Titulo: No se marchó...
Autor: DulChoc!
Género: Romance y puede que algo más, todavía no está decidido.
Pareja: JongKey
Descripción: Después de un tiempo sin verse vuelve a ocurrir, la chispa sigue viva. Tal vez sea cosa del destino, tal vez era el momento.


Capitulo 1

Un joven de cabellos rubios caminaba por las iluminadas calles mirando los escaparates de ropa que lo engatusaban. Suspiró alejándose de una tienda que mostraba mucho que desear. Fue el camino de siempre, el que ya se sabía de memoria, el que podía recorrer con los ojos cerrados.
Su vida era pura monotonía.
Abrió la puerta de su departamento y sentó en su sofá. Pensó en su aburrida vida. Oyó una bocina incómoda proveniente de la calle. Se tapó los oidos y cerró los ojos, solo podía pensar y preguntarse continuamente cuando llegaría el día en el que su vida tomaría forma.


En la misma calle, diferente casa un joven de cabello blanco sonreía al ver su nueva casa. Colocaba sus pertenencias con mucho cuidado y amor. Al acabar de colocar todo se paseó por la pequeña, pero acogedora casa. Abrió una pequeña corredera que daba paso a un fresco jardín que unas vallas interrumpían su paseo. Entró dentro de él y se sentó en una silla que había colocado allí junto con otra igual y una sencilla mesa. Sacó el móvil de su bolsillo trasero de su pantalón negro y marcó un número.
-Ya estoy aquí- dijo sonriendo a la persona del teléfono-. Hace tanto tiempo...- dijo recordando momentos vividos-. Ven, invita a los chicos y os preparo una buena comida- dijo riendo.
El muchacho con su cuerpo bien trabajado guardó el móvil y se levantó a buscar la carne que había comprado en el extranjero y salió a la barbacoa que su amigo le había regalado por la mudanza. Prendió el fuejo y comenzó a hacer la tierna carne.


Un delicioso olor a barbacoa entró por la corredera, causando al joven rubio un ruido espantoso proveniente de su estómago. Se levantó del sofá y fue a la cocina, buscando en la nevera algo que no fuera de mucho trabajo. Cogió ramen de un mueble y lo preparó. Lo tomó sentado en la mesa de su cocina decorada con mucho empeño. Al terminar escuchó unas risas que provenían del jardín y unos gritos. Fue al jardín y los vio. Un grupo de chicos y chicas hablaban entretenidos. Algunos comían una sabrosa carne, mientras otros solo hablaban y jugueteaban. Cuando el rubio iba a entrar a su casa escuchó su nombre.
-Key, ¿eres tú?- le preguntaron de espaldas.
El nombrado se giró viendo al que lo había llamado. Un joven alto y de ojos saltones. El de ojos felinos lo miró intentando saber quien era él, pero nada.
-Tú quién eres- le dije friamente.
El chico rió.
-Soy Minho, Choi Minho- agregó.
Entonces el joven de piel de porcelana lo recordó.
-¿Minho?- dijo boquiabierto.
El chico sonrió. Key se acercó a él para continuar conversando, era estúpido que se quedara hablando con él tan lejos y a la vez tan cerca.
-¿Cómo estás?- le preguntó al rubio.
-Ya ves- dijo el de mirada felina-. ¿Y tú?
Minho se rió.
-Ya ves- copió del chico.
Ambos rieron recordando su hermosa infancia. Parecía como que nunca se habían separado, como que hubieran estado juntos toda la vida.
-¿Cuánto hace que no nos vemos?- preguntó el alto.
El rubio lo pensó.
-Mmm... ¿5 años?- le preguntó asombrado.
Minho asintió.
-Cuanto tiempo- dijo tocándose el pelo castaño oscuro.
-Al final, ¿estudiaste fotografía?- le preguntó al más alto.
Éste asintió.
-¿Qué tal te fue a ti?- le preguntó-. He escuchado que te marchaste del pais a estudiar para ser diseñador.
Asintió
-Lo hice, volví hace un año y medio y aquí estoy.
Minho oyó como lo llamaban.
-Espera, que no me acordaba- se marchó y entró dentro de la casa.
El rubio parecía un estúpido esperándolo, tal vez no iba a volver, pero volvió con tres jovenes a su lado riendo.
-No me acordaba de ellos- dijo apuntandolos.
El rubio miró a el chico de cabellos castaños y sonrisa angelical, al otro que tenía una sonrisa enorme en el rostro y el cabellos castaño. Se fijó en el último, el cual sonreía y me miraba calidamente. Un cabello blanco acompañaba su hermosas facciones faciales, unos ojos de cachorro y unos labios finos y rojos. El rubio no pudo parar de verlo.
-Él es Taemin- dijo el más alto sacando del insomnio a el rubio, que al escuchar el nombre miró asombrado al señalado-. Onew-hyung- dijo señalando al chico con la gran sonrisa. El rubio sonreía de oreja a oreja al escuchar los nombres de aquellas personas-. Y Jonghyun-hyung- dijo por último señalando al peliblanco.
Jonghyun... Ese nombre hizo que el estómago del rubio se agitara.
-Él es Key- dijo señalando al rubio.
Los chicos sonrieron al oir el nombre. El menor le dio un abrazo a pesar de las vallas de madera. El más mayor le sonrió tocándole el hombro y el cachorro le alborotó el cabello como siempre se lo hacía en el pasado.
-Ha pasado tiempo- dijo el rubio.



