Lee Jinki, 23 años.
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Kim Jonghyun, 23 años.
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Lee Taemin, 18 años.
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Lee Jinki era un chico normal, estatura y complexion media, anteojos y un cabello lacio y sin forma, un estudiante universitario promedio que a pesar de su nula popularidad era reconocido por sus logros como estudiante.

Una tarde de otoño, Jinki se encontraba caminando sin rumbo fijo en los pasillos de su universidad, leía los anuncios en las paredes, escuchaba algunas platicas entre estudiantes y al mismo tiempo hacia toda una lista de pendientes en su cabeza.

Cuando llegó a una pequeña fuente en la zona más alejada de los edificios decidió disfrutar del día recostandose sobre el húmedo pasto y relajarse aunque sea por un momento.

Sin saber cuanto tiempo había estado ahí un tenue e indescifrable ruido hizo que abriera los ojos, el ruido provenía de los audifonos que traía un chico de cabello castaño oscuro y facciones muy varoniles.

“Lo siento te desperté?”

“… Para nada…” titubeó Jinki sentándose rapidamente y un poco apenado.

“Qué piensas que es más poderoso el amor o el odio” preguntó aquel chico sin despegar su mirada a un punto vació entre los arboles

“Son sentimientos muy diferentes… no creo que puedan compararse” Respondió Jinki sintiendose estúpido por no poder dar una respuesta más interesante.

Aquel chico solo asintió y le brindó una cálida sonrisa

“Me llamo Jonghyun y tú?”

“Lee Jinki”

“Bueno Jinki tengo una aburrida clase que tomar, espero verte pronto”

“Hasta luego” fue lo único que pudo responder.

Después de su encuentro con Jonghyun, Jinki no podía dejar de pensar en su pregunta, amor y odio ¿Cuál es más poderoso? Es una pregunta difícil, los Best Sellers con mayo éxito son historias de amor y/o odio, las canciones más pegajosas son de amor y/o odio, incluso los asesinatos son por amor y/o odio, no solo la pregunta intrigaba a Jinki, también creció una enorme curiosidad por saber más acerca de él.

Al día siguiente Jinki decidió ir al mismo sitio deseando poder encontrarse con aquel misterioso chico, después de 30 minutos de espera y ver que no ocurría nada decidió mejor ir a su sitio preferido, la biblioteca.

“Ya te vas?”

Jinki volteó rápidamente, Jonghyun sonreía tiernamente con una funda de guitarra sobre su hombro.

“yo.. umm… no”

“Sientate conmigo” esa frase de solo dos palabras hizo que por alguna extraña razón Jinki sintiera sus mejillas calentarse.

“Tocas la guitarra?” De nuevo no pudo evitar sentirse estúpido por preguntar algo tan obvio.

“Algo así, hago mi mayor esfuerzo”

“Siempre vienes aquí?” la curiosidad que Jinki sentía por Jonghyun era inmensa quería saber todo de él.

“Solo cuando siento que dejo de ser yo vengo aquí”

Jinki no entendía nada de lo que decía pero asintió de todas maneras, Jonghyun era físicamente muy atractivo, varonil y con un estilo “rocker” lo que la gente normalmente llamaría “un chico con estilo”.

“Quieres escuchar una canción?” Dijo un Jonghyun con una sonrisa de oreja a oreja

“claro”

Jonghyun sacó una guitarra acústica y comenzó a tocar una dulce melodía, por más que Jinki quería poner atención a la letra no podía retirar su mirada de los labios del otro, de sus ojos entre cerrados y de su pecho que ascendía y descendía en sincronía con la melodía.

“Observarte hasta el amanecer, hasta que dejemos de ser”

Fue lo único que Jinki pudo rescatar después de su trance

“wow tienes muchísimo talento, te inspiraste en tu novia?” la pregunta era intencionada, quería saber si tenía una relación o no, jonghyun solo sonrió y agacho su mirada.

“lo siento dije algo que no debía?”

“No, es solo que nuestra relación es un poco…. complicada”

“Complicada?”

“Es un chico” dudó un momento antes de confesar eso

“oh…” Jinki pudo ver la mirada inquieta de Jonghyun como esperando alguna otra respuesta

“Oh no no, descuida no me incomoda el que tengas novio” respondío Jinki agitando sus manos.

“Genial” sonrió para inmediatamente guardar su guitarra y sacar una foto de su billetera.

