Titulo: Best Friend.
Autor: Mizore-chan (Me)
Género: Lemon (?) aja...
Parejas: OnKey
Nota:
Bueno este Oneshot está dedicado a mi unnie Mixool♥ >__< Te ganaste un Oneshot y aqui esta lo que me pediste mi amor~ Espero y que te guste, a mi me gustó aunque... ya veras cual es el pero XD. Aunque ese oneshot es especialmente para ti mi amada Mixool, tambien se lo quiero dedicar a un gran amigo mio que lo MEGA AMO, *no te henojes mi Mixool[♥* pero es que siento que lo escribí recordando en las peleas que alguna ves tuvimos en la prepa XD Te acordas mi Orochi? ahahahaha, no te enojes mi Mixool♥ que se lo dedique a otra personas, pero sabes que fue hecho especialmente para ti.

De verdad es el primer Oneshot que hago y que me gusta, pero... XD dice mi editora *Aya-ssi* que el lemon esta algo raro. Me decia como es que en pleno lemon se ponen a pelear. Aqui es donde me doy cuenta que salió como yo queria, por que ese es sentimiento que quise dar, una persona berrinchuda que no importa en que situación esté siempre saca a flote su personalida.

El Lemon... eso si.. siento que es un asco pero... realmente... no sé XD mi editora dice que es algo loco XD que como es posible que aya tanta bipolaridad en ese lemon ahahaha xD pero... bueno XD ahaha.

¿Lo prometes?... Si.

¿Amigos? … Por siempre.

¿Mejores amigos?... Nunca lo dudes.

¿Seré tu único mejor amigo?... El único.


Sellamos aquella promesa, juntando nuestros dedos meñiques y sonriendo como dos tontos enamorado. Pero el término de “dos tontos enamorados” es un decir, ya que a la edad de 5 y 7 años no sabíamos el significado de estar enamorados.
Nuestra amistad creció a más no poder. Mi respirar era por él, su respirar era por mi; esa sonrisa que iluminaba todo era solo para mí. ¿Amor? No lo sabía en ese instante, solo me importaba estar junto a el, quería sentir esas sensaciones que cada vez que estaba con el inundaban todo mi ser. Era solo un niño, no entendía. Pasaron unos años y nos creíamos inseparables ¿quién podría separarnos? Nadie ni nada.


O eso pensaba…


Todo cambió cuando él entró al instituto. El era dos años mayor que yo, por lo tanto él fue el primero en entrar en ese ambiente de chico de instituto. Cuando el entró nos seguíamos frecuentando los primeros meses, aun pasaba tiempo conmigo; unas pocas horas al día pero aun lo hacía. Al tercer mes, unas pocas horas a la semana; pero lo hacía. Pero siguieron los meses y llegó el momento en que nuestros encuentros se hacían cada vez más raros.


“Tengo tarea”, “necesito ir con mis amigos a terminar un proyecto”, “Le prometí a una amiga acompañarla a un lugar”… Esas eran las muchas excusas que me decía él. Esos dos años en los que aun no entraba al instituto, sin que él se diera cuenta, iba a su escuela y me escondía tras de un árbol, para después seguirlo a una distancia discretea. Efectivamente, el iba con sus amigos a hacer tarea. Después de la escuela iban a comprar materiales para hacer sus tareas.

“KiBum, el no te ha olvidado.
Solo da lo mejor de sí en sus estudios”

Me repetía cada vez que lo veía salir con ellos, pero me era inevitable el enojarme; pero me era mas inevitable mostrarme enojado frente a él. Cada vez que lo veía mis palabras comenzaron a ser frías, las pocas horas que pasaba con el eran tan incomodas. Yo me mostraba tan indiferente con él a pesar de que moría por pasar tiempo con él. Cuando el intentaba abrazarme —algo tan común en nosotros— yo me escabullía rápidamente, o si no lograba hacerlo me retorcía entre sus brazos hasta que me soltara. Cuando esos recuerdos vienen a mi mente veo que tal vez yo tuve algo de culpa. Pero no sabía lo que hacía, lo que sentía. Era un niño…


— ¿Qué pasa contigo Key?

