**************************************

El chico de cabello oscuro y ojos grandes iba cansado camino a su departamento, habían pasado cinco años desde que sus padres murieron y él estaba a cargo de su hermano menor, no había sido fácil para el moreno tener que lidiar con la universidad y un trabajo de medio tiempo en la biblioteca de ésta, sin embargo éste era un problema menor en comparación a lo que tenía que padecer cuando llegaba a su hogar.

-Taemin a dónde vas? – el alto iba llegando a la puerta de su departamento cuando el pelirrojo iba saliendo. -Ya regreso…- el menor iba distraído metiendo su billetera y celular en los bolsillos de su pantalón, el cabello mojado y aroma del jabón dejaban notar que acababa de tomar una ducha.-Taemin- el mayor lo tomó del brazo para detenerlo- te estoy preguntado a dónde vas? – la mirada desafiante del menor se fijó en la persona que lo retenía. -Voy a salir- dijo entredientes, en eso escuchó el claxon de un auto– con Kai… algo más? - el pelirrojo sonrió satisfecho a la mueca de molestia de su Hyung - Tae… - el alto comenzó a aflojar los dedos, sabiendo que no conseguiría nada por las malas.- Se me hace tarde… ya hablaremos no?… - dijo de mala gana.

Taemin… el moreno suspiró tirándose de espaldas sobre su cama, perdiéndose en la pintura blanca del techo de su habitación.

Recordaba el dulce rostro rosa del pequeño… tenía solo cinco años y se encontraba en una habitación del hospital junto a sus padres…

-Minho acércate, quiero que conozcas a alguien- dijo amablemente su madre, el menor estaba temeroso, por lo que su papá lo tomó de la mano y lo guió hasta la cama en donde podía distinguir un pequeño bultito de trapos que su madre rodeaba en brazos- él es Taemin, tu hermanito - dijo acercándolo a la altura del pequeño. Éste lo miraba curioso, su hermanito le habían dicho – Lo protegerás Minho? – preguntó ahora su padre, el pequeño asintió y sonrió como si entendiera la situación, pero no fue sino hasta que sus grandes ojos se toparon con los almendrados del recién nacido cuando sintió algo en su interior que en ese momento no se pudo explicar… pero se lo habían dicho… era suyo… su hermano.

Antes de hacer lo que hizo lo pensó y lo hizo mucho, sin embargo ahora parecía que no había sido la mejor decisión…

-¿Hyung sucede algo?- Taemin se preguntaba que le sucedía al pelinegro, ya habían pasado dos semanas desde que lo evitaba, al principio pensó que eran cosas suyas sin embargo los últimos días le habían aclarado sus dudas, su hyung lo evitaba, el motivo no lo sabía, pero lo averiguaría- ¿estás molesto conmigo?- seguía sin recibir respuesta por parte del pelinegro , éste se encontraba tirado en medio del sillón frente a la TV- yo…- había hecho algo mal? -¡contéstame! – ser paciente no era su fuerte y parecía que Minho estaba dispuesto a ponerlo al límite-ese maldito aparato es tan interesante!- le arranchó el control remoto y se paró en frente del televisor , justo delante del moreno; pero aun así no recibía respuesta.- ¿No piensas decir nada?- era increíble, ¿qué era lo que pasaba? – Minho… - el menor se hincó para estar a la altura del mayor y verlo a los ojos, necesitaba una repuesta. - Hasta mañana Taemin- el mayor de un tirón se levantó del sofá dejando a su hermano con la mirada perdida. -¿¡Mañana!?- el alto detuvo su rumbo. Era suficiente, él estaba preocupado por él y el moreno simplemente lo ignoraba, si no quería decirle nada, estaba bien! no iba a insistir, que se vayan al diablo él y sus problemas!- ¿mañana a qué hora Minho? ¿A la hora que me levante y ya te hayas ido? O ¿en la noche cuando ya éste dormido?!- los ojos del menor se llenaron de líquido cristalino, la cólera lo invadía, la situación era insoportable; no entendía que era lo que había hecho para que su hermano, la persona que adoraba, por la cual estaría dispuesto a dar su vida sin dudarlo un segundo, lo tratara de esa manera y lo peor es que ni siquiera le daba una explicación, ahora esa misma persona estaba ahí de espaldas, a unos pasos de él sin darle la cara, lo estaba escuchando? Acaso no se daba cuenta de que le hacía daño? –¿¡ no vas a decir nada?!- el silencio inundó el lugar, el pelirrojo bufó frustrado- si eso es lo que quieres…- Taemin pasó de largo a su habitación golpeando el hombro de quien obstaculizaba su camino, no estaba dispuesto a seguir rogando, si así lo quería estaba bien.

