de desayunar pollo?- le dijo con sarcasmo el más joven.

Onew soltó una carcajada y se encogió de hombros- ¿Qué quieres que te diga? hay cosas a las que no puedo renunciar- Dejó un plato en frente del rubio y se sentó para empezar a comer.

-Buenos días- su madre entró y su rostro mostró un gran alivio al ver a su hijo mordiendo la pieza de pollo que Onew le había servido.

-Buenos días- respondieron ambos.

-Hoy saldremos todo el día, hijo, tu padre tiene una junta en Gwangmyeong y no creo que regresemos hasta mañana –Kibum sólo asintió mientras masticaba, su mamá se sirvió una taza de café- ¿Onew te importaría quedarte con él esta noche?

-¡Mamá!- protestó antes de que el mencionado pudiera responder- No soy un niño y por lo tanto no necesito un niñero.

Su mamá suspiró- Lo sé, es sólo que me sentiría más tranquila si alguien te acompaña- Kibum vio la mirada de preocupación de su madre y la comprensión alcanzó su mente, su familia seguía preocupada por él, se sintió terrible.

Se levantó de la silla y abrazó a su madre- Lo siento. Prometo superarlo.

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Llevaban cerca de 2 horas en el centro comercial, hasta el momento habían estado comprando una que otra prenda de ropa – bueno, Kibum había comprado más de una que otra docena de prendas - y platicando. Onew se sentía más tranquilo, después de esa mañana, Kibum sonreía con sinceridad, y la sombra de la tristeza en sus ojos casi había desaparecido.

En el centro comercial había muchos jóvenes, era normal, estaban en verano y muchos chicos aprovechaban sus vacaciones y claro, las rebajas de las tiendas.

-Vayamos a comer, me estoy muriendo de hambre- Ambos se dirigieron a la zona de comidas.

Kibum estaba frente a un lugar de comida rápida viendo el menú. Mientras Onew se había dirigido al Kentucky de la zona de comidas.

-¿Qué voy a pedir?- Una voz le llegó por detrás, en realidad esa voz que lo había estado torturando durante el último mes.

Kibum se volteo y frente a él se encontraba un joven de más o menos su edad y unos centímetros más bajo que él.

-Key- le dijo incrédulo al encontrarse con él y el recuerdo de aquél fatídico día lo golpeo.



Ambos caminaban por el parque tomados de la mano.

-Creo… que deberíamos terminar.

-No juegues con eso Jonghyun- le dijo frunciendo el ceño.

-Key, yo no estoy bromeando, de verdad creo que no…

-¡NO! No puedes terminar conmigo- las lágrimas se agolparon en sus ojos- ¿Ya no me amas?

El más bajo miro hacia el suelo sin ser capaz de mirarlo a los ojos- No, yo estoy enamorado de alguien más- Alzó la mirada para que el castaño pudiera ver la verdad en sus ojos.

La realidad de esas palabras lo aturdió- Bien, terminemos- le dijo con voz gélida y se alejó con la cabeza en alto, dándole la espalda, mientras se negaba a dejar que las lágrimas recorrieran sus mejillas, una vez que encontró un lugar seguro entre los árboles se permitió mostrarse débil.

Era obvio que él no lo había seguido, así que no había marcha atrás tampoco.



Después de eso Kibum les había prohibido a todos sus conocidos volverle a llamar Key, pues había sido un apodo que él le había puesto, también había decidido cambiar, así que lo primero que hizo fuer cortarse el cabello y pintárselo de rubio. Ninguna de estas cosas lo habían hecho sentirse mejor y cada vez que veía en el espejo su nuevo reflejo, sólo recordaba la razón del porqué lo había hecho y eso era la peor parte. La mejor parte era que Jonghyun no sabía de su cambio, así que cada vez que lo veía no lo reconocía.

-Kim - dijo sin ninguna emoción en la voz.