“Es él, es menor que yo, se llama Taemin”

“oh…” Jinki sintió un hueco en el estomago

“Es… atractivo”

“Lo sé, es el ser humano más perfecto que he conocido” ouch… fue lo único que pensó Jinki

“Debe ser un chico muy agradable”

“Lo es” Dijo Jonghyun mientras observaba la foto con una sonrisa enorme y ojos brillantes.

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Despues de un par de días Jinki no pudo ir a la fuente (como ya había nombrado ese lugar) pues los trabajos y clases le absorbían su tiempo, más tarde, Jinki tenia que entregar unos documentos en el departamento de arte y fue cuando escucho a un par de chicas gritar ese nombre, Taemin.


Jinki inmediatamente giró su cabeza en dirección al chico, que poco a poco se acercaba a él, era tal y como Jonghyun lo había descrito el ser más hermoso que ha conocido, Jinki nunca había visto a un chico con esa estructura ósea, alto, piel de porcelana y de un color pálido que solo las muñecas francesas pueden tener, cabello que bajo los rayos del sol parecía brillar, labios perfectamente delineados y rosados, delgado y con mucha elegancia, cuando taemin lo pasó, Jinki pudo oler un deliciosa aroma a fresa, su fruta favorita.

Taemin… susurró para sí mismo.

El tiempo pasó y cuando menos se lo esperaba Jinki no solo se había dado cuenta de que le gustaba Jonghyun sino que estaba total y perdidamente enamorado de él, habian pasado un par de meses desde su primer encuentro, platicaban todos los días en la fuente y algunas tardes Jonghyun iba a la casa de Jinki en donde era muy bien recibido, sus papás lo adoraban, incluso su hermanita menor decía que Jonhyun Oppa era el más guapo.

Jinki tambien conoció mas acerca de Jonghyun como el que era hijo único, su padre era alcoholico y los abandono a él y a su madre cuando era muy pequeño, tenía muchos problemas con ella y solo la veía un par de veces a la semana. Jinki se preocupaba mucho por él pero este no se veía tan afectado o triste por su situacion ya que lo unico que Jonghyun decía era “Taemin es el único que me mantiene de pie y con vida”.

Jinki no solo había conocido sobre Jonghyun y su vida, tambien conocía mucho de Taemin, su comida favorita, sus miedos, que reprobó historia durante la prepararoria, que era un excelente bailarín y que su familia era adinerada, Jinki conocía demasiado de él porque Jjong (como ahora lo llamaba) no dejaba de hablar de él, poco a poco Jinki comenzó a sentir unos inemnsos celos hacia el menor, su vida era perfecta, él mismo era perfecto y tenía al novio perfecto, aún así Jinki nunca le dijo a Jonghyun que dejara de hablar de él, aunque no soportaba la perfección del menor, jinki adoraba la forma en que Jonghyun hablaba de Taemin, la forma en que sus ojos brillaban, como deseando y muy profundamente imaginando que es de él del que habla y no Taemin.

Todo iba perfecto hasta que un día las cosas comenzaron a tornarse de un matiz diferente, un matiz que Jinki no sabía como explicar.

“Entremos a ese restaurante, dicen que la comida Italiana que preparan es deliciosa” Comentó la madre de Jinki hacia su esposo el Señor Lee.

Cuando se sentaron en una mesa Jinki observó las personas que estaban ahí y pudo ver a su mejor amigo en una esquina, comiendo solo.

“Voy al baño” Fue lo unico que mencionó a sus padres, y se acerco a la mesa de Jonghyun la cual estaba muy alejada de la suya.

“Jjong?”

“Oh! Jinki, creí que los domingos eran para estar con tu familia en casa”

“Sí, pero mi mamá quiso salir a comer”

“Ya veo” Contesó Jonghyun mientras colocaba un poco de espaguetti sobre su boca

“¿Que haces aqui comiendo solo?” Jonghyun sonrío y un leve sonrojo apareció sobre sus mejillas

“Tengo una cita con Taemin hoy cumplimos 1 año” Jinki sintió un vuelco en el estomago, dolía, 1 año? eso definitivamente no lo sabía.

“Y Taemin?” Jonghyun sonrió y miró hacia un punto el cual Jinki decidió seguir girando su cabeza hacia la izquierda

Y ahí estaba Taemin, comiendo el mismo espaguetti que Jonghyun, pero estaba en otra mesa y rodeado de sus amigos, todos reían y platicaban animadamente, Jinki estaba muy confundido, no entendía nada de lo que estaba pasando.