-Minho? … aló? – el sonido de su celular lo sacó del mundo al que se había sumergido - ¿keroro me estas escuchando? – eso era lo que no quería, escuchar, ya estaba harto de hacerlo, cansado de escuchar y no ser escuchado, él sabía que estaba mal, pero eso no significaba que dejara de sentir lo que sentía, ahora estaba haciendo lo correcto no?, eso era lo que debía de hacer no?... por qué solo no lo dejaban en paz- ¿volviste a pelear con Taemin?- Taemin… - Minho como su hermano mayor debes entender que …- su hermano…. Esas palabras rebotaban en su cabeza una y otra vez mientras Jonghyun seguía hablando, por lo que el moreno decidió partir a otra dimensión … una en la que no tenía que ocultar sus sentimientos de nada ni de nadie, una en la que podía gritarle al mundo que amaba a su hermano sin ser juzgado, una en la que Taemin le correspondiera sus sentimientos, una en la que cada despertar sea al lado de esa persona que le robaba los sueños… pero qué diablos era lo que le sucedía? Como podía ser tan idiota! Eso nunca pasaría! Era imposible! Empezando por que Taemin lo odiaba, pero era eso o seguir aparentando que nada pasaba hasta que un día ya no pudiera aguantar y el pelirrojo descubriera sus sentimientos y éstos solo causaran repulsión por él.- Minho! Por un demonio! Contéstame!!!! – la voz del mayor de los dos resonó en el silencio a través del auricular del celular- voy para allá! – estaba a punto de colgar – no es necesario que vengas hyung…- dijo con voz ronca-estoy bien… - se aclaró la garganta -y no, no me peleé con Tae… solo estoy cansado… - keroro eres pésimo mintiendo! – dijo el más bajo, el menor curvó los labios tratando de sonreír- pero no importa… porque esta noche se te olvidará todo! – hyung … yo…- nada de yo! Sabes lo difícil es que nos podamos reunir con Onew! Ni hablar! Key organizó una fiesta de bienvenida para ese adicto al pollo y si no te llevó seré castigado! … Y sabes a lo que me refiero! Paso por ti a las 9! Ahora duerme un poco por que más tarde ya no podrás! - se escuchó la risa traviesa del hyung- nos vemos keroro! – y colgó

-Hyung… Hyung!!!…- se escuchaban los sollozos de un pequeño en medio del silencio– Min- Minho Hyung… - como cada noche el pequeño Minho corría por el oscuro pasillo de la casa con una espada de luz en la mano.- ¿Dónde está Taemin!? – preguntó agitado abriendo la puerta de la habitación y mirando hacia todos lados iluminado por el juguete que tenía. - Ahí! Ahí! – Señalaba el pequeño castaño hacia su armario – Que se vaya hyung! Haz que se vaya! .- Cuantas noches pasó Minho con su hermanito protegiéndolo de aquel monstruo que interrumpía sus sueños; cuantas noches tuvieron sus padres que intentar razonar con el pequeño castaño de la inexistencia de aquel terrorífico ser, fueron las mismas noches que Taemin pedía al moreno quedarse con él, las mismas noches que compartían sueños.


-Minho~ Minho~ Despierta bello durmiente~ - durmiendo! Estaba durmiendo! O bueno… ahora estaba ignorando a la persona que trataba de levantarlo insistentemente… lárgate … solo quería decir eso, lárgate de una buena vez!... pero el alto tenía una flojera tremenda abrir la boca para decir esa sola palabra, por lo que lo dejó seguir. - Eishh!!!- al parecer el pequeño Hyung estaba frustrado? Que acaso no se daba cuenta que estaba durmiendo, odiaba que lo levantaran… y Jjong lo sabía perfectamente, sin embargo ahí estaba picándole las costillas para que se levante, cuanto deseó retroceder el tiempo y llegar a aquel instante en el que no se le ocurrió mejor idea que darle sus llaves del departamento a su Hyung! Ni que él fuera su novia, cosa que era imposible ya que él tenía mejores gustos porque… porque… diablos!!! así era como llegaba de nuevo a lo mismo...- Keroro! Te levantas? o te levanto?- se escuchó una risita- Y con una de mis más famosas técnicas?!! Tú decides! Y sabes lo que haré verdad?... Uno~.- Demonios… maldijo internamente el pelinegro…. Que no lo podían dejar en dormir! No estaba de humor para una tonta fiesta! Kibum y sus geniales ideas. -Dos~ - solo lárgate Jjong… y déjame con mi maldita vida en paz…. -Dos y cuarto~ - el más bajo sonreía maliciosamente ya que el menor se empezó a remover bajo las sábanas. -Dos y medio~ - cinco minutos, solo quería dormir cinco minutos más, estaba más que muerto…