Key, con el elegí un sobrenombre para mí. “Eres un Key, siempre consigues lo que quieres.”

—Se supone que hoy celebramos que mañana es tu primer día de instituto. — el levantó sus manos en señal de triunfo.

— ¿Y…? — no despegué mi mirada del TV.

— ¿Cómo de que “Y…”? —esperó a que yo dijera algo, pero nada salió de mi boca. — ¿Sucede algo? — me abrazó.

—Nada. —dije soltándome de su abrazo.

—A ti te pasa algo, ¿dime que sucede?

—Ya te dije que no es nada. —con mi dedo presionaba una y otra vez el botón del control remoto del TV.

—Key… — me tomó de los hombros y me volteó para que lo mirara a los ojos. — ¿Por qué ya no te comportas igual conmigo?.. — su voz era seria.

—Yo sigo siendo el mismo, el que ha cambiado eres tú. —Me volteé a seguir cambiando de canales el TV.

—Mírame… — dijo con voz segura pero sin alzar la voz. Yo no volteé a verlo. — Key… — se levantó y se hincó frente a mí. — Tu bien sabes que si no he pasado el suficiente tiempo contigo es por la escuela. Las tareas… Te lo he dicho muchas veces.

—Sí… pero…

—A mi me encanta pasar tiempo contigo.

—Pero tu dijiste que solo…

— ¡Dios! KiBum! ¡Ya no somos unos niños! —se levantó de donde estaba para dar vueltas por la sala. — ¡Ya no eres un niño KiBum! —levantó su voz.

—Yo… —intentaba que mis lágrimas no salieran.


Un silencio nos rodeó.


—Tienes razón. —me levanté si mirarlo a la cara. — Ya no soy un niño… ¡y tú no te das cuenta!


Salí corriendo de la sala, me dirigí a la puerta abriéndola y azotándola a mis espaldas. Quería irme de ahí, no quería verlo. Quería que solo fuera mío y de nadie más...


—Key. — alguien me tomó de el codo haciendo que me detuviera bruscamente. —Kim KiBum escúchame. —Era él, tomándome fuertemente ahora de mis dos brazos.

—Déjame… —mis lágrimas seguían.

—Key, quiero que sepas que…

—Te he dicho que me sueltes, Lee JinKi. —su nombre salió entre mis sollozos y lagrimas.

— ¡Por dios! Madura KiBum! — Volvió a alzar su voz.


Me sentía… traicionado. Clavé mis ojos en su rostro enojado y a la vez preocupado. No podía creer que me estuviera tratando de esta manera. ¿En realidad estaba actuando de una manera inmadura? Tal vez sí..


— ¡Déjame! — me zafé de su agarre. —No quiero verte, ya no quiero ser…


Salí corriendo, mi corazón me impidió terminar esa frase. ¿Quería en verdad dejar de ser su amigo? No lo creo, el era mi todo. Pero… ¿Yo que era para él? ...



Y aquí estoy, el gran Key del cual todos en esta escuela conocen y han escuchado hablar. Si no me conocen, entonces es que no tienen vida social.
Desde hace dos años que he entrado al instituto y me he ganado mi fama de el “Gran Key”. He hecho compañeros, y unos pocos —por no decir 2 o 3— verdaderos amigos. ¿Estoy conforme? Si. ¿Soy feliz? No lo sé.


Aun extraño a mi “Mejor amigo”.


Desde ese día nuestros caminos, nuestras vidas, nuestra amistad se separó. El tiene sus amigos, les sonríe, se le ve feliz. Le sonríe a todo el jodido mundo. ¿Acaso ya se ha olvidado de mí? ¿Acaso tan rápido superó aquello? No podía creer que el no hiciera nada por recuperar nuestra amistad. Soñaba que algún día en estos dos años, cuando llegara a la escuela, correría a mí y me diría “Lo siento”. Pero nunca sucedió.