“Jjong…”

“Ya sé… sus estupidos amigos decidieron venir con él e interrumpir”

“oh..” fue lo único que pudo articular Jinki.

“Por cierto Jinki, me siento muy apenado de que tú siempre eres el que me invita a tu casa, qué te parece si este martes vienes a la mía? Mi mamá no estará y quiero enseñarte algo”

“Claro!!” Jinki sintió que su confusion y celos se desvanecían con esa invitación, Jonghyun una vez le dijo que nadie había ido a su casa ni siquiera Taemin, por un momento se sintió muy especial.


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Jinki estaba muy nervioso, el día había llegado, era muy estupido ¿cierto? arreglarte, ponerte loción y sentir mariposas en el estomago solo por ir a la casa de jonghyun.

Cuando llegó a su casa pudo notar que no era una zona muy bonita sino todo lo contrario, el departamento estaba en el último piso y era muy pequeño, el tapiz de las paredes eran viejas y la casa estaba desordenada.

“lo siento no se compara nada a la tuya” Dijo Jonghyun al ver que Jinki examinaba cada rincon con su mirada

“está bien, me gusta”

“no mientas” Ambos rieron y jonghyun le entregó una lata de cerveza a Jinki, él la tomó aunque en su cabeza decia “yo no tomo” no quiso verse como un idiota y la abrio tomando un enorme sorbo con el cual casi vomita, Jonghyun se dió cuenta de esto “Que lindo” susurró haciendo que Jinki se sonrojara.

“Que querías mostrarme?”

“Vamos a mi cuarto” Jonghyun caminó primero y Jinki le siguó, llegaron a una puerta azul muy gastada, cuando jonghyun la abrió Jinki no pudo ver nada pues era una habitación muy oscura, fue cuando prendió la luz que Jinki sintió que sus piernas temblaban y lo poco que había comido en casa se le revolvía en el estomago, eran fotos de Taemin, no 1 o 2 eran muchas más, la pared estaba tapizada con miles de fotos, Taemin estudiando en un parque, Taemin con sus amigos en la escuela, Taemin durmiendo en su cama!.

Jinki no tenía palabras ¿Qué demonios? fue lo que pensó, volteó a ver rapidamente a Jonghyun quien lo observaba, no sabia cuanto tiempo lo había estado observando pero seguramente era para ver la reacción de Jinki.

“Qué… qué esto Jonghyun” No era una pregunta era una afirmación que exigía una respuesta lógica a tan enfermiza escena.

“Que más puede ser Jinki, cada momento que paso con mi Taemin lo guardo aquí es como una habitación de recuerdos”

El corazón de Jinki latía a mil estaba muy nervioso y no sabía que decir solo quería salir de ahí lo antes posible.

“Jonghyun…”

“Si?”

“Taemin te conoce?”

El rosotro de Jonghyun pasó de una tranquila expresión a una que Jinki no pudo decifrar.

“Aún no…”

Aún no? repitió Jinki en su cabeza

“Mira Jinki, Taemin es más que un ser humano, es … es… es simplemente perfecto y yo debo cuidarlo, debo protegerlo de cualquier otra persona que quiera pasarse con él, sabias que en secundaria lo molestaban y golpeaban por su fisico? marica, gay, toda clase de cosas le decían porque las personas no pueden aceptar que Taemin trasciende de este mundo… Jinki… Tienes que ayudarme con esto”

“De que hablas”

“Tenemos que traerlo aquí y protegerlo”

“Jonghyun… ¿¿estás hablando de secuestrarlo??”

“No digas estupideces Jinki, el día del restaurante fui al baño y escuche que uno de sus amigos iba a declarase no podemos permitirlo Jinki no podemos!! ese tipo solo va a mancharlo con sus asquerosas intenciones. Mira Jinki desde que te conocí he estado un poco confundido”

“Confundido?”

“Si… Jinki me agradas demasiado… eres un chico tan inocente y con buenas intenciones, se que puedo confiar en ti para esto ¿Verdad?”

Jinki quería decir no, nunca te ayudare con algo tan retorcido como esto, pero entonces Jonghyun se acercó a él y tocó su mejilla tan delicadamente como si tuviera miedo de romperlo.

“es…está bien… te ayudaré” en casi un susurro Jinki aceptó, quería arrepentirse pero antes de hacerlo Jonghyun lo tenia entre sus brazos murmurando “gracias” incontables veces.


-continuara-