El pelinegro se sentía rendido, después de toda una mañana de entrenamiento en la escuela, por fin podía descansar un poco; recostado en su cama Minho podía sentir como alguien irrumpía en su habitación y luego ese alguien se introducía en su cama, sabía perfectamente quien era sin embargo el cansancio lo mataba… -Minho Hyung! – el pequeño castaño rodeo con sus piernas la cintura del alto y comenzó a saltar sobre él– Hyung! Hyung! Hyung!- la cama saltaba al ritmo del menor – Despierta! Despierta! Despierta! - Taemin…- dijo arrastrando su nombre- quiero dormir…- sus ojos aún permanecían cerrados -Pero Hyung! – el mayor imaginaba el puchero que estaría haciendo su pequeño hermano – necesito que me ayudes… yo… yo… - al pelinegro aun le pesaban los párpados, pero no fue hasta que sintió una calidad respiración sobre su rostro que abrió sus ojos… Y ahí lo tenía a escasos centímetros de él, los mechones castaños enmarcándole el rostro, los ojos cristalinos y un pequeño mohín que derretiría a cualquiera. -Tae… - solo pudo decir tratando de hundirse más en la cama, cosa que fue inútil. -Hyung…- dijo con pesar el pequeño- necesito que me ayudes~ - lo tenía rodeado con piernas y brazos, el alto intento incorporarse sin embargo el pequeño de labios rosas se lo impedía- no escaparás Hyung! - Su-sucede algo? –preguntó por fin el mayor algo extrañado, el castaño asintió –la escuela?- volvió a asentir- algún curso? - el pequeño negó frunciendo el ceño algo frustrado – alguien te ha molestado!- no era una pregunta, el ceño fruncido del menor se fue aflojando y asintió – ¿quién es y qué te hizo? – Solo negaba con la cabeza… - Hyung…- el dulce aliento a leche de plátano golpeó el rostro del mayor- yo… yo… - se podía notar como las mejillas del pequeño se iban tornando rosas – yo…- adorable, era así como describía a su pequeño castaño.- Si? – el mayor incitaba a que continuara -Es que… - sin embargo tanta cercanía…-Tae… - le resultaba algo incómodo estar en esa posición-no… no… - él … él no! No podía sentirse así.- Taemin que sucede?! – porque no le decía de una buena vez que era lo que pasaba?- Hyung quiero que sea con usted! – dijo de pronto cerrando los ojos fuertemente- Eh? – el pelinegro no entendía a qué se refería el pequeño – no te ent…- No se mueva – las pequeñas manos del menor rodearon el rostro del Hyung -Pe-pero- el pelinegro veía como el pequeño rostro se iban acercando a él – Tae- no pudo terminar de hablar porque tenía aquellos finos labios rosas sobre los de él, sentía como con nerviosismo su pequeño hermano iba amoldando sus labios a los de él , y para maravilla suya encajaban perfectamente, fue un beso suave y tierno, que así como se inició terminó, no se dio cuenta en que momento había cerrado los ojos , sino hasta que tuvo que abrirlos al encontrarse sin el contacto de aquella dulce boca. - Mi primer beso Hyung…- dijo el castaño y salió corriendo de la habitación- quería que fuera con usted!- gritó desde fuera.

-Dos y tres cuartos~ oh~ keroro prepárate para el ddongchim… kekeke… - mierda! El alto perezosamente se empezó a quitar las sabanas que lo cubrían, frunció el ceño al no recordar en qué momento se había tapado, lo había hecho dormido? No le dio más importancia al asunto y terminó sentándose al borde la cama. - Hyung – seco, cortante, con los ojos rojos y la mirada furiosa el pelinegro estaba que mataba al más bajo, y éste con la mirada algo temerosa sabía que no había sido una buena idea amenazarlo, Jjong sabía que era pecado mortal levantar a aquel niño gigante que tenía delante de él, pero no podía dejarlo ahí… era su amigo, su hermano.- Minho-goon~ - el Hyung temeroso se iba acercando al enfurecido dongsaeng- ¿sabes qué hora es? – la mirada fulminante del alto lo paralizó por un momento- yo…-empezaba a tartamudear- Hyung- lo cortó el pelinegro –ok~?! Vete a dar una ducha te espero afuera~- y asi salió el mayor corriendo, su instinto de supervivencia lo obligó a salir de la habitación, sabía que no podía permanecer un minuto más en ese lugar, el alto estaba a punto de írsele encima.

Habían pasado veinte minutos y el menor llegaba a la cocina, estaba con el cabello mojado, desprendiéndose de él pequeñas gotas que caían sobre el polo del PIJAMA que traía encima, porque si! Se había puesto el pijama- que diablos haces así?- le lanzó el más bajo- se supone que ya nos debemos ir!!!- el mayor podía ser muy tolerante con su amigo pero odiaba cuando el pelinegro se ponía en plan de váyanse a la mierda todos y déjenme con mi puta vida- no pienso ir- es todo lo que salió de los gruesos labios recién llegado, el mayor rodó los ojos, esa era la típica actitud de su dongsaeng - ¡si es por Taemin él va a estar ahí! – el menor se quedó inmóvil por un momento, pero luego siguió sirviéndose un vaso con agua- no sé porque te sigues engañando de que no te interesa lo que haga cuando es todo lo contrario- la mirada fija del alto en el otro, era una advertencia- no me mires así, sabes que tengo razón! – bufó cansado el pelichocolate- son un par de tontos!!! - la desesperación del más bajo estaba saliendo a flote- Eishh… solo díselo Minho!!! - y ya no pudo más, el pelinegro dejó el vaso sobre mesa y se giró para encararlo-¿ que estás diciendo? - por la cabeza del alto pasaron miles de cosas, acaso su Hyung lo sabía? Tan obvio había sido? Y si! Había, en tiempo pasado, por que según él ahora era imposible, se había alejado del pelirrojo precisamente por eso, para ocultar su obviedad, aunque al parecer había sido inútil, fue descubierto. – yo…- el maldito tartamudeo atacó otra vez a Jonghyun – yo…- iba retrocediendo pasos mientras el más alto los daba hacia él.- ya! Detente! No te acerques! – agitaba sus manos- ¿qué tengo que decir Hyung? – calmado, a simple vista Minho parecía calmado, pero su interior era todo lo contrario, miedo, angustia, ansiedad, preocupación por que hayan descubierto lo que tanto quiso ocultar, y dentro de todo eso un rayito de esperanza, de paz, de tranquilidad, tal vez, solo tal vez ahora tenga con quien compartir lo que cada noche lo atormentaba. – Minho… - ahí estaba su Hyung tratando de decirle algo que no quería escuchar y a la vez quería que se lo dijeran- yo… - el más bajo se debatía interiormente si tenía que ser él que debería decir algo o no. - yo creía que confiabas en mi Minho - ah... - dijo al fin - estuve esperando a que me lo contaras- en el rostro del más bajo se veía la decepción- al principio creí que ni tú te habías dado cuenta, pero luego… - el rostro del menor era inexpresiva- estás enamorado de tu hermano- Minho dio un profundo suspiro y bajó la cabeza, lo había dicho, Jjong se había dado cuenta… su Hyung parecía ser un despistado pero no era así… y si Taemin también lo había hecho? el solo hecho de pensarlo lo desesperó – No está bien Hyung!- levantó la cabeza- soy un enfermo! Como si quiera puedo… - el pelinegro se restregó las manos en el rostro, para él era increíble estar hablando de este tema con alguien más- Lo amas… eso es lo que importa- el mayor rodeaba con sus brazos al menor, dándole al menos un poco de confort – No me dirás que estoy mal? Qué debería alejarme definitivamente de Taemin? Que… – yah! No tengo porque decirte que hacer?, además uno no elige de quien enamorarse… solo pasa- se separó del alto para sonreírle- además como puedo decirte algo así, cuando sé que estas muriendo por él… y es Tae te trae… - Hyung! – el alto lo miró ceñudo- kekeke… está bien, está bien… pero es la verdad… además Taemin…- de pronto Jjong sabía que estaba soltando demasiado, quería ayudar al par de hermanos pero tampoco lo iba a hacer todo él solo no?- ¿Taemin que? – replicó el otro- uhm.. e-este… mejor habla con él- la risa nerviosa de Hyung no lo convencía- ¿que es Hyung? – ¿eh? ¿Yo? Nada… nada… de nada… - por la cabeza del pelichocolate solo pasaba la amenaza que le había hecho su diva hace ya tiempo, cuando sin querer escuchó la conversación que tenía con el pelirrojo - tú sabes algo! – y no! No estaba preguntando- Minho- ah~ no me hagas esto si? Solo confía en mi… debes decírselo. - eh? Decírselo!? Es enserio?... O que acaso te diste con algo en la cabeza?! – y es que la verdad a pesar de todo Minho sentía que estaba muy alejado de siquiera pensar en decirle algo le decían algo que se negaba a ver con claridad, tal vez…