¿Odiarlo? No lo odio. Pero si me enoja, me cala hasta los huesos el verle sonreír a otras personas, que les sonría a las chicas de esa manera a la que solo me sonreía a mí. Moría por preguntarle por que cuando nuestras miradas se cruzaban por casualidad el dejaba de sonreír tan vivamente. Admito que cuando yo lo miraba lo veía con mucho enojo y desprecio, pero creo que tengo derecho ¿no? En mucho tiempo nuestros caminos no se cruzaron; si nos veíamos intentábamos irnos por el lado opuesto del otro.

¿Acaso no era lo suficientemente importante para ti como para que me olvidaras? A pesar de que eras más grande que yo, nunca te diste cuenta. Yo era un niño aun, no sabía, pero tu debías saber a la perfección, por algo eras mi hyung, Mi mejor amigo.

Onew, yo nunca te olvidé.


Sin querer le he seguido hasta el baño. Bueno… realmente le he seguido por que he querido. Desde hace tiempo me han dado ganas de acercármele pero reprimía aquello. Pero hoy no pude resistirme.
Entré rápidamente tras de él para evitar que tuviera que abrir nuevamente la puerta y se percatara de que estaba ahí. Me he recargado en la puerta que continua del cuadro al que él entró, viendo que cuando abriera la puerta, esta me obstruyera de su vista al salir. Salió, se dirigió al los lavabos que se encontraban justo frente a los cubículos. Se lavaba las manos y aun no se percataba de mi presencia. Cuando levantó su mirada para verse su cabello, me vio. Volteó hacia atrás como si lo que estaba viendo en el espejo no fuera real. Su rostro asombrado cambió a uno de extrema seriedad. Resentimiento.


—Hola~ —dije aun recargado en aquella puerta.


El no me respondió, se volteó y sin mirarme comenzaba a caminar.


— ¿Acaso no me piensas saludar?... — lo detuve. — ¿O acaso es que no te importo? —lo empujé con mis dedos. — Ah… sí, creo que es esto último. — formé en mi rostro una sonrisa desdeñosa.

—Hola KiBum. — dijo forzadamente.

—Key, para los amigos soy “Key” ¿Recuerdas? —me comenzaba a acercar a él. — ¡Oh! — me detuve a un paso de él. — Tú no eres mi amigo… —Vi como su rostro se contrajo un poco. — Me abandonaste. — comencé a disminuir mas la distancia entre nuestros rostros.

—Key… —sus ojos intentaban buscar algo en mí.

— ¿Por qué? — coloqué una mano sobre su mejilla. — ¿Por qué te alejaste así de mi? — intentaba que mis lagrimas no saliera, pero sentía mis ojos húmedos.

—Sabes perfectamente que yo no fui. —dijo en tono serio y con firmeza.

— ¡Claro que sí! —aun tenía mi mano sobre su rostro, lo empujé haciendo que chocara contra la pared. —Tú lo hiciste hace dos años cuando peleamos. — Mis lágrimas por fin habían salido completamente. —Pensé que al otro día vendrías y me pedirías que considerara las cosas. —dejaba pequeños golpes sobre su pecho. —Pero al otro día no volviste a mí, ni al día siguiente, ni al siguiente… — su manos tomaron las mías para impedir que lo siguiera golpeando. — nunca…

—Key, yo…

— ¿Acaso no era importante para ti? — aun con sus manos sobre las mías lo tomé del rostro. — Tú me olvidaste JinKi.


Hice lo que desde los 12 años, quizás lo comencé a sentir desde antes, pero nunca lo había sentido tan fuerte hasta los 12. Esos deseos de juntar mis labios con los suyos. Sentir aquellos gruesos labios. Al fin lo hice, pero no fui correspondido.


—Onew…—me separé con la mirada baja y dejando mis abrazos a los lados como si de dos trapos se trataran. —Tú me has olvidado.