-¿Dino? Ya decidí que voy a pedir- un chico más alto que Kibum se acercó y tomó de la mano al más bajo.

-Minho…-susurró su novio.

El mencionado volteó hacia enfrente, que era hacia donde la mirada de su novio se dirigía- Oh, Key.

Kibum lo único que sintió fue ira recorriéndole por las venas ¿Por qué su novio tenía que haberse enamorado de su mejor amigo? ¿Cómo era posible que él se hubiera pasado el último mes como un zombie y ellos eran tan felices?

-Choi, apreciaría de ambos que no me llamen con tanta… confianza, al fin y al cabo ya no somos nada.

-Yo… lo siento- sabía que esa disculpa de Jonghyun no se refería a su nombre, sino a todo lo que había ocurrido en el pasado.

-¡Kibum! Ya ordené en el Kentucky ¿no te molesta, verdad?- Onew no se había percatado de la presencia de ambos pelinegros, Kibum soltó una carcajada ante la manía de su amigo y el hecho de que su simple presencia lo hubiera relajado un poco.

-No,- dijo y volvió a sonreírle con sinceridad, a pesar del dolor en su corazón, después se volteó hacia Jonghyun- no tienes nada por qué disculparte y si nos permites…

-¿Son novios?- la incredulidad de la voz de Jonghyun le hizo sentir la necesidad de golpearlo, intercambió una rápida mirada con Onew.

-Sí, en realidad, empezamos a salir poco después de que tú y yo termináramos- dijo esto y se acercó para tomar la mano del castaño.

Jonghyun mostró una tímida sonrisa- Me alegra que seas feliz. –El rubio no contestó.

-Tal vez sea hora de que nos vayamos Jong, se está haciendo tarde y mañana tengo entrenamiento- Minho interrumpió el incómodo silencio que se había formado.

-Tienes razón, nos vemos en un par de semanas- les dijo para después alejarse aún tomado de la mano del futbolista.

Kibum no se permitió derrumbarse, simplemente se volteó hacia Onew y le sonrió para tranquilizar un poco la preocupación de su mirada- ¿Podemos pedir ese pollo para llevar?

En todo el camino a casa Kibum no permitió que sus manos se separaran y eso a Onew no le molestó.

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Su alarma sonó exactamente a las 6 de la mañana, anunciándole el regreso a clases y a su ultimo año de escuela antes de decidir qué carrera tomar.

Se metió a bañar y sintió un nudo en la garganta, eso significaba tener que verlo otra vez, habían pasado 2 semanas desde que se había encontrado a Jonghyun y a Minho en el centro comercial. Esa noche había llorado en los brazos de Onew hasta quedarse dormido.

Se alegraba que aún le quedara él, había sido su gran apoyo, después de que su mejor amigo lo traicionará de esa manera, apuñalándolo por la espalda y no importándole si moría desangrado, Onew estuvo ahí para atender su herida y cuidarlo.

Terminó de arreglarse y se sorprendió al preguntarse si a Onew le gustaría cómo se veía.

El camino a la escuela no se le hizo tan pesado, sentía como su corazón iba dejando poco a poco el dolor.

Se sorprendió al sentir dos brazos rodeándolo y dio un leve respingo que no pasó desapercibido para su acompañante quien soltó una carcajada al sentir su reacción, a Kibum esa risa hizo que se le acelerara un poco el corazón y sonriera sin notarlo. Se giró para verlo de frente sin dejar que el abrazo se rompiera.

-¡Onew! Casi me ocasionas un infarto ¡¿En qué estabas pensando?!- hizo un puchero y a Onew le dieron ganas de nunca dejarlo ir.

No contestó inmediatamente, se acercó a su oído- Es que Jonghyun y Minho se vienen acercando y bueno, se supone que somos novios- le susurró.

Kibum alzó la vista, ignorando la sensación (que ni siquiera sabía cuál era) que le había ocasionado la cercanía de Onew, se percató de que Jonghyun los veía fijamente, volvió a bajar la mirada y se acurrucó en el hombro de su amigo- Gracias.