Apenas entró al lugar el olor del alcohol lo embriagó, sus fosas se llenaron de ese humo espeso que escapaba de alientos ajenos, todo tipo de manos se restregaron contra su cuerpo mientras trataba de atravesar aquella masa humana que se movía al ritmo de la música; no quería estar ahí y eso lo llevaba grabado como un cartel en la frente, Jjong lo había terminado convenciendo de ir, aunque sabía que esa no era la razón, él estaba ahí por algo mas o bueno por alguien más; había perdido de vista al más bajo desde que pusieron un pie en aquella casa- Minho!!! - escuchó en medio del ruido y pudo ver como su Hyung se abría paso entre el grupo de amigos con los que se encontraba, esbozó una sonrisa sincera, extrañaba a ese adicto al pollo, Onew era como un hermano para él y Taemin, había sido duro tener que adecuarse a estar sin él, ya que los tres vivían juntos antes de que éste se fuera de viaje, eran una familia, y ahí estaba con aquella sonrisa tan característica de él, apachurrándolo contra su cuerpo.- Creo que has crecido más! – dijo separándose del alto – Eso es imposible Hyung! Creo que tú te has encogido? Será la edad!? – rieron a mas no poder, el mayor pasó el brazo sobre el cuello del alto, llevándolo a un lugar más tranquilo –¿ Y dónde está Taemin? – preguntó observando desde una esquina hacia la multitud, el pelinegro se encogió de hombros, no queriéndole dar importancia al asunto- uhm… - el castaño lo miraba con desconfianza – no puedes con un adolescente rebelde! No?– sonrió divertido, si solo fuera eso pensó el menor – Ya debe estar por llegar- dijo sin más- y como ha estado el viaje? – quiso cambiar el tema – Qué tan mal van las cosas? – Preguntó ahora preocupado el Hyung – a mi no me engañas Minho… - le dio aquella mirada que le indicaba que debía soltar todo o él se lo haría soltar – Todo está bien Hyung, Tae salió con una amigo temprano y luego venia para acá, sabes cómo puede llegar a ser de caprichoso- el mayor sonrió recordando aquellos tiempos en donde compartía departamento con los hermanos – tu no fuiste tan caprichoso Minho- posó su mano sobre el hombro del alto – fuiste un bueno hijo – dramatizó, el nombrado bufó divertido – Hyung que te sucede? Estas demasiado dramático – Bueno... – dijo soltando un suspiro- la vida te enseña cosas Minho… uno no… - Aquí estaban!!! – gritaba el chico de mirada felina – ya vámonos que tenemos que darle el regalo de bienvenida al viejo éste– rió divertido señalando al mayor que hacia un puchero ante el adjetivo que le había dado el rubio – regalo? – susurró el pelinegro desorientado él no sabía que tenía que tener un regalo, llegaron a la cocina donde se encontraba Jonghyun apoyado sobre la mesa - hasta que por fin! – dijo tendiéndole un paquete en manos- es de parte de todos! Incluyendo a Tae que todavía no llega – Wa~ chicos de verdad me regalaran algo? – decía mientras recibía el paquete de parte del más bajo - de todos? – preguntó Minho en un susurro al rubio – si! Luego me lo devolverás! – dijo bajito para que el mayor no escuchara – Tsk - refunfuñó calculando cuanto seria lo que tendría que devolverle a Kibum ya que éste amaba dar regalos caros – chicos ustedes saben que los regalos no son importantes para mí – decía rasgando el papel que envolvía el paquete, mientras el alto asentía frenéticamente, él sabía que su Hyung no era de cosas materiales – wa!! Un Ipad!!! Un Ipad ¡ Y es mio! Mio! Mio! Mio! – y ahora el que asintió satisfecho era el chico de mirada felina – gracias! Gracias! Gracias! – decía abrazando el aparato.- bueno todos contentos, todos felices! Regresemos a la fiesta- decía Key abrazando a su puppy – Hyung~ - gritaron desde la entrada de la cocina, los cuatro giraron para observar a cierto pelirrojo que venía medio tambaleándose desde el marco de la puerta – Hyung~ Hyung~ Hyung~ - decía canturreando – Tae- Taemin? – Preguntó el mayor de los cinco- siii!!! Taemin! – el menor dio un salto con los pies juntos, que lo dejó en el suelo y sobándose el trasero – auch? Hahahha~ – empezó a reír por su payasada, para luego pasar a una mirada seria – que nadie me piensa ayudar? Bu~ que malos! Que malos! Bu~ hahaha~– decía mientras hacía berrinche en el suelo, Onew no comprendía lo que sucedía, Taemin borracho? y más aún le extrañaba que Minho se haya quedado parado mirando la escena sin mover un solo músculo, decidió que luego tendría que hablar con él – Levántate Minnie – dijo el castaño acercándose para ayudar al menor a pararse – Hyung~ - dijo colgándose del cuello del mayor y ponerse de pie – Wow! Wow! Wow! – el aliento a alcohol golpeó en el rostro al mayor- Veo que ya te estuviste divirtiendo eh?- el menor asintió riendo, mientras el rubio observaba furioso a su “hijo” y más furioso aún al pelinegro que estaba plantado como una estaca – ellos son muy aburridos Hyung~ – señaló con el índice a los otros tres que se encontraban como espectadores – muy~ aburridos~ aburridos~ pero… Hyung is back! ~– reía como loco – Minho ayúdame a llevarlo al cuarto de Key - ordenó el mayor, sin embargo éste se quedó viendo al menor con el rostro inexpresivo – yo te ayudo! – Dijo el más bajo que hasta ahora se estaba divirtiendo viendo a su dongsaeng – tengo más fuerza que el keroro éste! – dijo queriendo disipar la tensión que amenazaba con adueñarse del ambiente- Está bien Jjong, yo puedo – el alto se acercó al pelirrojo, colocando uno de los delgados brazos sobre su cuello y tomándolo de la cintura – No! Tú no! – dijo el menor enfadado – tú no! Tú no! – decía tratando de liberarse del agarre del mayor – Taemin ahora no es el momento, te estas cayendo de borracho - decía mientras era observado por los otros tres– No! Tú no! Tú no! Déjame! Tú no me quieres tener cerca! Yo tampoco! Déjame! – el bufido del rubio hizo reaccionar al mayor de los cinco que miraba atónito la escena, que diablos era lo que había pasado? – Hyung será mejor que dejemos a este par de idiotas solos – decía el de mirada felina – y tú! – Ahora se dirigía al pelinegro – llévalo a mi habitación y no dejes que salga así – tomo a los dos mayores de sus respectivos polos y los sacó a arrastras de ahí.