Me di la media vuelta rápidamente para salir de aquel lugar. Mi peor temor se había vuelto realidad, el me había olvidado. Aquel que me había prometido una amistad por siempre se había olvidado de mí.
Corre lejos, fue lo que mi mente me dijo. Pero algo me detuvo.


Sus labios sobre los míos.


—Sigues siendo tan infantil. —dijo después de separarse.


¿Me besó? ¿Acaso era un sueño?


— ¿Por qué nunca me dejas hablar? ¿Por qué nunca me dejas terminar de decirte las cosas importantes?

— ¿Eh? … — aun no sabía si lo que estaba pasando era realidad.


Me tomó de las caderas y me alzó, sentándome en los lavabos. Se colocó en entre mis piernas y con sus manos quitó las lagrimas que todavía estaban en mis mejillas.


—Sigues siendo un niño berrinchudo. —tomó mi rostro entre sus manos. — Eso era… ¡No! —se corrigió. —Es lo que más amo de ti.


Se acercó lentamente a mi rostro. Con sus labios rosó suavemente los míos, haciendo que mi corazón latiera más rápido. Un sólo roce hizo que mi corazón se desbocara.
Cuando por fin colocó completamente sus labios sobre los míos, sentí que mi corazón explotó. Esos labios moviéndose lentamente sobre los míos son lo que desde hace tiempo había soñado, deseado.


—Amo todo de ti… — mi respiración se aceleró con aquellas palabras. — ¿Por qué dejaste de querer ser mi amigo? —en su mirada había amor y nostalgia.

—Yo…— que debía decirle, el me vería como una “niñita celosa”. — no sé. —dije bajando la mirada.

—Ah! ¿No me lo dirás?.. —pegó su cuerpo mas al mío.


Sus manos se dirigieron a mis caderas apuntándolas y a la vez jalándome más hacia a él. Su rostro quedó enterrado en mi cuello, podía sentir su respiración en el. Yo solo pude rodear su cuello y abrazarme a él.


—Dime. — comenzó a besar mi cuello suavemente.

—JinKi… —empecé a sentir algo caliente en recorrer mi cuerpo.

—Onew, acuérdate como me llamabas. —su aliento hacia cosquillas sobre mi piel.

—Onew… —solo pude pronunciar su nombre en un suspiro.

—Dime... — dijo mordiendo mi cuello, haciendo soltar un quejido.

—Ah… Comenzaste a salir más con tus amigos y ya no salías conmigo… — intentaba decirle el porqué, pero sus manos sobre mis caderas me distraían. —como antes… tu sonrisa… ah… —sus manos se paseaban por debajo de mi playera. — Tú… dejaste de pertenecerme. — el se separó de mí para mirarme a los ojos.

— ¿Quién te dijo esa mentira? —rió.

—No necesitaba que alguien me lo dijera JinKi, yo solo medí cuenta.

—Key… —tomó mi rostro con sus dos manos. —yo siempre fui tuyo, yo… —sonrió al piso sin soltar mi rostro. —Yo te amo.


Se acercó rápidamente e impacto sus labios con los míos, moviéndolos mas rápidos.


—Y es Onew, no JinKi… Onew.



Nuevamente juntó nuestros labios de una manera salvaje, esta vez intentando introducir su lengua en mi boca. Sus manos apretaban fuertemente a los lados de mi rostro que pensé que quería romper mi cráneo en aquel beso. Pero no importa, por fin podía sentirlo. Por fin podía saborear aquellos labios tan deseados para mí. Pero ahora ya no solo quería probar sus labios, quería probar su cuerpo. Quería sentir su piel en mí, quería sentirlo cerca de mí…
Quité mis manos de su espalda y las bajé hasta sus caderas jalándolas más hacia a mí, mis piernas rodearon su cintura para empujarlo más cerca, quería sentirlo más...


Pero el niño berrinchudo tenía que salir a flote.