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Podría decir que el tener a las dos personas que más odiaba en el mundo tan cerca de él le ocasionaría un dolor increíble, pero en realidad no, las primeras semanas habían sido duras, llevaban ya un mes en clases y el tener a su amigo a su lado (literalmente se sentaba a su lado) había hecho que el dolor desapareciera.

Fingían ser novios, bueno, en realidad no, se comportaban como siempre pero todos pensaban que lo eran, pues los abrazos y el caminar tomados de las manos se habían hecho tan comunes que nadie dudaba que no lo fueran.

Kibum casi se había olvidado que Jonghyun y Minho estaban en el mismo salón (todos rondaban los 17 años, menos Onew que ya tenía 18) y todo era gracias a…

-Kibummie~- tan perdido estaba en sus pensamientos que no sintió que Onew se había acercado hasta que sus brazos lo habían rodeado- ¿en qué piensas?

-En ti- contestó con naturalidad- mientras volteaba la cara para verlo- siempre pienso en ti- soltó una leve risa y le guiñó un ojo.

La sonrisa de Onew se ensanchó y le acarició la mejilla mientras sentía cómo se acaloraba bajo sus dedos.

-Tenemos este periodo libre ¿quieres ir a caminar?

-Vamos- le dijo mientras se levantaba de su asiento y tomaba su mano.

No hablaban mientras paseaban por el jardín de la escuela, a pesar de estar en otoño, el clima todavía era cálido y placentero, bueno, así le parecía a Kibum.

Giró la mirada y se encontró con el rostro de Onew, quien sonreía levemente mientras veía un hermoso árbol de cerezos y su lluvia de pétalos, a Kibum le dio una voltereta el corazón, le gustaba Onew, no sabía desde cuándo pero era un hecho. Alentó su paso poco a poco, cuando se detuvo, Onew volteó a verlo con confusión.

Ni siquiera él sabía lo que sucedía, así que decidió hacer lo que su corazón le pedía.

Onew se sorprendió al sentir los labios de Kibum sobre los suyos, había soñado con esa sensación desde hace muchos años, desde el primer momento en que se conocieron y él le demostró que no sólo era el chico engreído que todos creían que era, sino que detrás de esa fachada existía un chico de un corazón tan puro que fácilmente podía ser destruido.

Ambos cerraron los ojos disfrutando del momento. Cuando se separaron el más joven sólo escondió su rostro en el cuello de Onew en donde se acomodaba perfectamente, avergonzado por su acto tan impulsivo.

Pero Onew dirigió su mirada al frente y lo que vio le ocasionó un gran dolor.

Frente a ellos Jonghyun y Minho estaban caminando, acomodándose aún su ropa, viéndolos con sorpresa.

“Así que fue sólo por eso, ésta es la razón por la que me besó” su pensamiento le rompió el corazón e hizo que se separara bruscamente de Kibum, alejándose a paso rápido de él, mientras las lagrimas corrían por sus mejillas.

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Llevaba un par de horas buscando sin ningún éxito, después de que lo alejara tan bruscamente, creyó que él no había querido que lo besara así que decidió alejarse e ir hacia el lado contrario, pero cuando se giró pudo ver a Minho y a Jonghyun y comprendió la reacción de Onew, simplemente tenía que encontrarlo para aclarar que no lo había hecho por despecho, claro, sería más fácil, si al menos tuviera la mínima idea de dónde buscarlo.

Recorrió de nuevo los pasillos de la escuela, cuando en el salón de música escuchó una suave voz acompañada de un piano.

Las lágrimas brotaron de sus ojos, mientras abría la puerta y se encontraba con el dueño de aquella voz. Él lo miro con sorpresa.