Déjame Minho! no tienes que fingir ~ hahaha~ ya no hay nadie~ hahaha~ puedo solo~– las pequeñas manos del menor intentaban torpemente alejar el cuerpo del alto– No puedes, si lo hago te caerás – decía reafirmando su agarre, no era la primer vez que lo veía en ese estado, sin embargo ahora era mucho peor de lo que él había visto – no puedes seguir haciendo esto – le decía el moreno, conduciéndolo a las escaleras, el menor mantenía la vista desorbitada- si puedo~ hahaha~ mira te hago el cuatro~ - intentó mantenerse por sí solo de un solo pie, y estuvo a punto de chocar contra el piso otra vez , si no es porque el moreno lo sostuvo- deja de hacer tonterías y vamos de una vez- habían llegado a las escaleras- tonto~ hahaha~ Minho es un tonto~ - decía canturreando, el mayor rodaba los ojos, Taemin lo escucharía al día siguiente, esto no podía seguir así – si lo soy, ahora subamos – No! Ya te dije que no quiero! – el forcejeo por quien tenía el control de quien inició, y no tardó en terminar con el menor de los dos en el suelo - Ya Déjame~ no te quiero~ ver! No quiero~ no~ so-solo déjame – decía sentado en el suelo mientras golpeaba el suelo con sus manos – Vet-vete- estaba llorando, el alto observó como las lágrimas caían mojando la tela gris de la casaca del menor – vete!!! – Gritó para fijar sus ojos rojos llenos de aquel líquido que escurría por su rostro, sin embargo el moreno no se movía- Hazlo… – dijo más rogando que exigiendo, dicho esto, lo último que pudo ver fue como aquel cuerpo abandonaba la habitación.