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Les gustó?
Espero que sí, si quieren que continue diganme, lo esperooo!
:HI: 

Este es mi primer fic :$ Como veis solo ha sido de dos capitulo, pero... Espero que les haya gustado
Aviso LEMON

Capitulo 2 [Final]

Los chicos hablaron de su pasado y de lo que hicieron en la gran ausencia de 5 años. El rubio escuchó interesado la historia de sus amigos.
Taemin había estudiado baile y estaba en una gran empresa como coreografo de famosos. Onew había estudiado medicina y trabajaba en un hospital como doctor. Minho trabajaba para una gran revista como fotógrafo. Jonghyun, quien viajó al extranjero y había llegado ese mismo día, había estudiado canto y artes, pero todavía no tenía trabajo después de su llegada.

Hablaron de todo un poco. El día se pasó rápido, pero quedaron en hablar más adelante, en verse. El chico de mirada felina se quedó conversando con el peliblanco. Ambos eran vecinos. Por fin en mucho tiempo el rubio sabía que por fin su vida había terminado, y que volvería a comenzar con una nueva.

Las semanas pasaron brillantes y divertidas junto con sus amigos. Todavía sentía mariposas en el estómago cuando veía a su hyung peliblanco, pero eso le encantaba, le encantaba recordar lo que sentía en la secundaria, aunque sabía que jamás sería correspondido por un hombre que acababa de terminar con su novia en los Estados Unidos. Muchos suspiros salían de sus labios al comprobar su gran amor no correspondido o eso creía.

El chico de mirada felina tocó la puerta de la casa de su vecino favorito. El joven le abrió la puerta. Ambos se adentraron.
-Me ducho y salimos- dijo el mayor.
El rubio asintió y se sentó en el sofá. Vio su habitación que estaba con la puerta abierta, la curiosidad le pudo y entró en ella, viendo la cama hecha y ropa sobre ella. Se asomó a la ventana de la habitación que daba al jardín bien cuidado. Oyó un pequeño ruido y se giró. Vio a Jonghyun con tan solo una toalla a su cintura. Pudo ver sus perfectos músculos y su hermoso cuerpo. El deseo que tanto le costaba reprimir ahora le era imposible. Se acercó a él con pasos vacilantes pero sensuales. Entonces lo hizo besó al chico de mirada canina, el cual no se hizo de rogar y lo guió. Key se echó en la cama mientras Jonghyun lo besaba con un ferviente deseo encima de él. La camisa de el rubio salió volando de su delicado cuerpo. El peliblanco acarició su hermoso torso y con un delicado roce lamió los pequeños botones rosas de su hermoso cuerpo. El felino no pudo evitar gemir ante tal exquicites agarrándose fuertemente a la espalda de Jonghyun. Sus erecciones chocaban y causaba que el dolor aumentara. Los pantalones de el rubio desaparecieron al igual que la toalla del peliblanco. Solo una molesta tela incordiaba en su labor, la cual fue rajada por un fuerte jalón. El peliblanco besaba al rubio mientras agarraba con fuerza su hombría. Los gemidos se hacían constantes.
-Hazlo- dijo el rubio.
El mayor sonrió y no se hizo de rogar. Metió los dedos lentamente, uno a uno para no causarle daño, examinando cada parte de él con sus dedos. Era el momento, saco sus dedos y la metió despacio, un fuerte gemido causó que Jonghyun la metiera hasta el fondo, ocasionando un enorme grito de placer y dolor. Ambos sonreían mientras se besaban con un deseo descontrolado. El peliblanco agarró el miembro del de mirada felina y la masturbo. El rubio arqueaba la espalda loco de tal placer. Suspiros inundaban la habitación al igual que gemidos.
-M-me voy- logró decir el rubio entrecortadamente.
Jonghyun al escuchar eso aceleró las estocadas, quería que se corrieran a la vez, entonces así fue. Ambos cayeron rendidos. El peliblanco sobre el rubio, sonreían de oreja a oreja agitados por el ejercicio que habían hecho.
-Te amo Puppy- dijo el menor causando la sonrisa del mayor.
-Yo si te amo mi diva.
Ambos sonrieron y se dieron un beso, un beso que había marcado sus vidas.
El de mirada felina lo amaba al igual que el de mirada canina, ambos se amaban como nadie podría amar a nadie en el mundo, ellos se amaban. Sabían que el amor que tanto habían guardado, no se marchó...

wiiooooo wuwuwuaaaa fue corto pero ... tenia de todo... tantos
añ0s pasaron para que pudieran estra juntos wwiiwiiwwiwiiw :Waa: :WOW: 
saludos

wooou
que interesante, corto pero interesante xD
saludoooos!
escribe mas si? :D
bye bye