-Onew, yo…- su voz se quebró- lo siento, no fue por lo que pensaste, yo… -las palabras se atoraban en su garganta- tú… -el corazón de Onew empezó a latir velozmente, no era un sueño ¿verdad?

-Me gustas- dijeron ambos al mismo tiempo, Kibum sonrió con timidez, Onew se levantó del banquillo del piano y se colocó en frente del rubio, empezando a retirar las lágrimas.

-Yo, ya no puedo ocultarlo más, Kibum. Me gustas más de lo que crees, no puedo seguir con esta farsa, no puedo ser tu novio falso, ni tu mejor amigo más, lo siento, pero es todo o nada- Kibum se acercó con una sonrisa a él y lo besó.

-Entonces… lo quiero todo contigo.

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Onew suspiró por onceava vez, estaba en la sala de su casa, por suerte sus padres habían salido a un viaje familiar porque seguramente se asustarían por el escándalo que Kibum estaba haciendo en la segunda planta, buscando quien sabe qué accesorio que complementara su atuendo. Como casi siempre ya se les había hecho tarde, definitivamente iban a tener que pedir disculpas por llegar tarde… de nuevo.

Aunque ahora que lo pensaba, tal vez no debieron de haberse dormido hasta altas horas de la noche, se sonrojó nada más de pensar en lo que los había mantenido despiertos.

Volvió a suspirar mientras su rostro regresaba a su color normal.

-¡Listo! ¡Vámonos que ya se nos hizo tarde! Y ese par nos va a regañar- le dijo Kibum mientras bajaba las escaleras. Agradeciendo el tener ropa y accesorios en casa de su novio.

-¿Ah, sí? ¿Y de quién es la culpa?- le dijo mientras tomaba su chaqueta y se dirigía hacia la puerta.

-¿Pues de quién más? ¡Tuya, claro!

Onew soltó una carcajada- ¿Mía? Pero si al que se le hizo tarde fue a ti.

Ambos se encaminaron por la calle, tomados de la mano.

-No se me hubiera hecho tarde si no me hubieras mantenido despierto TÚ- se había acercado lentamente al lóbulo de su oreja dándole un pequeño mordisco.

-¡Ah! ¿Soy endemoniadamente sexy, verdad?- le dijo siguiéndole el juego.

Kibum soltó una carcajada- Tonto.

-¡La próxima los vamos a citar un mes antes!- esa voz, la voz que antes le había ocasionado tanto dolor ahora simplemente era de un amigo.

-Yo no tengo la culpa- dijo Kibum antes de que Onew pudiera decir algo.

-Disculpen, es que…

-Lo sabemos andan muy ocupados ahora que tus papás no están en casa ¿verdad?- interpeló el más alto de todos, ocasionando un sonrojo en los susodichos.

Minho y Jonghyun sólo soltaron una carcajada ante su reacción.

-Bueno, pues vayámonos ya, ¿no que se están quejando que ya es tarde?- Kibum avanzó, siendo alcanzado segundos después por su novio y seguidos por el otro par que iba unos metros atrás en su propio mundo.

-No sabes cuánto me alegra que los hayas perdonado.

Kibum le sonrió con dulzura- No podía seguir enojado con ellos, después de todo ambos son mis amigos y los quiero.

-¿Y a mí, me quieres?- habían pasado dos meses desde su declaración, Onew siempre le decía que lo amaba pero Kibum nunca le había dicho ‘Te amo’ siempre le respondía con un ‘Te quiero’.

-No, siendo sincero no sólo los perdoné porque sean mis amigos, hay otra razón, alguien me ha hecho perdonarlos, es la razón por la que sonrió y soy feliz… - le dijo mirando fijamente a los ojos- sólo por ti, lo he hecho porque te amo.

Onew lo besó demostrándole cuanto lo amaba.

-¡Hey! estamos en horario familiar.

Los cuatro rieron.

Y Kibum se dio cuenta que sólo por él volvería a sufrir si al final podía estar entre sus brazos.