No supo cuánto tiempo estuvo ahí, pero creyó que no fue mucho, con mucha dificultad había logrado subir las escaleras, no quería que nadie lo viera en ese estado, ese lugar le agradaba, el viento golpeando su rostro; secando los rastros de las gotas saladas que habían caído antes, mantenía los ojos cerrados creyendo que así podía evitar que salieran más de esas traicioneras lágrimas - Taemin? Estas bien? – un chico de gruesos labios se acercó tomando el rostro de quien se encontraba en el suelo recargado en la pared – Tae – volvió a insistir, sacudiéndolo del hombro logrando que el nombrado abriera lentamente los ojos – Kai? – Su visión era borrosa debido a las lágrimas que ya habían dejado de brotar, se restregó los ojos buscando claridad, sonrió –si soy yo, dónde estabas? Te estuve buscando por todos lados – Kai~ - dijo tomando el rostro de aquel pelinegro - Taemin… yo… - Shh~ - el pelirrojo posó su índice sobre los labios del otro- no digas nada - sonrió – ya me quiero ir… me llevas? – dijo haciendo un puchero y aun sin soltar el rostro del menor – Tae – Shhh~ - negaba con la cabeza- Porque no me quieres escuchar? – dijo tomando las manos del mayor.-Por qué sé lo que dirás – dijo aun sonriendo- y sabes que yo… - No! No lo digas! Ya estoy harto de esto! – quitó sus manos de su rostro– Kai- dijo el pelirrojo frunciendo el ceño, no era la primera vez que pasaba esto - Me gustas Taemin, siempre ha sido así y tú… tú siempre lo has sabido yo… yo siempre te lo he dicho – el otro negaba con la cabeza, desviando su mirada – No mientas! – el pelinegro tomó la barbilla del mayor para tener toda su atención - por qué? Por qué sigues sufriendo por otra persona cuando yo… - yo lo amo – salió en un susurro de los labios del mayor - ya cállate! – deshizo el contacto de forma brusca - Es tu hermano maldita sea! Entiende Taemin! Es imposible! Eso es enfermizo! Da asco… tú conmigo …- No! Basta Kai! No sigas- aquellas palabras lo estaban hiriendo, se intentaba incorporar del piso pero el otro lo empujó, colocándose sobre él – Dame una oportunidad- el otro solo negaba – mírame maldita sea Taemin! Mirame! – Diciendo esto tomó el rostro de facciones finas entre sus manos y se acercó peligrosamente – no lo hagas – decía Taemin temeroso – detente Kai – No puedo – dijo esto mientras juntaba sus labios con los del pelirrojo, éste ofrecía resistencia intentando apartar a su amigo, sin embargo lo había inmovilizado sujetándolo fuertemente de las muñecas y colocándolas sobre la pared a la altura de su rostro, el pelirrojo pataleaba pero nada podía hacer el peso contrario le impedía moverse, el menor buscaba el contacto con su lengua sin embargo el pelirrojo no le permitía el acceso, la frustración lo llevó a hacer presión en la mandíbula del mayor que provocó un gemido de dolor por parte de éste, eso fue suficiente para que el alto colara su lengua en el interior, recorría toda la cavidad desesperadamente, mientras Taemin buscaba liberarse del agarre- Te a-amo- decía entrecortadamente el menor – T-te amo Taemin- dijo mordiendo el labio inferior del nombrado – y te lo voy a demostrar - tomó con fuerza su rostro para luego pasar lamer la sangre presente en los labios rosas, Taemin se dio cuenta que esa no era la mirada del que siempre consideró su amigo, esa era la mirada de alguien que guardaba rencor y en ese momento fue cuando sintió miedo, el pelinegro empezó a besar el cuello blanquecino del pelirrojo, lamiendo, succionando, y mordiendo la piel , los gemidos de dolor salían de la boca del pelirrojo, pero estos solo eran incentivos para que el otro siguiera , la mano del moreno descendió al botón del pantalón negro que traía el de cabellera rojiza– no- no lo hagas – decía sollozando y retorciéndose para impedir la tarea del otro – Kai…