—Mentira… —dije bajándome, haciendo que nuestros miembros en momento se “tocaran” y se pudieran sentir aun sobre la tela. —Tú lo cumpliste.

—Key… —soltó un suspiro de resignación. — ya vas a…

—Dijiste que serías mi mejor amigo— comencé a caminar haciendo que el retrocediera. —que siempre estarías conmigo. —lo tomé de los hombros. — Recuerda ese “Por siempre”. —Intentaba recordar cuál de los cubículos era el baño con el retrete. — ¿Se te olvidó? —con mis manos sobre sus hombros lo dirigía a aquel lugar.

Cuando hubimos entrado al cubículo cerré con seguro y me volteé para verlo. Su cara se veía confundida. Mis manos bajaron desde sus hombros hasta el botón de sus pantalones. Con toda la calma del mundo lo desabroché y antes de bajar sus pantalones lo besé delicadamente.


—Key… que… —titubeó al verme bajando mi short junto con mi bóxer.

—Eres más grande que yo. — dije pegándome a su cuerpo y bajando sus bóxers de una sola vez. — ¿Acaso no te diste cuenta de lo que sentía? ¿En verdad no te importaba?...


—Key te digo que Te amo, que parte de TE AMO no te queda claro. — me tomó de los brazos.

— ¿Entonces por qué? ¿Por qué? — me solté bruscamente de su agarre haciendo que callera sobre el retrete. Lo bueno que estaba abajo la tapa, si no…

— ¡Dios Key, te lo dije! siempre tenía tareas, ya no estaba en la primaria. Además eso nunca me impidió…
— ¡No! ¡No! ¡Eso no!... —mis lagrimas querían volver a salir… ¡dios! ¿Por qué tenía que ser tan bipolar? — ¿Por qué no volviste a mi? ¿Por qué después de ese día no regresaste a mi? No importa si hubieras regresado diciéndome que me había equivocado, pero yo solo quería, yo solo soñaba con que algún día vendrías a mí nuevamente. ¿Por qué?


El silencio llegó a ese lugar por unos cuantos segundos.


—Yo… —el intentaba ordenar lo que me diría. —realmente quería regresar y decirte que quería seguir siendo tu amigo. Pero… — desvió la mirada.

—Pero que Onew…

—Desde hace tiempo… había comenzado a sentir algo por ti. — me Miró a los ojos. —Pero tú eras más pequeño que yo, eres hombre al igual que yo. ¿Qué futuro tendrías conmigo? Yo… yo ya no era una buena persona para ti. — bajó su mirada.


¿Qué si no era una buena persona para mí?


—Onew. — me acerqué y tomé delicadamente su rostro. —Tú eres lo mejor que hay para mí… — le sonreí sinceramente, mi primera sonrisa sincera desde aquella vez.



Me acerqué y lo besé. Era un beso que transmitían todos esos sentimientos que por mucho tiempo aviamos reprimido. Un beso que poco apoco fue subiendo de intensidad, de necesidad.
Por fin me había atrevido a introducir mi lengua en su boca, quería sentir cada parte de ella. Coloqué mis manos sobre su nuca ejerciendo presión para hacer más profundo aquel beso. Sus manos se dirigieron a mis caderas para hacerme sentar sobre él, quedando a horcajadas sobre sus piernas.


—Quiero que solo me sonrías a mí. — dije separando mis labios de los suyos.

—Niño berrinchudo, eso me es imposible. Me dirían el amargado.

—Yo no sé. — comencé a besar frenéticamente su cuello y a mover mis manos por debajo de su playera. —pero solo quiero que seas mío.

—Soy solo tuyo… ah~


Podía sentir como su miembro iba despertando cada vez más, sintiendo aquel rose sobre mi trasero. Dirigí una de mis manos hacia su miembro ya completamente duro y me puse de pié.


—Key creo que primero debes… Ah~


No escuché lo que me quería decir y enteré su miembro en mi entrada. Siento que debo dejar hablar a las otras personas y dejar de ser berrinchudo por mi propio bien. Dolía, y eso que solo era la punta. Poco a poco fui sentándome hasta que hubo entrado completamente.