A esta hora él debería de estar en su cama, bajo todas sus frazadas esperando por el día siguiente para que su vida siga siendo la misma porquería de siempre, pero no! Le había hecho caso al enano musculoso ese y ahora estaba ahí, dando vueltas como león enjaulado en la entrada de la casa del rubio, tenía las llaves del auto en la mano pero no podía irse dejando a Taemin así, él le había pedido que se largara y estaba dispuesto a hacerlo, pero había algo… algo que le impedía dejar aquel lugar y lo estaba matando el no saber que carajos hacer, debería regresar a buscar a ese maldito mocoso que ponía su vida patas arriba y llevárselo a rastras de ahí? o largarse de una buena vez y dejarle que haga lo que se le venga en gana? , Bueno al fin y al cabo esto último ya lo había decidido hace mucho no? Era lo mejor para ambos – Mierda! – dijo guardando las llaves en el bolsillo derecho de los pantalones que traía y se internó de nuevo en el bullicio, llegó a la cocina con la esperanza de encontrarlo donde lo había dejado pero nada; atravesó nuevamente la masa de gente tratando de observar por encima de ésta alguna pista de donde pudiera estar el pelirrojo, pero nada – Kibum has visto a Taemin?- no había tardado en encontrar la cabellera rubia del mayor.- eh? – la mirada desencajada de éste ya le había respondido- No se supone que estaba contigo? – preguntó ahora el pelichocolate mientras rodeaba cintura de novio y se movían al ritmo de la música – Diablos!- dijo rascándose la nuca y alejándose del lugar - Oie! Rana alienígena! Responde! Donde esta Minnie~ – escuchaba a lo lejos como gritaba la diva – eso es lo que me pregunto yo… - decía mientras con la mirada buscaba algún rastro pelirrojo por ahí, pero nada! Absolutamente nada! – se habrá ido? – quien? – sorprendido giró para observar al que le hablaba- Onew Hyung – dijo aliviado – haz visto a Taemin? – preguntó viendo hacia todos lados – no estaba contigo? – porque todos le salían con lo mismo!? Si estaba preguntado por él es porque no era así no? Rodó los ojos y contestó con pesadez – No Hyung, él quería estar solo y yo… - lo dejaste – sonrió viendo a su dongsaeng – no te preocupes Minho, necesita su espacio, recuerdo cuando tu… – Hyung lo siento tengo que buscarlo –y así salió en busca del menor, no tenía ni idea de en donde buscar, pero aquella casa no era tan grande como para que la gente se pierda, así que empezó; cocina nada, sala comedor pues según el rastreo que había hecho tampoco nada, se detuvo a pensar un momento … el baño! Como no se le había ocurrido antes! Con lo borracho que estaba seguro se fue a devolver todo lo que había ingerido, fue lo más rápido que pudo, no sabía porque, pero el pelinegro tenía la necesidad de estar al lado de Taemin en ese momento, él debía estar a su lado; llegó a la puerta blanca y giró la perilla pero estaba cerrada – Taemin? – empezó a tocar mientras la ansiedad aumentaba- Taemin estás ahí? – esperó unos segundos y escuchó agua correr, luego el sonido de la perilla al girar – Tae… – dijo al observar la puerta abrirse, pero para angustia suya no era él- diablos! – Soltó – perdón? –dijo confundida la chica de cabellera negra mientras salía - lo siento, es que estoy buscando a alguien – iba a girarse para seguir pero la mano de la menor lo retuvo - tú eres Minho? – el pelinegro la observó tratando de recordar quien era, pero no logró nada- eres el hermano de Taemin no? – oh! Si, lo conoces? – Si, somos compañeros de clase, mi nombre es Sulli – la chica hizo una pequeña reverencia que el mayor imitó – Ya veo, pues… yo lo estoy buscando ahora, tú no lo habrás visto? – Preguntó indeciso – No y ya me empiezo a preocupar – dijo con algo de pesar – hace rato Kai también lo estaba buscando pero ya no lo he visto, ni a él ni a Taemin – Kai, aquel mocoso ya lo tenía cansado, siempre, pero siempre tenía que estar con Taemin, y simplemente no le daba buena espina, definitivamente aquel chiquillo no le daba buena espina, algo se traía y eso lo había visto en las miradas que le daba a SU Taemin. – Seguiré buscando- dicho esto se alejó de la pelinegra, solo le quedaba revisar la planta superior, subió las escaleras para llegar al pasillo donde se encontraban cinco puertas, dos a cada lado y una al final, la del fondo era de Key, se dirigió directamente a esa puerta y abrió, observó la habitación pero nada – donde te has metido? – estaba por salir de la habitación cuando escuchó un quejido, giró pero no había nadie, los quejidos seguían escuchándose – pero qué diablos… – dudoso se acercó hasta lo que era la mampara que daba al balcón de la habitación – de-déjame… - aquella voz lo puso en alarma, era Taemin.

Todo estaba pasando tan rápido, en medio del forcejeo creyó haber escuchado la voz de Minho, estaba ahí? No se había ido? Lo estaba buscando? De pronto sintió que su corazón se estrujaba, de verdad le importaba?, la mano del pelinegro frotándose contra su hombría lo trajo de golpe a la realidad, las lágrimas comenzaron a caer bañando sus mejillas – de –déjame… por favor… - rogaba era todo lo que le quedaba hacer, rogaba para que su amigo reaccionara, éste no era él, los gruesos labios se volvieron apoderar de los suyos de forma brusca, mientras seguía frotando su hombría insistentemente; y todo pasó en segundos. Sintió como sacaron aquel peso de su encima, se frotó los ojos quitando el líquido que contenía en ellos, poco a poco fue distinguiendo la espalda de una persona, pero no era cualquier persona- Minho… - susurró observando como éste impartía golpes sobre el que era su amigo, el cual se cubría torpemente con los antebrazos- Minho- esta vez lo dijo más fuerte para que lo escuchara pero parecía que el pelinegro estaba en un trance, no se detenía solo seguía dando golpes y más golpes, el pelirrojo podía escuchar las quejas del pelinegro menor y como los puños de su hermano daban contra su cuerpo. - Basta! – gritó con todo lo que le quedaba de fuerzas, intentó incorporarse pero solo logró quedar de rodillas , cerró los ojos deseando que todo aquello fuera una pesadilla, solo una horrible pesadilla, de pronto no escucho más que respiraciones entrecortadas, abrió los ojos lentamente para encontrar a su hermano sujetando de la camisa al otro – a-atrévete a tocarlo… una vez más… hazlo y juro que te romperé todos los huesos – dicho esto lo soltó tirándolo contra el suelo, el mayor se giró encontrándose con los ojos de su pequeño, se acercó a gatas, le sostuvo el rostro y limpió los restos de lágrimas con sus pulgares- Ya estoy aquí Minnie – el mencionado rompió en llanto abrazándose de aquel cuerpo que siempre le brindó seguridad – Min-min…- el hipo le dificultaba todo intento de hablar- Está bien Minnie, todo va a estar bien- decía estrujando el delgado cuerpo contra el suyo.

El viaje en auto fue en profundo silencio, luego de haber dejado la casa de Kibum ninguno de los dos se atrevía a soltar palabra alguna; el mayor iba manejando concentrado en la autopista, mientras Taemin iba con la mirada fija en la ventana, en realidad no veía nada, la oscuridad de fuera y la luz dentro del auto permitían que la ventana actuara como un espejo, a través de éste podía observar el rostro del pelinegro, en que estaría pensando? Sonreía disimuladamente al observar con el alto hacia muecas, primero fruncía el ceño, luego hacia un puchero, por momentos veía que éste lo miraba de reojo, por lo que Taemin aparentaba que nada pasaba. Estacionaron el auto en el aparcamiento de su edificio, el menor bajó primero y fue hacia el ascensor, seguido por el moreno que terminaba por colocarle la alarma al coche. La puerta se abrió y los dos ingresaron, el pelirrojo presiono el botón con el número cuatro, soltó un suspiro y las puertas se cerraron – No lo vuelvas a hacer – la voz ronca del mayor sorprendió al otro que volteo a verlo- no quiero que te expongas así Taemin – dijo ahora mirándolo con ojos severos, Exponerse? – que acaso crees que yo lo busque? – cerró sus manos en puño tratando de contener la cólera – tomar cuanto se te venga en gana y que luego no puedas ni caminar es un inicio no? – Idiota! – el pelirrojo se lanzó contra el alto dándole con los puños en el pecho – eres un completo idiota! – seguía golpeando mientras las lágrimas amenazaban por salir, pero el mayor no reaccionaba, solo se dejaba hacer- Idiota! Idiota!- las puertas del ascensor se abrieron – es suficiente- el pelinegro lo tomó de las muñecas llevándolo a rastras hacia su departamento, metió las llaves en la cerradura manteniendo su agarre en el pelirrojo, una vez abierto de un jalón lo aventó dentro, éste perdió ligeramente el equilibrio pero pudo sostenerse del mueble evitando su caída; el mayor cerró la puerta de un golpe con la vista clavada en los ojos furiosos del otro - Ve a dormir – dijo pasando por un lado del menor – duerme conmigo – helado, así es como Taemin había dejado a su hermano, el mayor había detenido sus pasos, no se movió, ni si quiera pestañeó, en su cabeza rebotaban esas dos palabras duerme conmigo, acaso el pelirrojo sabía lo que estaban ocasionando esas palabras en el cuerpo del moreno? No, definitivamente había escuchado mal, solo era un truco de su mente sucia, solo fue eso, el pequeño no le podía estar diciendo algo así, inspiro fuertemente y se dispuso a retomar su camino cuando sintió unos delgados brazos rodearle la cintura, bajo la vista y reconocería entre miles aquellas manos – Tae-Taemin- el menor se aferró a la espalda del alto – no me alejes… no me alejes Minho… - podía sentir como se aferraba más a él- Taemin- tomó sus manos para deshacer el agarre y poder girar- No llores – quitaba la humedad del rostro del pelirrojo con los dedos – Discúlpame no te quise lastimar… - mi Hyung es un tonto- dijo cabizbajo - de verdad que eres un tonto - había escuchado bien? Dijo Hyung? Y no solo dijo Hyung, dijo MI hyung?- Taemin… - Umma tiene razón, tu pequeña cabeza esta hueca… porque no lo ves…– los ojos almendrados se clavaron en él- Será mejor que descanses Tae- retiraba los mechones rojizos del fino rostro – no! - Quitó de un golpe la gran mano y se aferró de nuevo a su cuerpo, escondió su cabeza en su cuello, Minho podía sentir la respiración del menor de su contra su piel- Tae- le incomodaba aquel acto, era más de lo que él podía controlar, su cuerpo reaccionaba y eso no estaba bien, lo sujetó por los hombros y lo retiró suavemente – Taemin yo… - Te amo – dijo el menor con cierto brillo en los ojos- así me odies Minho… yo te amo – el alto negaba con la cabeza, como era posible que pensara que lo odiaba, como era posible que Taemin le dijera que lo amaba, no era real, él tenía que estar soñando, no salía de sus pensamientos cuando sintió aquellos labios que había probado hace muchos años atrás sobre los suyos, aquellos labios rosas que había deseado volver a probar, ahora estaban ahí moviéndose contra su boca, el pelirrojo había rodeado con sus brazos su cuello, enterrando sus dedos en la espesa melena negra; el alto rodeó la delgada cintura atrayéndolo más hacia él, delineó con su lengua los labios contrarios pidiendo acceso, que no demoró en llegar, introdujo su lengua y empezó a jugar con la otra, el beso se iba intensificando provocando pequeños gemidos por parte de ambos, la falta de aire hizo que se separaran bruscamente – yo … yo…- el mayor pegó su frente con la del menor, mientras intentaba recuperar el aliento – yo también te amo Taemin- sonrió, para luego darle un beso fugaz- Te amo – le reafirmo viéndolo a los ojos, el interior del menor rebotaba de felicidad, sentía un cosquilleo que se le formaba en el estómago, lo amaba, amaba a aquel idiota, lo abrazó fuertemente no queriéndose separar nunca de él– ya no me alejes de ti Hyung… – dijo escondido en su pecho, levantó la mirada para perderse en aquellos grandes ojos –no lo hagas…- Nunca más Tae – le respondió sonriéndole- Nunca más.