—Debes aprender a escucharme… —la voz de Onew se escuchaba un poco acelerada..

—Cállate.


Cuando sentí que el ambiente se estaba enfriando, comencé a subir y a bajar lentamente. Intentaba que no brotaran lágrimas de dolor, pero fe fue imposible. Escondí mi rostro en su cuello para que el no me viera llorar… Dicen que todo tiene su tiempo… Llegó el momento en que aquel movimiento dejó de molestarme. Mi cuerpo comenzaba a sentir una sensación que nunca antes había sentido, o al menos no con alguien. Mi cuerpo automáticamente comenzó a subir y a bajar más rápidamente, haciendo que esporádicamente nuestras bocas soltaran unos gemidos.


Y aquí viene nuevamente el Key berrinchudo.


—Di... dijis... — no podía articular palabra por lo que estaba sintiendo en aquel momento. —Dijiste que serias… —pero el orgullo del Gran Key podía más— Mi mejor amigo… Por siempre. —su manos tomaron fuertemente mis caderas aumentando la rapidez con la que subía y bajaba.

— ¿Puedes estar pensando en algo como eso, aun en la situación que esta? Por dios Key!... —sentí como su cuerpo se contraía—. ¿Por qué tienes que ser tan estrecho? — sentía como algo, una sensación se acumulaba en mi.

—Y dices que yo soy el berrinchudo. — enterré mis uñas en su espalda, estaba a punto de venirme. — ¿Sabes cuánto sufrí cuando te veía sonreírle a esa chicas?

—Key… Ah~—hizo todo el esfuerzo posible por mirarme a los ojos. —Mi sonrisa, mi tiempo, siempre fueron para ti. Soy solo tuyo.


Aquellas palabras terminaron de llenar aquellas emociones y sensaciones que se concentraban en mi cuerpo. Un Te amo, por parte de nuestras bocas fue suficiente para llegar a la gloria.
Aun con nuestras respiraciones entrecortadas nos besábamos dulcemente, intentando que aquel momento no acabara y fuera por siempre.


— ¡Aish! Mi camisa se mancho. —hice un puchero de desaprobación a lo sucedido.

—Ya, ya niño berrinchudo. Yo te compraré una nueva.

— ¿De verdad?... — lo abrasé ilusionado. El solo asintió mostrándome una hermosa sonrisa.


Ahora, ya me sentía feliz. Me sentía completo. Me sentía curado.


— ¿Amigos? — alzó su dedo meñique.


De repente un miedo entró en mi. ¿Qué pasa si se vuelve a alejar de mí? ¿Qué pasa si se vuelve a olvidar de mí? Pero… él en realidad nunca se olvidó de mí, el siempre me tuvo presente… Me acerqué y entrelacé mi dedo con el suyo, depositando un dulce beso en sus gruesos labios. No quería separarme de él.


—Por siempre…

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Pues, la verdad me he sentida identificada con el personaje de Key, o a lo mejor es que medescribí a mi misma xD ahahah.
Si abran notado el lemon tiene muchas interrupciones, y es lo que me decia mi Editora *vale, mi editora ahaha xD* es que como pueden estar en la escena HOT y salga Key con sus berricnhes. Pero realmente eso es lo que quise dar a ver, un Key *un yo .____.* que simpre hace lo que quiere y lo consigue a base de berrinches, no importa en que situación se encuentre. Pero apesar de su peculiar personalidad *mi... * eso es lo que mas le gusta a Onew. Raro ¿no? Conocen personas asi? O_O

Mi Mixool♥ espero y te guste! Lo hice con mucho amor y gripa(?) para ti ~ Disculpa por tardar mucho, pero es que como me he puesto a subtitular uno programas de SHINee para el foro y luego los fics, no me ha dado mucho tiempo .___. de verdad lo siento.

Espero sus comentarios